"En Europa hay paro y racismo, pero tambi¨¦n esperanza"
Mouneim Azagrar no arriesg¨® su vida en el Estrecho para llegar a Espa?a. Reconoce que tuvo la suerte de emigrar "de otra manera", pero asegura que no dudar¨ªa en meterse en una patera si se encontrara en una situaci¨®n desesperada. Oriundo de Fes y f¨ªsico, Mouneim es uno de los pilares de la Asociaci¨®n de Trabajadores Inmigrantes Marroqu¨ªes en Espa?a (Atime).Pregunta. ?Qu¨¦ hace un f¨ªsico en esta causa?
Respuesta. Es el compromiso que debe tener cualquier persona.
P. La Subcomisi¨®n de Migraci¨®n recomienda la legalizaci¨®n de casi cinco millones de irregulares. ?Es factible?
R. En Europa hay un doble discurso, el te¨®rico, en el que la migraci¨®n se reconoce como derecho, y el pr¨¢ctico, en el que entran intereses econ¨®micos, pol¨ªticos y electorales. Por ejemplo, los recortes en la nueva Ley de Extranjer¨ªa son vergonzosos. Despu¨¦s de mucho trabajo se alcanz¨® un consenso, pero ahora el Gobierno empieza a buscar medios para frenarla. Las enmiendas van en contra de la pol¨ªtica de integraci¨®n del inmigrante, cuando mir¨¢ndolo desde un punto de vista ego¨ªsta, la regularizaci¨®n le interesa a Espa?a porque aflorar¨ªa econom¨ªa sumergida y esas personas contribuir¨ªan a sostener la Seguridad Social.
P. ?C¨®mo explica esta marcha atr¨¢s?
R. La intenci¨®n es frenar la ley, ponerla patas arriba. El Gobierno quiere sacar su ley, no la que quiere el Congreso y la que quiere el Congreso es la que reclama la sociedad. El a?o pasado hubo m¨¢s de mil muertos en el Estrecho, m¨¢s que en Kosovo hasta la intervenci¨®n de la OTAN. Es imprescindible un cambio.
P. ?Y por d¨®nde pasa ese cambio?
R. Por compartir la riqueza, pero a los pol¨ªticos no les interesa comprometerse seriamente con el Tercer Mundo porque quita votos. Comprometerse supone gasto p¨²blico y eso puede repercutir en la l¨®gica del votante. El 0,7% es muy poco. Hay iniciativas de asociaciones y ONG, pero el apoyo tiene que ser m¨¢s institucional, m¨¢s global. En ese sentido, la sociedad civil ha ido a la vanguardia de la solidaridad. En el caso de los estados, el compromiso es mucho menor.
P. ?Existe El Dorado europeo?
R. M¨¢s que El Dorado es una fortaleza... Los inmigrantes saben que en Europa hay paro y racismo, pero aqu¨ª tienen esperanza. Esa es la diferencia, all¨ª no hay esperanza. Pero el b¨²nker europeo, ante el hambre, siempre ser¨¢ vulnerable. ?Qui¨¦n hubiera imaginado hace 15 a?os pateras a Fuerteventura? Pero si los capitales pueden circular libremente con la globalizaci¨®n, el hambre no se va a quedar detr¨¢s. En las muertes en el Estrecho hay una complicidad de todos. Los c¨®mplices materiales son las mafias, pero los gobiernos tambi¨¦n son responsables porque no aplican pol¨ªticas serias, sino de control policial, de alambradas. Los recortes en la ley son un ejemplo.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.