Los ni?os se hacen querer
El IV Torneo Internacional de F¨²tbol 7, celebrado en Barcelona, no ha sido s¨®lo una fiesta dedicada al f¨²tbol en su estado m¨¢s inocente y puro, sino que es la constataci¨®n de que la cantera de los grandes equipos europeos goza de buena salud. Un total de 120 ni?os de 12 a?os reivindicaron en el Sant Jordi su papel en un futuro que les pertenece por derecho. Llegados de Par¨ªs, Mil¨¢n, Manchester, Belgrado, Amsterdam, Madrid y Bilbao -Barcelona al margen-, los muchachos hicieron so?ar a la hinchada con un f¨²tbol diferente.Los dos d¨ªas dieron para constatar que, en lo que a formaci¨®n de jugadores se refiere, son dos las escuelas que dominan en Europa. Una, la m¨¢s prestigiosa y laureada, est¨¢ representada por el Ajax en el norte y por el Athletic en Espa?a, y la segunda la encarnan el Madrid y el Bar?a. Y es que, por mucho que Louis van Gaal intente hacer del Camp Nou su peque?a Holanda, en lo que a f¨²tbol base se refiere el Bar?a sigue siendo un equipo sure?o.
M¨¢s que en las estructuras, que en realidad son muy parecidas, la diferencia radica en los criterios subyacentes. El Ajax, que mantiene el sistema que tantos ¨¦xitos le proporcion¨® hace cuatro a?os al propio Van Gaal, tiene como ¨²nico y principal objetivo formar jugadores que alcancen el primer equipo. "Nosotros no nos planteamos preparar futbolistas para venderlos luego a otros equipos o en el extranjero. No es una soluci¨®n. Nuestro ¨²nico objetivo es que lleguen al primer equipo", expone Robin Tronk, t¨¦cnico de los infantiles del Ajax. Este sistema permiti¨® al equipo holand¨¦s que hasta 10 jugadores llegasen al primer equipo hace seis a?os. Era la ¨¦poca de futbolistas como Kluivert, Reiziger y Davids. "La clave est¨¢ en nuestro sistema, que es muy ofensivo y permite a los jugadores desarrollar mucha creatividad", prosigue Tronk.
El problema es que la media de futbolistas que ascienden de los equipos inferiores a la plantilla profesional ha pasado de 10 a un jugador por a?o. "Cada vez es m¨¢s dif¨ªcil", destaca Tronk, "porque el paso que tienen que dar para llegar al primer equipo es m¨¢s grande. Hay m¨¢s nivel".
Mucho ha tenido que ver en ello la sentencia Bosman, porque el poder adquisitivo del Ajax es sensiblemente inferior al de clubes como el Juventus y el Bar?a. A diferencia de otras ¨¦pocas, el club holand¨¦s ya no puede cuidar de ninguna camada y dif¨ªcilmente formar¨¢ futbolistas, puesto que desde muy j¨®venes son tentados por el dinero ofrecido desde Espa?a o Italia. En contrapartida, tambi¨¦n le resulta m¨¢s dif¨ªcil acceder a otras promesas, porque su coste se ha disparado. Hoy hasta los alevines figuran ya en el escaparate. Tal situaci¨®n explica quiz¨¢ el ocaso que vive ahora el primer equipo del Ajax, aunque su cantera sigue siendo muy apreciada. Las cosas son mas f¨¢ciles en Lezama. Su sistema es pr¨¢cticamente un calco del que se aplica en el Ajax, con una diferencia: el Atlhetic s¨®lo trabaja con muchachos vascos. Los t¨¦cnicos que preparan a los infantiles bilba¨ªnos reconocen que esta circunstancia disminuye la presi¨®n respecto a los resultados. La afici¨®n busca sobre todo un equipo con el que sentirse identificada.
En el Bar?a y en el Real Madrid la historia cambia. Las urgencias de los primeros equipos reducen al m¨¢ximo las posibilidades de triunfar de los j¨®venes. Las plazas estan copadas por jugadores formados fuera cuyo nombre y supuestas garant¨ªas se pagan a golpe de talonario. En contrapartida, Bar?a y Madrid han encontrado en sus canteras una fuente de financiaci¨®n de sus fichajes millonarios. Venden sus jugadores a otros equipos de Primera y a cambio obtienen dinero para contratar a futbolistas de otras ligas europeas.
Pablo Mart¨ªn, t¨¦cnico de los infantiles del Madrid, admite que en un equipo como el suyo los ni?os, adem¨¢s de exhibirse en los torneos, tienen la obligaci¨®n de ganar. El t¨¦cnico no esconde que, personalmente, tambi¨¦n supone una frustraci¨®n ver que su trabajo no fructifica en el plantel profesional. El entrenador de los infantiles del Bar?a, Ursicino L¨®pez, aporta un dato m¨¢s: no es una mera cuesti¨®n de los clubes, sino tambi¨¦n de la afici¨®n: la exigencia con los chicos de la casa es mayor.
Hasta 12 equipos de Primera cuentan con jugadores formados en la cantera azulgrana: Celades (Celta); ?scar ?lvarez (Oviedo); Javi Moreno e Ismael (Alav¨¦s); Luis Garc¨ªa (Valladolid); Tito y Pep¨ªn (Numancia); Luis Cembranos y Pablo Sanz (Rayo); Toni (Atl¨¦tico de Madrid); Crist¨®bal, Toni Velamaz¨¢n y Roger (Espanyol); Carreras (Mallorca); Patri (Sevilla), Roteta y Rufete (M¨¢laga), y Gerard, Milla y ?scar (Valencia). Gerard es un caso para la reflexi¨®n, tanto por su partida del Bar?a como por su formaci¨®n. Fichado por el Valencia, el medio centro accedi¨® a ser cedido una temporada al Alav¨¦s para curtirse y un curso despu¨¦s es titular en Mestalla. Hoy las cesiones est¨¢n tan cuestionadas como el papel de los equipos inferiores de los grandes equipos. A futbolistas como Xavi, Gabri y Nano, por ejemplo, les resulta costoso pasar de jugar la Liga de Campeones a alinearse en la Segunda B con el filial.
Hay un factor a?adido para comprender el nuevo paisaje: desde este a?o ya no existe el cambio de residencia, por el que un jugador no profesional pod¨ªa irse a otro club alegando razones de trabajo o estudio sin que mediara traspaso. Ahora se impone la negociaci¨®n entre clubes. El ¨²ltimo jugador que estuvo a punto de utilizar este recurso fue Nano, tentado por el Arsenal, pero al final opt¨® por permanecer en el Bar?a, despu¨¦s de que le mejoraran el contrato.
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