Empecinamiento
Los partidos pol¨ªticos inician sus campa?as. El PA intenta separar elecciones generales y auton¨®micas, busca el debate regional. La IU andaluza reafirma los dictados de su direcci¨®n, lo que puede abocarle a la p¨¦rdida de un electorado cuya fidelidad merecer¨ªa, cuando menos, la misma atenci¨®n que emplea su l¨ªder en cuidar la econom¨ªa de Lia?o.Una realidad que puede motivar el desplazamiento de los votos de IU hacia posiciones m¨¢s cercanas ideol¨®gicamente. Realidad m¨¢s fuerte en nuestra comunidad, que cuenta con un electorado b¨¢sicamente de izquierdas y andalucista, por lo que su influencia en las generales es obvia por evidente.
De ah¨ª que el inicio de la campa?a del PP, volviendo a posiciones que desconocen la realidad espa?ola y andaluza e ignora los actos de su Gobierno con esta comunidad, sea torpe, adem¨¢s de grosera. Lo demuestra el intento esperp¨¦ntico de querer transformar el caso Sanl¨²car en algo consustancial a un grupo pol¨ªtico, cuando es el juego de unos presuntos pillos, movidos por intereses econ¨®micos. Actuaci¨®n que se compadece mal con la escasa importancia que le da al caso Afanas, cuando uno de sus afiliados ha utilizado -presuntamente- dinero y discapacitados en la construcci¨®n de su chal¨¦.
Muestra de insensibilidad. Una m¨¢s que se suma a la que ya mostr¨® en el caso Pinochet, a la que late en las recientes declaraciones de Cardenal, quien, ampar¨¢ndose en la soberan¨ªa de los Estados, le deja al pairo el derecho constitucional a la vida, no apuesta por la abolici¨®n de la pena de muerte y no empuja con la ciudadan¨ªa para aliviar este trago a un espa?ol que espera en el corredor de la muerte.
El empecinamiento en no querer correr un camino que le aproxime a los valores sociales, entre los que se encuentra la justicia, y el que los ciudadanos hayan empezado a tomar conciencia de que este comportamiento no es ocasional puede ser una raz¨®n que llene de optimismo a Joaqu¨ªn Almunia. En Andaluc¨ªa no lo tiene dif¨ªcil. El PP sigue afan¨¢ndose e IU se entretiene en buscar el sexo de los jueces. Es m¨¢s que probable que muchos ciudadanos vuelvan a recalar en el PSOE y el PA consiga representaci¨®n en el Parlamento espa?ol.
EUGENIO SU?REZ PALOMARES
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