Un polic¨ªa confiesa ser el autor del tiro que dej¨® ciego a un menor tras una persecuci¨®n

VIENE DE LA P?GINA 1Los j¨®venes, al ver el coche patrulla, emprendieron la huida hasta detenerse en un descampado cercano a Valdeming¨®mez. Pararon porque el coche estaba destrozado y no andaba m¨¢s, seg¨²n confes¨® a este peri¨®dico su conductor, Rafael P.H, alias El Rubio. Un ocupante se ape¨® del veh¨ªculo y logr¨® huir campo a trav¨¦s. Los otros dos se quedaron dentro, desarmados. La v¨ªctima, el menor Jos¨¦ F.B., explic¨® as¨ª lo sucedido: "Iba a abrir la puerta del coche para bajarme cuando not¨¦ un fogonazo en el rostro".

En su confesi¨®n ante el juez, siempre seg¨²n fuentes cercanas al caso, el autor de los disparos, efectuados con una escopeta de postas, marca Franchy, admite que el coche estaba parado en el descampado y que, con una literna, se dirigi¨® hacia el veh¨ªculo mientras su compa?ero corr¨ªa tras uno de sus ocupantes, que hu¨ªa campo a trav¨¦s.

"Cuando me dirig¨ªa hacia la parte trasera del veh¨ªculo", afirma, "se abri¨® la puerta [la del copiloto, donde iba Jos¨¦ F.B.], me sobresalt¨¦ y dispar¨¦ sin dirigir el arma a ning¨²n sitio en concreto. Pens¨¦ que la escopeta no estaba cargada. Escuch¨¦ quejidos, me acerqu¨¦ m¨¢s al coche y vi que una persona sangraba por la cara; entonces mi ¨²nica preocupaci¨®n era llevarle a un hospital". Luego lleg¨® otro coche patrulla, y tambi¨¦n su compa?ero, que volv¨ªa sin ¨¦xito de perseguir al joven que hab¨ªa huido campo a trav¨¦s. Seg¨²n el autor de los disparos, "ninguno de sus compa?eros le pregunt¨® lo que hab¨ªa pasado". El polic¨ªa se quej¨® ante el juez de que su compa?ero, m¨¢s veterano, "saliera corriendo tras el joven y le dejase a ¨¦l solo all¨ª sin darle instrucciones".

La versi¨®n dada al juez por su compa?ero del coche patrulla, Francisco C.R., resulta un tanto contradictoria. ?ste afirma que sali¨® detr¨¢s de uno los ocupantes del coche y que no pudo alcanzarlo, y que al volver donde estaba su compa?ero -el autor del disparo- ¨¦ste le dijo que hab¨ªa un herido, pero nada m¨¢s. "No pregunt¨¦ nada, y luego, en comisar¨ªa, tampoco me dijeron nada".

Extra?o silencio

?Y no oy¨® usted el ruido de los disparos?, le pregunt¨® delante del juez el abogado de la v¨ªctima, Eduardo Alarc¨®n. "No", respondi¨®, pese a estar a menos de cien metros del lugar donde se produjo la detonaci¨®n, seg¨²n consta en el sumario. Asegura que no sospech¨® nada porque al volver no vio a su compa?ero con la escopeta con la que dispar¨®. Los agentes aseguran que en todos los coches patrulla de la polic¨ªa suele haber una escopeta de postas y que habitualmente est¨¢n descargadas.

La v¨ªctima, Jos¨¦ F.B., ha declarado al juez que cuando era trasladado al hospital, con sangre en los ojos, los agentes le dijeron que el autor de los disparos hab¨ªa sido el due?o del bar atracado, que les hab¨ªa seguido. Un portavoz de la polic¨ªa neg¨® posteriormente a este peri¨®dico esa posibilidad ("ese se?or estaba fuera de Madrid ese d¨ªa").

La versi¨®n oficial facilitada por la polic¨ªa a este peri¨®dico tras el suceso dec¨ªa as¨ª: "Que a las 20.50 del 17 de mayo, un coche patrulla fue alertado de un robo cometido en una bodega de la calle de Jadraque (Vallecas). Los agentes se toparon con el veh¨ªculo robado, un Fiat 1 de color rojo, en la calle de Mata del Agua, en Villa de Vallecas, y que, al ver ¨¦stos que la polic¨ªa les segu¨ªa, aceleraron. La persecuci¨®n dur¨® entre 10 y 15 minutos, y termin¨® en Valdeming¨®mez, donde fueron detenidos dos de los tres ocupantes del coche".

Sin embargo, desde el primer momento la v¨ªctima y El Rubio, el conductor del veh¨ªculo robado, aseguraron que los disparos los efectu¨® un agente que se baj¨® del patrulla y dispar¨® a los cristales del asiento del copiloto. Al o¨ªr las detonaciones, los otros dos ocupantes del veh¨ªculo robado salieron huyendo. Uno de ellos es el conductor del veh¨ªculo, Rafael P.H., de 19 a?os, que fue detenido. D¨ªas despu¨¦s, al tener conocimiento de que su amigo se hallaba casi ciego y hospitalizado en el Gregorio Mara?¨®n y que la polic¨ªa negaba haber efectuado los disparos, compareci¨® voluntariamente ante el juez y corrobor¨® la versi¨®n de la v¨ªctima; esto es, que el autor del disparo fue un polic¨ªa. "?Qui¨¦n pudo disparar si eran ellos los ¨²nicos que nos segu¨ªan? No hab¨ªa nadie m¨¢s a esas horas en el descampado", coment¨® Rafael P.H. a EL PA?S al t¨¦rmino de su declaraci¨®n judicial.