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NEGRITASUna de las citas culturales m¨¢s interesantes de la parca agenda sevillana, en la que nunca faltan, sin embargo, coronaciones de v¨ªrgenes e inciensos olorosos, ha sido el Encuentro Internacional de M¨²sica Cinematogr¨¢fica y Esc¨¦nica. El compositor Ennio Morricone, estrella de la cita, dirigi¨® en el teatro de la Maestranza a la Orquesta Sinf¨®nica de Sevilla, que interpret¨® partituras ya cl¨¢sicas como las que envuelven ?rase una vez Am¨¦rica, La misi¨®n, Cinema Paradiso o Sostiene Pereira. Las voces de la portuguesa Dulce Pontes, un prodigio de ternura y fuerza, y el italiano Angelo Branduardi convirtieron los conciertos en una de las citas m¨¢s atractivas del oto?o. Morricone, durante su estancia en Sevilla, confes¨® que uno de los escasos trabajos que ha firmado para el cine espa?ol, la banda sonora de la pel¨ªcula ?tame, protagonizada por Antonio Banderas y Victoria Abril, no conect¨® con su director, el manchego Pedro Almod¨®var. "Creo que no entendi¨® nada de lo que escrib¨ª", dijo.

No es f¨¢cil poner m¨²sica a la obra de otros, aunque en algunos casos podr¨ªa atinarse con seguridad. Sin ir m¨¢s lejos, la partitura de la Izquierda Unida, que ha reelegido este fin de semana a Antonio Romero como coordinador regional, deber¨ªa dejarse en manos del grupo Siniestro Total (antes llamados Mari Cruz Soriano y los que tocan su piano). A buen seguro daban con las notas para sus v¨ªsperas electorales.

Claro que el presidente andaluz, Manuel Chaves, dio tal do de pecho el s¨¢bado al anunciar que piensa sentar, si gana las elecciones auton¨®micas, a mujeres en la mitad de las sillas de su consejo de gobierno que resulta dif¨ªcil buscarle compositor. Si acaso, Joaqu¨ªn Sabina, que si logr¨® crear lirismo de un intento de atraco bien podr¨¢ arrancar poes¨ªa de las promesas electorales.

Tambi¨¦n hay composiciones de tem¨¢tica universal, que igual arropan un roto que un descosido. Es el caso de uno de los temas m¨¢s conocidos de Pink Floyd Money (Dinero), que lo mismo le pegar¨ªa como banda sonora a las dietas que cobran los concejales del Ayuntamiento de C¨®rdoba por sentarse en algunos consejos de administraci¨®n de empresas municipales que a la pel¨ªcula del caso de Sanl¨²car de Barrameda, protagonizada, entre otros, por el socialista Rafael Garc¨ªa Raposo, o al altruismo inmobiliario del concejal destituido en Barbate, Jes¨²s L¨®pez.

TEREIXA CONSTENLA