El rodillo espa?ol
Los n¨²meros convierten a la selecci¨®n de Camacho en la mejor de Europa
Como un rodillo. As¨ª ha actuado la selecci¨®n espa?ola en su carrera hacia la Eurocopa del 2000, en la que se ha permitido lujos que hasta hoy parec¨ªan prohibidos. Si en el f¨²tbol los n¨²meros tuvieran categor¨ªa de ley, Espa?a bien podr¨ªa presumir de haberse convertido en la mejor selecci¨®n de Europa del a?o en curso. Adem¨¢s, a lo grande.Incluso a nivel hist¨®rico, los logros del equipo no tienen parang¨®n en Europa, pues nunca una selecci¨®n se hab¨ªa atrevido a tanto en una fase de clasificaci¨®n para la Eurocopa. La Espa?a de Jos¨¦ Antonio Camacho ha ganado los siete partidos que ha disputado, pues el otro, el que se perdi¨® lastimosamente en Chipre, pertenece al debe de Javier Clemente. Y los ha ganado, adem¨¢s, de la forma m¨¢s ruidosa, derribando todos los registros conocidos. Espa?a ha logrado 42 goles, lo que arroja una media de m¨¢s de cinco por partido, cifra ¨¦sta jam¨¢s conseguida por equipo alguno.
Lejos queda el recuerdo de Chipre, en el estreno espa?ol en esta fase de clasificaci¨®n. All¨ª cay¨® el equipo (3-2) y Clemente dej¨® su puesto a Camacho. Desde entonces, el actual seleccionador se ha sentado en el banquillo en 11 encuentros, los siete de clasificaci¨®n y cuatro amistosos, y su bagaje muestra diez victorias y un empate, lo que le convierte en el seleccionador espa?ol con mejores n¨²meros de cuantos alguna vez se sentaron en su banquillo. Esa estad¨ªstica viene, adem¨¢s, adornada por los 48 goles conseguidos a favor, por s¨®lo seis en contra.
A Camacho le han bastado 13 meses para pulverizar cuantas marcas ten¨ªa a su alcance. Para conseguirlo ha utilizado a 35 jugadores, de los que s¨®lo uno, Joseba Etxeberr¨ªa, ha actuado en los 11 partidos. En lo que a goleadores se refiere, la lista la encabeza Ra¨²l, con 11, lejos de sus perseguidores, Hierro y Urzaiz. De esos 35 futbolistas con los que ha contado el seleccionador, 16 han vivido su estreno internacional a las ¨®rdenes de un Camacho cuya trayectoria no admite comparaci¨®n poisible con la de ninguno de sus antecesores.
Incluso la FIFA, tan aficionada a hacer clasificaciones simb¨®licas seg¨²n el rendimiento de cada selecci¨®n, ha llegado a la conclusi¨®n de que el mejor equipo del mundo en el a?o 99 no es otro que la selecci¨®n espa?ola, que comenz¨® el a?o siendo considerada la n¨²mero 15 del planeta y hoy es la cuarta, por detr¨¢s de Brasil, la Rep¨²blica Checa y Francia.
Pero toda la euforia que estas y otras cifras, y el magn¨ªfico juego desplegado en los ¨²ltimos tiempos, puedan levantar, no inmuta a Camacho, Guardiola y compa?¨ªa, quienes no dejan de recordar un par de hechos irrefutables: Espa?a a¨²n no es campe¨®n de nada y su verdadero potencial habr¨¢ que juzgarlo cuando se enfrente a rivales de mayor enjundia que Chipre, excepto aquel d¨ªa del 3-2 tan lejano como olvidado, San Marino, Austria o Israel, los cuatro que han doblado la rodilla ante Camacho y los suyos, que acudir¨¢n el pr¨®ximo verano a disputar la Eurocopa. Y lo har¨¢n como favoritos, algo de lo que tiene buena culpa la estad¨ªstica, pero m¨¢s a¨²n el f¨²tbol que han sido capaces de ense?ar.
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