"Las madrile?as se organizaron por vez primera en la guerra"

Mary Nash es una mujer de talante reflexivo y afable. Nacida en la localidad irlandesa de Limmerick, estudi¨® Historia en la Universidad de Cork. Un buen d¨ªa, decidi¨® situar su destino en el Sur. Viaj¨® primero a Italia donde permaneci¨® un a?o y recal¨® luego en Barcelona. Era mayo de 1968 y la sensaci¨®n de v¨ªspera de nuevos y mejores tiempos, que entonces impregnaba el ambiente, unida a su inter¨¦s por un pasado tan intenso como el de Espa?a, le hicieron quedarse en la capital catalana y echar en ella ra¨ªces. Pugn¨® por una c¨¢tedra de Historia Contempor¨¢nea en la Universidad de Barcelona, que hoy desempe?a. Se consagr¨® a la tarea investigar en un universo que, hasta entonces, apenas hab¨ªa encontrado atenci¨®n en las aulas: la historia social de las Mujeres. Comprob¨® que Espa?a hab¨ªa sido uno de los escenarios donde la actitud de la mujer expresaba de mejor manera el combate femenino por conseguir la presencia social que tanto esfuerzo le cost¨® conquistar. Y se dedic¨® a estudiar ese pasado repleto de anhelos, retrocesos y avances. Resultado de sus afanes es el libro que acaba de publicar, Rojas, (Editorial Taurus) un ensayo sobre las mujeres republicanas en la guerra civil espa?ola, presentado ayer en el C¨ªrculo de Bellas Artes.Pregunta. ?Por qu¨¦ su inter¨¦s por las mujeres republicanas?

Respuesta. Creo que la amnesia cubri¨® de desconocimiento esa etapa hist¨®rica. He querido reconstruir ese fragmento de la memoria.

P. ?Cu¨¢l fue la contribuci¨®n de las mujeres republicanas espa?olas?

R. Consisti¨® en romper los moldes impuestos que las condenaban a ser ¨¢ngeles del hogar y que ellas transformaron organiz¨¢ndose, por primera vez de forma masiva, en la defensa de sus derechos.

P. ?Con qu¨¦ dificultades principales se enfrentaron?

R. La imagen transgresora de las milicianas j¨®venes de mono azul, llenas de coraje combativo, de los meses iniciales de la guerra, di¨® paso a otra imagen, que acab¨® por imponerse, que las convirti¨® en pieza clave de la resistencia civil de retaguardia contra el fascismo. Miles de espa?olas, muchas madrile?as, se integraron en organizaciones femeninas: buscaban ocupar un espacio p¨²blico propio, que la situaci¨®n y la historia les negaba. Pero los cambios revolucionarios no se reflejaron en los cambios de relaciones entre g¨¦neros que ellas anhelaban.

P. ?Cu¨¢l es su conclusi¨®n?

R. Recuperar esa historia significa repensarla de nuevo y ver su importancia decisiva en los avances logrados muchos a?os despu¨¦s, durante la transici¨®n a la democracia.

P. Bajo la dictadura, ?c¨®mo prosigui¨® esa resistencia?

R. Resistieron cuanto pudieron el discurso natalista del franquismo. Prueba de ello fue que la explosisi¨®n demogr¨¢fica, pese a todas las presiones sufridas desde el comienzo del r¨¦gimen, no surgi¨® hasta muchos a?os despu¨¦s.