Talic se declara inocente de los cr¨ªmenes de guerra que se le imputan

En su primera comparecencia ante los jueces del Tribunal Penal para la antigua Yugoslavia, el jefe del Estado Mayor serbobosnio, Momir Talic, se mantuvo impasible. Flanqueado por los guardias de Naciones Unidas, el prisionero n¨²mero 31 se levant¨® y, tras identificarse, como le pidi¨® el juez, se proclam¨® con voz firme "inocente" de todos los cr¨ªmenes de guerra de los que se le acusa. La vista tan s¨®lo dur¨® unos minutos. Talic, que hab¨ªa abandonado el flamante uniforme de general con el que fue detenido en Viena, apenas tuvo que escuchar un resumen de los brutales cr¨ªmenes contra la humanidad de los que le responsabiliza la fiscal¨ªa. Las campa?as de terror, deportaciones, asesinatos y detenciones arbitrarias en campos en los que las violaciones y torturas eran habituales, fueron eufem¨ªsticamente reducidos al t¨¦rmino "persecuciones por motivos pol¨ªticos, raciales y religiosos". En el acta de acusaci¨®n, que se mantuvo en secreto hasta el 25 de agosto -el d¨ªa en que el general fue sorpresivamente detenido mientras participaba en un seminario organizado por la Organizaci¨®n para la Seguridad y Cooperaci¨®n en Europa-, se le responsabiliza de "planear, organizar y ejecutar un plan de exterminio y expulsi¨®n de todos los musulmanes y croatas" al noroeste de Bosnia en 1992.