JUAN BONILLA ESCRITOR "Si hay un visionario en este siglo, ¨¦se es Borges"

Aunque la carrera profesional de Juan Bonilla (Jerez de la Frontera, 1966) arranca en los medios de comunicaci¨®n -dirigi¨® los informativos de Radio Am¨¦rica y fue redactor jefe de Ajoblanco, entre otros empe?os-, muy pronto su nombre destac¨® entre las propuestas m¨¢s atractivas de la nueva narrativa espa?ola. Libros como 25 a?os de ¨¦xitos o El que apaga la luz delatan el buen pulso que demostrar¨ªa tanto en el verso (Partes de guerra) como en el art¨ªculo (El arte del yo-yo) o en la novela. Dentro de este g¨¦nero, su libro Nadie conoce a nadie ha llegado a la pantalla de mano de Mateo Gil. Pregunta. ?Cu¨¢l fue su papel en la pel¨ªcula de Nadie conoce a nadie? Respuesta. La verdad es que me desentend¨ª por completo. Me limit¨¦ a prestar generosamente mi n¨²mero de cuenta bancaria para que me agradecieran el esfuerzo. Cuando me enviaron tres o cuatro guiones para conocer mi opini¨®n, y me di cuenta de que ten¨ªan una idea muy concreta de lo que quer¨ªan hacer, decid¨ª apartarme. P. ?Esta experiencia cinematogr¨¢fica colma alguna aspiraci¨®n suya? R. Cuando se est¨¢ escribiendo una novela, uno no piensa que se pueda hacer una pel¨ªcula con ella. Con ¨¦sta, en concreto, creo que era especialmente dif¨ªcil de adaptar, aunque siempre he tenido suerte en eso: se hizo un corto con un relato m¨ªo, ahora van a hacer otro..., pero nunca me siento a escribir con esa idea. P. ?Puede decirse que en las letras espa?olas nadie conoce a nadie? R. No, hay mucha gente que se conoce a s¨ª misma y a los dem¨¢s... (risas). P. ?Mejor decir que nadie se f¨ªa de nadie? R. Depende de qui¨¦n se f¨ªa y en qui¨¦n conf¨ªa. P. Usted se march¨® de Andaluc¨ªa cuando empezaban las batallas sectarias. ?Fue una huida premonitoria? R. Sobre ese asunto siempre he dicho lo mismo, es como si en el barrio en el que vives los vecinos siempre se est¨¢n peleando, t¨² lo padeces y, en ocasiones, incluso te ves involucrado. Pero basta con que te mudes para que s¨®lo te lleguen ecos. Entonces te hace gracia. De todos modos, est¨¢ bien para pasar el tiempo y potencia una instituci¨®n fundamental como es la tertulia. P. ?El Bonilla escritor se entiende con el Bonilla articulista? R. Son esencialmente el mismo. Ser¨ªa absurdo que un arquitecto, por ejemplo, se pusiera a hacer s¨®lo cementerios, pero no hospitales. P. Como admirador de Borges, ?sale bien parado en su centenario? R. Creo que hay una lectura excesivamente pedante de Borges. Se olvida que si hay un visionario en este siglo, ¨¦se es ¨¦l: hablando de la Biblioteca de Babel, de Aleph, se anticipa a Internet y a todo lo que est¨¢ ocurriendo. Lo que le deseo a Borges es que siga en los libros de bolsillo y se pasee menos por las tesis doctorales.