Todos los municipios con m¨¢s de 5.000 vecinos tendr¨¢n que separar la basura antes del 2001

A partir de enero del 2001 todos los vecinos de poblaciones con m¨¢s de 5.000 habitantes deber¨¢n depositar su basura en bolsas separadas por exigencia del Plan Nacional de Residuos Urbanos aprobado ayer por los gobiernos auton¨®micos y central. La aplicaci¨®n del plan, con un coste de medio bill¨®n de pesetas y financiado en buena parte con fondos europeos, repercutir¨¢ en los usuarios a trav¨¦s de las tasas de basura, que sufrir¨¢n un incremento del 10%, seg¨²n c¨¢lculos de varias comunidades. El Plan se va a elevar al Consejo de Ministros para que pueda entrar en vigor en enero pr¨®ximo.

La ministra de Medio Ambiente, Isabel Tocino, no quiso evaluar las repercusiones de la aplicaci¨®n del Plan en las tasas de la basura, porque es una cuesti¨®n que excede las competencias del ministerio. Dijo que su departamento no puede imponer esa subida, pues es competencia de las autonom¨ªas arbitrar los procedimientos para cumplir el Plan, as¨ª como la aplicaci¨®n de las tarifas.Jos¨¦ Luis Blanco, consejero de Medio Ambiente de la Junta de Andaluc¨ªa, con siete millones de habitantes, la comunidad m¨¢s poblada de Espa?a, afirm¨® que la implantaci¨®n del Plan de Residuos S¨®lidos Urbanos supondr¨¢ un incremento del 10% en las actuales tarifas de basura, y, en los ayuntamientos donde no existan, habr¨¢ que aplicarlas, aunque se resistan los alcaldes.

La ministra es partidaria de la medida, ya que el coste para las administraciones ser¨¢ "cero". "Es saludable", dijo, tras recordar que muchos municipios europeos adelantados en la recogida selectiva de la basura dom¨¦stica aplican a los vecinos y usuarios tarifas distintas en funci¨®n del volumen y el peso de la basura que depositan en la calle.

Las inversiones iniciales, que son las m¨¢s costosas por tratarse de grandes infraestructuras como las estaciones de transferencia de residuos, el sellado de vertederos o el cierre de las incineradoras que no cumplen las exigencias comunitarias, correr¨¢n por cuenta de la Uni¨®n Europea en un 70% u 80% de su coste. El resto y los costes de mantenimiento lo pagar¨¢n los usuarios con arreglo al principio de que "quien contamina paga".

Medio bill¨®n

El Ministerio de Medio Ambiente calcula que durante los siete a?os de vigencia del plan ser¨¢n necesarios 551.000 millones de pesetas. Esa cantidad ser¨¢ aportada b¨¢sicamente por los Fondos de Cohesi¨®n y el Plan de Desarrollo Regional que se ha elevado a Bruselas para su aprobaci¨®n.La ministra se comprometi¨® a financiar con estos fondos el 100% del coste de la asistencia t¨¦cnica de todos los proyectos que presenten las comunidades aut¨®nomas, siempre que cumplan los requisitos del Plan. Para tal fin su departamento elaborar¨¢ una gu¨ªa con los criterios que deben cumplir esos proyectos.

Tocino anim¨® a que las entidades auton¨®micas se apresuren a presentar proyectos "elegibles para ser financiados", porque el plazo para acogerse a estas subvenciones tiene una fecha de caducidad sin marcha atr¨¢s: el 2006, a?o que la Uni¨®n Europea ha se?alado para acabar con los Fondos de Cohesi¨®n. Para entonces todos los proyectos subvencionables tendr¨¢n que estar ejecutados. De lo contrario se perder¨¢ toda posibilidad de financiaci¨®n.

El cuarto y definitivo borrador del Plan aprobado ayer en la Conferencia Sectorial ser¨¢ el mismo que eleve el ministerio al Consejo de Ministros para su ratificaci¨®n. La ministra Isabel Tocino conf¨ªa en que se apruebe antes de las navidades, ya que est¨¢ previsto que entre en vigor el primer d¨ªa de enero del 2000.

Las l¨ªneas b¨¢sicas giran en torno a dos objetivos generales: la reducci¨®n del 10% de los residuos de envases antes del 30 de junio del 2001 y una disminuci¨®n del 6% en la generaci¨®n de los residuos generados por habitante en ese mismo a?o con respecto al a?o 1996, cuando era de 1,2 kilos por habitante al d¨ªa.

- Tipos de residuos. Todos los residuos y desechos urbanos generados en los domicilios particulares, comercios, oficinas y servicios est¨¢n afectados, as¨ª como los que no tengan la consideraci¨®n de peligrosos. Se incluyen los procedentes de la limpieza de las v¨ªas p¨²blicas, zonas verdes, ¨¢reas recreativas y playas; productos textiles y residuos de madera, aceites y grasas vegetales. Tendr¨¢n una consideraci¨®n espec¨ªfica las colas, pinturas, insecticidas, aceites minerales dom¨¦sticos, aditivos y fluidos de automoci¨®n, medicamentos y residuos el¨¦ctricos y electr¨®nicos. Igualmente requerir¨¢n soluciones espec¨ªficas las pilas y acumuladores, veh¨ªculos y neum¨¢ticos fuera de uso, escombros de la construcci¨®n, despojos de animales procedentes de mataderos, muebles y enseres dom¨¦sticos usados, barros y lodos de depuradoras.

- Reutilizaci¨®n de envases. El Plan apuesta por la conveniencia de que la mayor parte de los productos se envasen en materiales que puedan reutilizarse 10 veces o m¨¢s, y que vayan a ser consumidos en un radio de unos 300 kil¨®metros alrededor del centro o punto de envasado. El objetivo es implantar un contenedor de vidrio y otro de papel-cart¨®n por cada 500 habitantes en todos los municipios espa?oles para el a?o 2006.

- Compostaje. Una parte importante de los residuos que se arrojan a los vertederos es materia org¨¢nica de la que se puede sacar partido para usos agron¨®micos o forestales. Por el contrario, el 50% de los materiales que entran en las plantas de compostaje para su aprovechamiento en¨¦rgetico o como abono son de rechazo o deber¨ªan serlo.

- Cierre de vertederos. Casi la mitad de los vertederos de los 8.000 municipios espa?oles est¨¢n abocados al cierre porque no re¨²nen las condiciones m¨ªnimas de salubridad. El sellado de estos vertederos requiere inversiones superiores a los 73.000 millones de pesetas. En su lugar deber¨¢n construirse unas 150 nuevas instalaciones donde se pretende que s¨®lo se depositen el 33,1% de los residuos urbanos, frente al 53,7% que reciben actualmente.