El Alav¨¦s regala el empate a la Real y la acerca al precipicio
Si se trataba de hacer de la necesidad virtud, el Alav¨¦s demostr¨® mejor curriculo, mayor disposici¨®n y mejor conocimiento de s¨ª mismo. La Real parece haberse acomodado al div¨¢n y le ha cogido gusto al psicoan¨¢lisis que dirige Krauss de forma un tanto rudimentaria, bien es verdad. A¨²n no hay diagn¨®stico.La necesidad hizo recular a los dos entrenadores a la hora de repoblar sus defensas con el fin de copar su parcela de terreno. El Alav¨¦s se sabe esa lecci¨®n, m¨¢s que por entrenamiento por la versatilidad de sus futbolistas. A Astudillo cualquier campo se le queda peque?o para su movilidad. Pablo, cubre el espacio sin correr: le basta su pierna izquierda. Con esos dos argumentos, el Alav¨¦s hizo de la necesidad (defenderse), virtud (controlar el bal¨®n y atacar con inteligencia).
REAL SOCIEDAD 1
ALAV?S 1Real Sociedad: Alberto; L¨®pez Rekarte, Antia, Loren, Pikabea (Bonilla, m. 76), Aranzabal; Mutiu, G¨®mez, De Pedro (Barkero, m. 70); Sa Pinto y De Paula (Aldeondo, m. 67). Alav¨¦s: Herrera; Contra, Eggen, Karmona, T¨¦llez, Josete; Astudillo, Desio (Javi Moreno, m. 87), Pablo (Azkoitia, m. 81); Magno (Salcedo, m. 71) y Kodro. Goles: 0-1. M. 23. Taconazo de Kodro a Desio que centra y Astudillo, libre de marcaje, bate a Alberto. 1-1. M. 36. L¨®pez Rekarte lanza un centro desde la l¨ªnea de fondo soprende al guardameta Herrera, aunque T¨¦llez llega a tocar cuando el bal¨®n ya se introduc¨ªa en la porter¨ªa. ?rbitro: Llonch Andreu (Colegio catal¨¢n). Expuls¨® a Contra (m. 60), Rekarte (m. 65) y Mutiu (m. 84) por doble amonestaci¨®n y mostr¨® tarjetas amarillas a De Pedro, Antia, y T¨¦llez. Unos 20.000 espectadores en el estadio de Anoeta.
A id¨¦nticos esquem¨¢s, la actitud y la calidad son factores determinantes. El Alav¨¦s se adue?¨® del bal¨®n y del criterio del partido hasta intimidar absolutamente a la Real, demasiado ocupada en aprender sobre la marcha un sistema que no ha practicado en las ¨²ltimas dos temporadas. Ni siquiera la posici¨®n centrada de De Pedro le otorg¨® raciocinio alguno, simplemente le alej¨® de Aranzabal y as¨ª se perdieron dos jugadores en vez de uno.
El Alav¨¦s lo hizo casi todo en el partido. Marc¨® un gol, se marc¨® el empate en propia puerta en un extra?o disparo de Rekarte, malgast¨® una buena porci¨®n de ocasiones y tuvo el bal¨®n casi siempre con sabidur¨ªa. Con el mismo esquema que la Real, el Alav¨¦s s¨ª atacaba y transitaba por el campo con el orden que se reclama para jugar al f¨²tbol. La movilidad de Kodro y Magno permit¨ªan estirar y juntar al colectivo, sacando a la Real de sus casillas. El equipo donostiarra demostr¨® toda la inseguridad que le atenaza. Krauss quiso juntar m¨¢s a sus jugadores, pero no se extrajo ni una s¨®la ¨ªdea de su caj¨®n. La Real cambi¨® de gui¨®n y se acerc¨® un paso m¨¢s al precipicio de la clasificaci¨®n. El Alav¨¦s, obtuvo un punto contable y unos cuantos de autoestima.
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