Una semana decisiva
Una prodigiosa aceleraci¨®n de la historia ha permitido en seis d¨ªas volver la p¨¢gina sobre 75 a?os de sectarismo religioso en Irlanda del Norte. Aunque el acuerdo de paz de Stormont fue firmado en abril de 1998, su aplicaci¨®n qued¨® estancada por la exigencia unionista de que antes se iniciara el desarme del IRA. En noviembre, el mediador estadounidense George Mitchell consigui¨® desbloquear el proceso y empezar la cuenta atr¨¢s:El s¨¢bado 27 de noviembre, el principal partido unionista (UUP) dio el gran salto al aceptar la creaci¨®n de un Gobierno con el Sinn Fein sin que antes se inicie el desarme.
El lunes, David Trimble, l¨ªder unionista, constituy¨® el Ejecutivo con cinco ministros cat¨®licos y cinco protestantes.
El martes, el Parlamento de Westminster vot¨® la devoluci¨®n a Belfast de los poderes arrebatados en 1972, tras el Domingo Sangriento.
El mi¨¦rcoles, tras la ¨²ltima campanada de medianoche, la devoluci¨®n del poder se hizo realidad.
Ayer, se cuadraron las ¨²ltimas piezas del rompecabezas: se firma el acuerdo anglo-irland¨¦s que hace oficial el principio de autodeterminaci¨®n y que concede a Dubl¨ªn el derecho a supervisar los asuntos del Ulster; el Gobierno de la provincia se pone en marcha, y el IRA nombr¨® anoche a su representante ante la comisi¨®n de desarme.
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