Maragall se impone en Barcelona y barre a CiU

Sea por el recuerdo del electorado del Pasqual Maragall alcalde, sea por las expectativas de cambio o por el cansancio de un largo gobierno de Jordi Pujol, la candidatura encabezada por Maragall se impuso el domingo pasado con una rotundidad sin precedentes en la ciudad de Barcelona en unas elecciones auton¨®micas. El PSC-Ciutadans pel Canvi subi¨® algo m¨¢s de 16 puntos porcentuales respecto a los resultados que obtuvo en las auton¨®micas de 1995. Si en aquella convocatoria CiU se impuso en nueve de los diez distritos de la ciudad -s¨®lo en Nou Barris gan¨® el PSC-, en las del domingo el panorama ha cambiado profundamente: CiU tuvo m¨¢s votos que el PSC-Ciutadans pel Canvi s¨®lo en los distritos de clases m¨¢s acomodadas de la ciudad: Sarri¨¤-Sant Gervasi, Les Corts, Eixample y Gr¨¤cia. No obstante, CiU ha cosechado menos votos que en las elecciones de 1995.El PSC-Ciutadans pel Canvi domina en los restantes seis distritos de la ciudad: Ciutat Vella, Sants-Montju?c, Horta-Guinard¨®, Nou Barris -con m¨¢s del 54% de los votos-, Sant Andreu y Sant Mart¨ª. En alguno de esos distritos, los votos en favor de la candidatura de Maragall se han duplicado respecto a 1995. Y la ascensi¨®n del PSC en Barcelona ha corrido en paralelo con la p¨¦rdida de votos de las otras formaciones. CiU ha perdido un 5,06%, el PP 4,81% e Iniciativa per Catalunya es la que ha resultado la peor parada y ha registrado un descenso de 6,70%. Esquerra Republicana es la formaci¨®n que menos se ha desgastado en la ciudad de Barcelona y aunque ha bajado, ese descenso apenas supera un 1% respecto a los resultados que obtuvo en 1995.

En algunos distritos, la subida porcentual registrada por la lista encabezada por Maragall coincide con la suma de los tantos por ciento que bajan todos sus oponentes juntos. Eso ocurre, por ejemplo, en Les Corts, donde el PSC sube 14 puntos y CiU, junto con el PP e IC bajan exactamente los mismos. Lo mismo se repite en Sarri¨¤. As¨ª las cosas, est¨¢ claro que una parte importante del electorado que en las auton¨®micas votaba a CiU y PP ha decidido dar su confianza en esta ocasi¨®n a Maragall, bien sea por cansancio -que podr¨ªa ser el caso de los electores hasta ahora fieles a CiU- o por manifiesto deseo de impedir que Pujol saliera victorioso de nuevo, lo que podr¨ªa ser la causa del trasvase de votos del PP. En el caso de Iniciativa, la corriente de votos perdidos en favor de la lista del PSC-Ciutadans pel Canvi est¨¢ clara y los distritos en los que la formaci¨®n liderada por Rib¨® ha bajado m¨¢s son los mismos en los que la lista socialista ha subido m¨¢s porcentualmente.

El ¨ªndice de participaci¨®n ha sido sensiblemente inferior en estas elecciones, un 62,36%, frente al de las auton¨®micas de 1995 que se situ¨® en un 66%. Una abstenci¨®n que, seg¨²n los resultados, ha calado m¨¢s en CiU y PP.