Agassi enciende Flushing Meadows
El estadounidense gana su quinto Grand Slam tras derrotar ayer a Todd Martin
Con los brazos levantados y una expresi¨®n de incredulidad parecida a la de Roland Garros el pasado mes de junio, Andre Agassi celebr¨® su quinto triunfo en un torneo del Grand Slam. El estadounidense venci¨® ayer a su compatriota Todd Martin, el caballero de las pistas, por 6-4, 6-7 (5-7), 6-7 (2-7), 6-3, 6-2 en 3 horas y 22 minutos, y se proclam¨® por segunda vez campe¨®n del Open de Estados Unidos. Agassi se hab¨ªa coronado ya en Flushing Meadows en 1994, pero ni siquiera aquel ¨¦xito le ilusion¨® tanto como ¨¦ste.A los 29 a?os, aquel chico de caballera rubia ataviado con colores estridentes ha madurado. Sigue con su personalidad carism¨¢tica y persisten algunos de los tics que le hicieron famoso. Pero es una persona mucho m¨¢s reflexiva, tal como demuestra que a los 29 a?os est¨¦ desarrollando el mejor tenis de su vida. En 1997 Agassi concluy¨® como el 122? del mundo, tras una vida disipada en los alrededores de Hollywood. Toc¨® fondo, pero fue capaz de regresar a sus ra¨ªces y rehacer una carrera que parec¨ªa acabada. "S¨®lo yo s¨¦ el trabajo que me ha costado regresar", indic¨®. El triunfo de Agassi desmonta en parte la carrera de Martin, que aspiraba a ganar su primer Grand Slam en ¨¦sta su segunda final.
El partido fue lineal y no aport¨® grandes novedades. Tal vez la m¨¢s importante fue constantar el excelente momento de forma por el que atraviesa Martin a sus 29 a?os. Nunca antes hab¨ªa logrado desarrollar un nivel de tenis semejante al actual. Nunca antes, por otra parte, hab¨ªa demostrado tanta confianza en s¨ª mismo. Y fue, precisamente, este aspecto m¨¢s personal el que le permiti¨® sobrevolar por encima del carisma de Agassi, de la preponderancia que le daba la estad¨ªstica (le hab¨ªa ganado en nueve de sus 14 enfrentamientos anteriores) y de los cuatro Grand Slam que esgrim¨ªa en su palmar¨¦s.
"Si se lo cree, puede ganar a Agassi", hab¨ªa comentado Pepe Higueras, que est¨¢ trabajando con Martin desde que ¨¦ste decidi¨® dedicarse por completo al tenis y aparcar sus estudios universitarios en 1990. Sin embargo, cuando Martin perdi¨® su saque en el primer juego, no dio la sensaci¨®n de que mentalmente fuera a soportar el calvario que le esperaba. La presi¨®n de una final del Grand Slam es la misma para todos. Pero es evidente que si llevas ya cuatro t¨ªtulos en la espalda, puedes afrontarla m¨¢s tranquilo que si a los 29 aspiras a¨²n a ganar el primero.
Perder el primer saque de un partido cuando te enfrentas a un gran servidor como Agassi no es ninguna tonter¨ªa. La consecuencia de aquel hecho fue que Martin tuvo que consolidar m¨¢s su saque y tomar m¨¢s riesgos en el resto para intentar recuperar el break. La ocasi¨®n le lleg¨® en el cuarto juego, cuando dispuso de 0-40. Pero Agassi salv¨® el lapsus esgrimiendo una cualidades innatas para solventar situaciones dif¨ªciles.
La cuesti¨®n fue que aquel break inicial, fue el ¨²nico que se produjo en las tres primeras mangas. Y si la situaci¨®n dio un vuelco espectacular fue s¨®lo porque Martin, siempre reflexivo y sereno, fue capaz de no perder la calma, de no obsesionarse con la p¨¦rdida del primer set, y de mantener el mismo nivel de saque que le ha llevado a anotarse 128 aces en este torneo. Ganando dos desempates, Martin se encontr¨® controlando el partido por dos mangas a una. Y ni siquiera la p¨¦rdida de un nuevo saque en el tercer juego (1-2 de Agassi y saque) del cuarto set fue capaz de frenar sus apiraciones. Martin sigui¨® luchando, sigui¨® entregado, sigui¨® conectando bolas en las l¨ªneas, subiendo a la red a la m¨¢s m¨ªnima ocasi¨®n, e intentando poner presi¨®n a Agassi. Y casi logr¨® su objetivo. En el octavo juego dispuso de dos bolas de rotura, que no pudo aprovechar. Y Agassi, con la solidez propia de sus mejores momentos, gan¨® la manga y forz¨® la quinta. Ah¨ª acab¨® propiamente el partido. Martin, que durante la semana hab¨ªa sufrido los efectos de un virus estomacal, descubri¨® que comenzaba a sentirse cansado. Y esa sensaci¨®n se acus¨® cuando Agassi se coloc¨® con 3-0. Su aspiraci¨®n de ganar un Grand Slam estaba pasando a mejor vida.
La jornada se complet¨® con una nueva victoria de la familia Williams. Serena y Venus se impusieron a la americana Chanda Rubin y a la francesa Sandrine Testud por 4-6, 6-1, 6-4. Final masculina: Agassi vence a Martin por 6-4, 6-7 (5-7), 6-7 (2-7), 6-3, 6-2. Femenina: S. Williams, a Hingis por 6-3, 7-6 (7-4). Dobles masculinos: Laureau-O"Brien, a Bhupathi-Paes por 7-6, 6-4. Dobles femeninos: Williams-Williams, a Rubin-Testud por 4-6, 6-1, 6-4. Dobles mixtos: Sugiyama-Bhupathi, a Po-Johnson por 6-4, 6-4. Veteranos mixtos: Orantes-Kloss a Turnbull-Gorman por 7-6, 4-6, 7-6. Junior masculino: Nieminen, a Pless por 6-7, 6-3, 6-4. Junior femenino: Krasnoroutskaia, a Petrova por 6-3, 6-2.
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