"Yo lo ¨²nico que tengo es imaginaci¨®n"

Poeta, pintor, dise?ador, director de la exquisita revista de poes¨ªa Litoral que fundara su t¨ªo abuelo Emilio Prados, acaba de ser nombrado director del Centro de la Generaci¨®n del 27 de M¨¢laga.Su bater¨ªa de proyectos rebosa entusiasmo e imaginaci¨®n.

Lorenzo Saval (Santiago de Chile, 1954), que es un seductor, no es en realidad Lorenzo Saval. Antes de ¨¦l, hubo un chico espingardo llamado Jos¨¦ Lorenzo Leiva, con complejo de perdedor, que sali¨® muy jovencito de su pa¨ªs y al que el golpe de Pinochet dej¨® en Espa?a. El desconocido origen de aquel chaval es cosa de novela: de famoso pinchadiscos en Madrid y Torremolinos, pas¨® a ser protegido de Alberti, Bergam¨ªn, Dar¨ªo Carmona o Jes¨²s Uss¨ªa y luego poeta, dise?ador, pintor y codirector de la revista Litoral. Ahora Saval dirige Litoral en solitario tras el fallecimiento de su suegro, Jos¨¦ Mar¨ªa Amado. Encima le ha ca¨ªdo un reto peliagudo: la direcci¨®n del Centro Cultural de la Generaci¨®n del 27. No niega que a veces le asusta un sistema administrativo que se escapa de su car¨¢cter creativo y anarcoide, pero lo cubre como sabe: entusiasmo, seducci¨®n, fieles colaboradores y una imaginaci¨®n contagiosa.

Pregunta. Explique eso de que usted no es Lorenzo Saval.

Respuesta. Mi nombre es Jos¨¦ Lorenzo Leiva Saval. Sal¨ª a Madrid pocos meses antes del golpe militar y ya no pude volver. Aqu¨ª me encontr¨¦ rodeado de gente incre¨ªble (Bergam¨ªn, Jes¨²s Uss¨ªa, Guill¨¦n, Dar¨ªo Carmona, Rafael y Aitana Alberti, Aleixandre, Amado, ?ngel Caffarena...) que alababan mis poemas y mis primeros collages. No ten¨ªa papeles. As¨ª me pas¨¦ en Espa?a 10 a?os, sin existir. Cuando consegu¨ª la residencia me quit¨¦ mi primer nombre y mi primer apellido y me qued¨¦ con el que me conoc¨ªan en Espa?a, Lorenzo Saval. Porque a Jos¨¦ Lorenzo Leiva nunca le fueron bien las cosas.

P. ?Qu¨¦ recuerda de su t¨ªo abuelo Emilio Prados, cuya exitosa exposici¨®n del centenario ha dise?ado usted?

R. Emilio era la fotograf¨ªa de un hombre que miraba a las nubes en casa de mi abuela. Era la familia. Despu¨¦s se ha pegado a mi vida.

P. ?Qu¨¦ ha supuesto la muerte de Jos¨¦ Mar¨ªa Amado para Litoral?

R. Un gran vac¨ªo. Jos¨¦ Mar¨ªa ten¨ªa sus cosas, pero era un personaje genial, b¨¢sico en la poes¨ªa espa?ola actual. Litoral seguir¨¢ siendo un lugar de encuentro independiente, pero tiene que modernizarse. Hasta hemos metido publicidad...

P. Ahora aparecer¨¢n dos nuevos n¨²meros: uno dedicado a la poes¨ªa y el arte en Chile y otro muy peculiar, El Pasajero.

R. La poes¨ªa chilena es un proyecto de hace a?os. Lo prologa Roberto Bola?os. Chile tiene artistas magn¨ªficos y est¨¢ muy necesitado de abrirse al exterior. El Pasajero es un juego, un enorme graffiti, abierto a cientos de artistas y escritores para que hagan en dos p¨¢ginas lo que quieran como propuesta para el cambio de milenio.

P. Usted siempre propone juegos. Su imaginaci¨®n es contagiosa.

R. La vida es m¨¢s divertida de lo que la gente se plantea. Yo no soy un intelectual. Nunca lo he pretendido. Soy un creador que se divierte. Tuve mis fases como poeta, etapa que viv¨ª un tanto acomplejado por los monstruos que me rodeaban. Escribo cuentos interesantes. Sigo pintando. Pero soy un caos. Creo que lo ¨²nico que tengo es imaginaci¨®n. Una imaginaci¨®n que quiere salirse de los esquemas y disfrutar de los peque?os placeres en la creaci¨®n.

P. Tiene muchos proyectos para el Centro del 27...

R. Vamos a hacer un congreso internacional de Bu?uel. Habr¨¢ un ciclo de m¨²sica y literatura, otro de literatura y cine, Impares.Fila 13, en homenaje al poema de Pablo Garc¨ªa Baena, presentaciones de libros . Daremos dos becas anuales, de investigaci¨®n y creaci¨®n. Mantendremos dos de los premios de poes¨ªa. Editaremos una revista, El maquinista de la Generaci¨®n, donde se incluir¨¢ un compacto con bases de datos de la enciclopedia del 27 que estamos elaborando. Editaremos un libro de entrevistas y an¨¦cdotas del 27, epistolarios, un libro monogr¨¢fico dedicado a la tradici¨®n tipogr¨¢fica malague?a, una colecci¨®n de narrativa, facs¨ªmiles. Haremos 10 recitales al a?o...

P. Todo eso suena muy ambicioso.

R. Pero factible. Todo se puede hacer. Es cuesti¨®n de darle a las cosas su tiempo. Yo he tenido mucha suerte y querido usarla con responsabilidad. Me he equivocado muchas veces. Y s¨¦ que si este primer a?o no sale todo lo bien que pretendo, ya saldr¨¢ el siguiente.

P. ?Y no le asusta la presi¨®n de un puesto p¨²blico?

R. S¨ª, temo las zancadillas. Nunca he trabajado en la administraci¨®n. Paso de una revista completamente independiente y an¨¢rquica a tener que dar un mont¨®n de pasos administrativos para conseguir algo que antes s¨®lo depend¨ªa de la voluntad de un equipo de amigos y colaboradores. He pasado de pedir a sentirme nervioso por lo que puedo dar a otros. Pero saldr¨¢: nunca hab¨ªa recibido tanto apoyo.