El Gobierno bloquear¨¢ en el Senado la Ley de Extranjer¨ªa con las enmiendas de Interior

Las duras condiciones que el Gobierno impone a la Ley de Extranjer¨ªa hacen muy dif¨ªcil su aprobaci¨®n en esta legislatura. El ministro portavoz, Josep Piqu¨¦, advirti¨® ayer de que s¨®lo respaldar¨¢ esta proposici¨®n de ley si se reforma profundamente en el Senado y cuenta con el m¨¢ximo consenso de los grupos. El Ejecutivo pretende enmendar dos aspectos fundamentales de la ley que dif¨ªcilmente mantendr¨¢n el consenso: que la denegaci¨®n de los visados sea motivada y que los inmigrantes, a los dos a?os de su presencia en Espa?a, adquieran derechos similares a los de los nacionales.

El portavoz del Gobierno, Josep Piqu¨¦, compareci¨® solo en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros pese a estar anunciada oficialmente la presencia simult¨¢nea del ministro de Trabajo, Manuel Pimentel, defensor de la Ley de Extranjer¨ªa. En medio del escepticismo general, Piqu¨¦ justific¨® la ausencia de Pimentel en que el Consejo no hab¨ªa estudiado su informe, previsto en el orden del d¨ªa, sobre la evoluci¨®n demogr¨¢fica, lo que habr¨ªa supuesto su comparecencia.El Ejecutivo trat¨® ayer de salvar la imagen de unanimidad de sus posiciones ante esta ley, pero el propio titular de Asuntos Exteriores, Abel Matutes, reconoci¨®, en alusi¨®n al vicepresidente primero, Francisco ?lvarez Cascos, que "ha habido alg¨²n ministro partidario de que se aprobara ahora y otros que ¨¦ramos partidarios de una ley que tiene que adaptarse a la norma de otros pa¨ªses".

El Gobierno ve muy dif¨ªcil que pueda aprobarse la ley en esta legislatura porque los cambios que pretende son muy profundos y los plazos parlamentarios muy limitados, ya que las C¨¢maras se disolver¨¢n en enero. No obstante, pretende cubrirse, ante la presi¨®n en favor de la ley de su socio parlamentario, CiU, y de numerosas organizaciones sociales, y trata de vender que se esforzar¨¢ en lograr el consenso con los dem¨¢s partidos, especialmente con CiU y el PSOE, a trav¨¦s de su grupo parlamentario en el Senado, dijo ayer Piqu¨¦.

Condiciones

El portavoz puso como primera condici¨®n para que la proposici¨®n de ley -impulsada por CiU y que est¨¢ consensuada por todos los grupos en el Congreso- cuente con el respaldo del Gobierno la de que se reforme profundamente a su paso por el Senado, en el que seguir¨¢ la tramitaci¨®n de urgencia -20 d¨ªas- tras su aprobaci¨®n en el Congreso en el pleno del pr¨®ximo jueves.Piqu¨¦ reflej¨®, como criterio general de la reforma en el Senado, que la ley "sea coherente con el entorno europeo, sea entendida por los ciudadanos, no genere sentimientos de inquietud y no alimente actitudes racistas y xen¨®fobas, ahora minoritarias en Espa?a", as¨ª como que, simult¨¢neamente, "sea un testimonio de solidaridad respecto de los inmigrantes". Admiti¨®, eso s¨ª, que ¨¦ste es "un equilibrio dif¨ªcil", que no se ha logrado con la redacci¨®n actual, en la ponencia parlamentaria del Congreso.

Fuentes gubernamentales precisaron que la proposici¨®n de ley es "una llamada a los inmigrantes" por ser "la que va m¨¢s lejos de toda la legislaci¨®n europea" cuando, adem¨¢s, "Espa?a debe ser m¨¢s prudente porque es un pa¨ªs frontera de la Uni¨®n Europea".

Las enmiendas que el Gobierno introducir¨¢ en el Senado, a trav¨¦s del PP, al texto afectan especialmente a que la denegaci¨®n de visados sea motivada, lo que abre, en la redacci¨®n actual, la posibilidad de que los inmigrantes recurran a los tribunales tales denegaciones. Tambi¨¦n enmendar¨¢ el Gobierno la propuesta de que la estancia durante dos a?os en Espa?a suponga para los inmigrantes de forma autom¨¢tica derechos similares a los de los nacionales.

Son ¨¦stos dos aspectos esenciales de la proposici¨®n que dif¨ªcilmente salvar¨¢n el consenso en su tramitaci¨®n en el Senado, con la particularidad de que, si no se logra, no podr¨¢ aprobarse la ley a su regreso al Congreso porque al ser org¨¢nica necesita la mayor¨ªa absoluta de la C¨¢mara.

No obstante, Piqu¨¦ insisti¨® en que el PP tratar¨¢ de consensuar la ley con los partidos, especialmente con el PSOE y CiU, aunque tambi¨¦n insinu¨® que si las reformas no satisfacen al Gobierno no se aprobar¨¢.

El Ejecutivo argumenta su tard¨ªa reacci¨®n ante esta proposici¨®n de ley, que se estaba estudiando en ponencia en el Congreso desde hace 18 meses, en la conveniencia de adaptarla a las conclusiones de la reciente cumbre europea de Tampere (Finlandia).

El ministro del Interior, Jaime Mayor, indic¨® el jueves que el Gobierno tuvo su primer informe sobre esta ley en septiembre y que las reacciones cr¨ªticas de altos cargos de su ministerio no fueron tenidas en cuenta.