Bravatas de Mosc¨²

La fanfarrona invocaci¨®n de Yeltsin al poder nuclear de Rusia ha provocado distintas interpretaciones. "Clinton se ha permitido presionar a Rusia ayer," dijo el presidente ruso en respuesta a algunas cr¨ªticas moderadas del presidente de EE UU a la sangrienta guerra de Chechenia. "Debe haber olvidado por un momento lo que es Rusia. Tiene un completo arsenal de armas nucleares".Se ha visto en estas declaraciones una amenaza b¨¦lica clara. Otros ven una prueba m¨¢s de la mala salud de Yeltsin y de su car¨¢cter imprevisible. Pueden ser ciertas ambas lecturas. Pero el comentario es tambi¨¦n algo m¨¢s pat¨¦tico y revelador. Es el reconocimiento de que la ¨²nica reclamaci¨®n de Rusia a la deferencia mundial ("respeto" no ser¨ªa la palabra adecuada) es a trav¨¦s de los problemas que puede causar.

Todos han actuado como si el presidente ruso fuera un l¨ªder (...) de una econom¨ªa pr¨®spera y en crecimiento. Pero no lo es . La econom¨ªa rusa se ha estado hundiendo poco a poco a lo largo de la d¨¦cada. (...) Reclama la atenci¨®n sobre todo de forma negativa: vendiendo, abiertamente o de modo encubierto, o amenazando con vender armas o tecnolog¨ªa nuclear a alborotadores de todo el mundo; asustando con el lamentable estado de sus centrales at¨®micas, o sus ordenadores sin preparar para el efecto 2000 (...). Esto no puede seguir as¨ª. (...) Un Gobierno ruso que promueva la reforma econ¨®mica y el imperio de la ley todav¨ªa puede conducir al pa¨ªs por el buen camino. El ¨²ltimo gru?ido de Yeltsin es un triste reconocimiento de lo lejos que est¨¢ su r¨¦gimen de este objetivo.

, 14 de diciembre