?Credibilidad militar o credibilidad pol¨ªtica?

?ste es el interrogante con el que ETA tiene que enfrentarse a partir de hoy, en que ha puesto fin a la tregua mantenida durante estos ¨²ltimos 14 meses. Si hasta hoy ETA hab¨ªa podido mantenerse en la ambig¨¹edad, hoy ya no puede. Durante estos ¨²ltimos 14 meses, ETA hab¨ªa conseguido hacer compatible su afirmaci¨®n como organizaci¨®n armada con la renuncia al mismo tiempo al uso de las armas. A partir del momento en que ETA hizo p¨²blico su comunicado poniendo fecha al fin de la tregua, renunci¨® a la posibilidad de mantener esa compatibilidad. De la forma en que d¨¦ respuesta al interrogante que da t¨ªtulo a la columna depender¨¢, en consecuencia, que lo que todav¨ªa hoy es una amenaza de iniciar atentados acabe consum¨¢ndose.En principio, si nos atenemos a lo que ha sucedido en el pasado, la respuesta al interrogante estar¨ªa cantada. ETA no ha tenido en el pasado otra l¨®gica que la militar, y en dicha l¨®gica la credibilidad en el cumplimiento de la amenaza es lo decisivo, casi lo ¨²nico que cuenta. Por eso, cuando ETA secuestr¨® a Miguel ?ngel Blanco y exigi¨® unas condiciones de imposible cumplimiento y, adem¨¢s, en un plazo perentorio, a pesar de la inmensa movilizaci¨®n no s¨®lo de la sociedad vasca, sino de toda la sociedad espa?ola y a pesar de las gestiones incesantes de todas las fuerzas pol¨ªticas, el resultado final estaba predecidido. No hab¨ªa otra alternativa que el asesinato del concejal popular. ?Estamos hoy en la misma situaci¨®n? ?Es inevitable que ETA consume su amenaza y empiece a cometer atentados? ?Resultar¨¢n completamente bald¨ªos desde este punto de vista los esfuerzos que se est¨¢n haciendo para que ETA no rompa la tregua como lo fueron los que se hicieron en su d¨ªa para que no asesinara a Blanco?

Me parece que la referencia al secuestro y posterior asesinato de Miguel ?ngel Blanco es importante porque en buena medida lo que ha ocurrido en el Pa¨ªs Vasco, incluida la ruptura definitiva del Pacto de Ajuria Enea y la firma del Pacto de Lizarra, arranca de ah¨ª. En consecuencia, valorar el comunicado de ETA sobre la ruptura de la tregua poni¨¦ndolo en relaci¨®n con el que emiti¨® en su d¨ªa tras el secuestro de Miguel ?ngel Blanco puede ser ilustrativo.

Y no cabe duda de que hay semejanzas y diferencias. Es verdad que ETA se ha situado a s¨ª misma con su comunicado anunciando el fin de la tregua en una posici¨®n similar a la que se situ¨® entonces. Si lo ¨²nico que toma en consideraci¨®n es su credibilidad como organizaci¨®n militar, es obvio que tendr¨ªa que empezar a cometer atentados y relativamente pronto. Pero no lo es menos que ETA no ha sido durante estos 14 meses y, por tanto, no lo es hoy una organizaci¨®n exclusivamente militar como lo era entonces. ETA suspendi¨® temporalmente su actividad militar para hacer pol¨ªtica conjuntamente con los partidos nacionalistas y con IU. ETA sali¨® en cierta medida del callej¨®n en que se meti¨® con el asesinato de Miguel ?ngel Blanco como consecuencia del acuerdo pol¨ªtico que alcanz¨® con estos partidos. En el mantenimiento de la tregua descansa la credibilidad pol¨ªtica de todos los firmantes de Lizarra. La suya y la de todos los dem¨¢s. Un atentado terrorista la har¨ªa saltar por los aires. ?sta es la gran diferencia entre la posici¨®n en que se encontraba ETA antes del secuestro y asesinato de Miguel ?ngel Blanco y en la que se encuentra hoy. Entonces pudo salir de un callej¨®n aparentemente sin salida porque los partidos nacionalistas estuvieron dispuestos a hacer una pol¨ªtica que facilitara su tr¨¢nsito de la l¨®gica exclusivamente militar a la l¨®gica pol¨ªtica, aunque no exclusivamente pol¨ªtica, ya que ETA manten¨ªa su condici¨®n de organizaci¨®n armada. La salida del callej¨®n fueron los partidos nacionalistas. En el caso de que hoy ETA act¨²e de la misma manera que actu¨® tras el secuestro de Blanco, ?es posible que pueda tener otra oportunidad para salir del callej¨®n sin salida en que se estar¨ªa metiendo? ?No estar¨ªa m¨¢s bien metiendo en ese callej¨®n a todo el nacionalismo vasco?

Las respuestas a estos interrogantes me parece que son claras para todo el mundo. ?Lo ser¨¢ tambi¨¦n para ETA? Me gustar¨ªa que as¨ª fuera, pero no me hago demasiadas ilusiones.