Inexactitud
Se?or director, el motivo por el que me dirijo a usted es debido a la falta de precisi¨®n o inexactitud de una de las noticias que su diario public¨® el pasado domingo 17 de octubre en la p¨¢gina 3 de la informaci¨®n de Madrid, sobre el accidente que hab¨ªa sufrido un joven en el metro de Madrid. Como hermanos de la v¨ªctima, queremos expresar nuestra versi¨®n sobre los hechos, muy diferente a la ya publicada. En primer lugar, Carlos G. S.-M. es un joven de diecis¨¦is a?os, no de veinte, como ha salido en todos los medios de comunicaci¨®n que dieron esta noticia. Esa noche volv¨ªa con unos amigos por la l¨ªnea 2 del metro en el trayecto desde Goya a Manuel Becerra, cuando mi hermano se colg¨® de la barra del vag¨®n con las manos (no por los pies), en un intento de hacer una voltereta, cuando perdi¨® el equilibrio y cay¨® al suelo, golpe¨¢ndose la cabeza y quedando inconsciente al instante. Al llegar a la estaci¨®n de Manuel Becerra, los amigos, alarmados, avisaron a la seguridad del metro. Mientras tanto, un viajero del vag¨®n, que era ATS, indic¨® a los chavales que le sacaran al and¨¦n de la estaci¨®n, y as¨ª lo hicieron. El conductor del convoy, debido a los nervios, comenz¨® a realizar insultos contra la v¨ªctima, que, como ya he dicho, estaba inconsciente, alegando que le iba a meter en un buen l¨ªo. Pasado un tiempo, nunca aproximado a media hora, el convoy sigui¨® su camino. Lleg¨® la primera ambulancia del SAMUR, le midieron las constantes, le pusieron un collar¨ªn y se fue. A los veinte minutos lleg¨® la segunda ambulancia, y se traslad¨® al herido al hospital de la Princesa. Por tanto, el herido no fue atendido dentro del vag¨®n y el convoy continu¨® el trayecto antes de que fuera trasladado. El grupo en el que se encontraba mi hermano no tuvo en ning¨²n momento comportamiento temerario ni gamberro. Es totalmente falso que los chavales fueran pasando de vag¨®n en vag¨®n; no iban colgados de los pies; no saltaban de asiento en asiento, y ninguno de ellos iba haciendo el Tarz¨¢n.Lo realmente importante es que una cosa tan tonta como colgarse de una barra puede derivar en un accidente grave como el que sufri¨® mi hermano. - . .
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