Una patrullera lesbiana demanda a la polic¨ªa en EE UU por violar sus derechos
Que en el cuerpo de polic¨ªa de Nueva York haya 800 homosexuales declarados (de un total de 38.000), que tengan un sindicato propio desde hace 15 a?os y que hayan ido arrancando derechos como el de participar en uniforme en el desfile anual de D¨ªa del Orgullo Gay no significa que todos los agentes de la polic¨ªa m¨¢s pol¨¦mica de Estados Unidos acepten determinadas situaciones. Por ejemplo, que dos compa?eras se casen.Elizabeth Bryant, de 34 a?os, patrullera en el Bronx, asegura que algunos de sus compa?eros y superiores le han hecho la vida imposible desde que en 1997 decidi¨® contraer matrimonio con la agente Marilyn Trapanotto, de 35 a?os. Bryant ha demandado al departamento de polic¨ªa por violar sus derechos y pide una indemnizaci¨®n de 800 millones de pesetas.
"Le han hecho vivir un infierno", asegura su abogado. Bryant tuvo que dejar de patrullar las calles porque ning¨²n agente accedi¨® a ser su compa?ero, otro polic¨ªa intent¨® agredirla y, cuando se quej¨® a sus superiores, fue acusada de mal comportamiento. "No s¨®lo el Departamento de Polic¨ªa le dio la espalda, tambi¨¦n la castig¨® por protestar", recalca el abogado. A los pocos d¨ªas de la boda, alguien colg¨® en su taquilla la foto de un culturista con la cara de la patrullera pegada encima. "Le dije que guardara aquel cartel porque en el futuro podr¨ªa servir como prueba del hostigamiento", recuerda Trapanotto.
La portavoz del cuerpo, Marilyn Mode, quiso puntualizar que uno de los demandados, el comisario Howard Safir, fue uno de los que defendi¨® dentro del departamento el derecho de los polic¨ªas homosexuales a participar de uniforme en el desfile del D¨ªa del Orgullo Gay. Y aclar¨®: "Tenemos un gran nivel de reclutamiento en la comunidad homosexual".
Bryant, a la que sus padres expulsaron de su casa en Carolina del Norte cuando conocieron sus inclinaciones sexuales, conoci¨® a Trapanotto en un bar hace cuatro a?os. "Yo estaba a punto de graduarme en la Academia de Polic¨ªa, ella ya era un agente. Yo no paraba de hablar de mi experiencia en la academia y ella escuchaba tan atentamente. Fue fabuloso", recuerda ahora Bryant.
Se casaron en Central Park en 1997, pocos d¨ªas antes de que los agentes homosexuales de la polic¨ªa de Nueva York lograran participar de uniforme por primera vez en el desfile de la comunidad gay.
Pero la lista de reivindicaciones de la asociaci¨®n de oficiales homosexuales es a¨²n muy amplia. Ha conseguido recientemente que el departamento de polic¨ªa establezca multas de hasta 2,5 millones para castigar actos de discriminaci¨®n contra agentes gays, y ahora aspira a que se establezca una cuota de agentes homosexuales en determinados departamentos, como la tienen las minor¨ªas ¨¦tnicas.
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