Fomento modifica la Ley de Navegaci¨®n A¨¦rea y desregula el tr¨¢fico de ultraligeros

Pilotar un ultraligero, de hasta dos plazas y 450 kilos de peso, requerir¨¢ menos tr¨¢mites que conducir un turismo, con la reforma de la Ley de Navegaci¨®n A¨¦rea incluida en la Ley de Acompa?amiento de los Presupuestos, un verdadero caj¨®n de sastre que el Parlamento debate por tr¨¢mite de urgencia. En concreto, se prev¨¦ eximir a algunas aeronaves de los requisitos de inscribirse en el registro, obtener el certificado de aeronavegabilidad o disponer de titulaci¨®n oficial para pilotarlas. Tambi¨¦n dejar¨¢ de ser obligatorio declarar un plan de vuelo en trayectos interiores visuales.

Fuentes del Ministerio de Fomento negaron ayer que este conjunto de medidas desreguladoras ponga en riesgo la seguridad de la navegaci¨®n a¨¦rea, y agregaron que su objetivo es eliminar trabas burocr¨¢ticas al desarrollo del sector, homologando la legislaci¨®n espa?ola a la de otros pa¨ªses europeos y acerc¨¢ndola a la de EE UU, donde la liberalizaci¨®n es casi total.La mayor¨ªa de los viajes en avioneta quedar¨¢n eximidos de presentar un plan de vuelo, que no ser¨¢ obligatorio en trayectos "interiores que se realicen siguiendo reglas de vuelo visual y siempre que las condiciones de la circulaci¨®n a¨¦rea y la prestaci¨®n de los servicios de tr¨¢nsito a¨¦reo lo permitan".

Aunque el futuro reglamento detallar¨¢ en qu¨¦ casos se aplica esta medida, fuentes de Fomento indicaron que el plan de vuelo carece de justificaci¨®n en viajes cortos o trayectos con salida y llegada en el mismo aer¨®dromo. No obstante, el plan de vuelo supone actualmente una garant¨ªa de seguridad, pues cuando una aeronave no llega al destino anunciado se avisa al Servicio A¨¦reo de Rescate (SAR) ante la posibilidad de que haya sufrido un accidente. Las fuentes oficiales alegaron que, en estos casos, el piloto contar¨¢ con la opci¨®n de declarar su plan de vuelo voluntariamente.

M¨¢s importante es la reforma que permite eximir de la obligatoriedad de inscribirse en el registro de aeronaves, obtener el certificado de aeronavegabilidad y sacarse el t¨ªtulo de piloto. El texto de la ley no especifica qu¨¦ aparatos se beneficiar¨¢n de esta medida y se refiere gen¨¦ricamente a "aquellas aeronaves de limitados usos, caracter¨ªsticas t¨¦cnicas y actuaciones". Fuentes de Fomento indicaron que se est¨¢ pensando en ultraligeros, parapentes, alas delta y algunas otras aeronaves.

La ley prev¨¦ que la Administraci¨®n pueda delegar en "entidades colaboradoras", como aeroclubes o empresas cualificadas, las inspecciones y pruebas necesarias para garantizar la aeronavegabilidad de los ultraligeros, y abre la puerta a la posibilidad de que, en sustituci¨®n del t¨ªtulo de piloto, se requiera una licencia que acredite el conocimiento de las normas b¨¢sicas.

El punto m¨¢s conflictivo es, sin embargo, la supresi¨®n de la inscripci¨®n obligatoria en el registro, pues ese tr¨¢mite, que conlleva la matriculaci¨®n de la aeronave, sirve para comprobar que se dispone del seguro obligatorio de responsabilidad civil, fijado en 5,4 millones de pesetas.

La exenci¨®n de la inscripci¨®n en el registro privar¨¢ a la Administraci¨®n del ¨²nico instrumento de que dispone para comprobar que todas las aeronaves cuentan con seguro de da?os a terceros. Fomento relativiza este inconveniente, alegando que la obligatoriedad del seguro subsiste, y que el control que se realiza al matricular la aeronave no garantiza que se pagan las cuotas y se mantiene vigente. Un argumento que valdr¨ªa tambi¨¦n para los coches, sujetos adem¨¢s a la inspecci¨®n que realiza la Guardia Civil de Tr¨¢fico al exigir la documentaci¨®n de cualquier conductor.

Seg¨²n Fomento, la Guardia Civil se podr¨ªa ocupar tambi¨¦n de inspeccionar que estas aeronaves tengan la documentaci¨®n en regla. Una hip¨®tesis calificada de "ut¨®pica" por fuentes del Real Aeroclub de Espa?a, que abogan por que sean las citadas entidades colaboradoras las que se ocupen de verificar estos extremos. El control de la navegaci¨®n a¨¦rea es competencia exclusiva del Estado, por lo que no se prev¨¦ que intervengan las comunidades aut¨®nomas.

El Real Aeroclub de Espa?a apoya las l¨ªneas generales de la reforma, que responde en buena medida a sus propias demandas. Dicha entidad cifra el parque espa?ol de ultraligeros en m¨¢s del doble de los 500 o 600 que reconoce Fomento.

Un decreto aprobado el pasado d¨ªa 15 por el Consejo de Ministros modific¨® la definici¨®n de ultraligero, elevando de 350 a 450 kilos su peso m¨¢ximo. El precio medio de estos aparatos, con una autonom¨ªa de hasta cuatro horas, ronda los 2,5 millones de pesetas.