Ma?as completa con 'Sonko 95' su tetralog¨ªa sobre j¨®venes de los 90

Jos¨¦ ?ngel Ma?as (Madrid, 1971) no concibe una novela sobre los j¨®venes que no dedique una atenci¨®n especial a la est¨¦tica. Sonko 95 (Destino), su nueva obra, con la que completa la tetralog¨ªa que inici¨® en 1994 con Historias del Kronen -su deb¨² en la literatura, con la que qued¨® finalista del Premio Nadal-, no es ajena tampoco a ese hecho. Los cientos de personajes que aparecen reflejados en las p¨¢ginas de las cuatro novelas -Kronen, de la que ha vendido m¨¢s de 100.000 ejemplares; Mensaka, Ciudad Rayada y Sonko 95- tampoco lo son. Los chicos ataviados con canguros, pantalones de Coronel Tapioca, pupilas dilatadas y mand¨ªbulas juguetonas se han hecho mayores aunque sigan frecuentando los mismos bares de marcha y consumiendo las mismas drogas.Ma?as, que define Sonko 95 como su novela m¨¢s autobiogr¨¢fica, narra las peripecias de un novelista de ¨¦xito, estancado en su trabajo, que decide prestar dinero a sus amigos para sacar adelante un bar, situado en la zona madrile?a pr¨®xima a Alonso Mart¨ªnez, lugar de encuentro de j¨®venes durante los fines de semana. Las descripciones de la movida en torno al bar Sonko se mezclan con la novela policiaca que est¨¢ escribiendo el protagonista.

Con Sonko 95 Ma?as cierra un ciclo y abre la que ser¨¢ su nueva v¨ªa literaria: "La novela policiaca y los inspectores de homicidios Pachecho, cocain¨®mano y homosexual, y Duarte, casado y con una hija, protagonizar¨¢n mi pr¨®ximo trabajo", aclar¨® ayer el escritor, que se defini¨® como un lector asiduo de novela negra. El escritor Juan Madrid y los inspectores de la Brigada de Homicios de Madrid ayudaron a Ma?as en el trabajo de campo de un g¨¦nero en el que es debutante.

El autor reconoce que, como sus obras anteriores, Sonko 95 es un trabajo muy visual donde predominan los di¨¢logos por encima de las descripciones. A esa caracter¨ªstica de su literatura achaca Ma?as el gancho que tienen sus novelas para ser adaptadas al cine. Tras Historias de Kronen y Mensaka, Ma?as ha vendido a un productor franc¨¦s los derechos literarios de Soy un escritor frustrado.