Una decisi¨®n "casi judicial"

El Gobierno espa?ol ha calificado el anuncio de Jack Straw, en el sentido de denegar la extradici¨®n del general Pinochet, como la expresi¨®n de un acto pol¨ªtico. Tambi¨¦n en sus alegaciones, Garz¨®n se?ala que el ministro brit¨¢nico ha tomado una decisi¨®n pol¨ªtica. Sin embargo, es el propio Straw quien ha negado por activa y por pasiva estos d¨ªas que haya actuado en su calidad de ministro "pol¨ªtico". Seg¨²n el ministro, la conclusi¨®n de que Pinochet no debe ser extraditado, precisamente, ha sido alcanzada en el ejercicio de su funci¨®n "casi judicial", seg¨²n se le asigna en la Ley de Extradici¨®n brit¨¢nica.El mi¨¦rcoles, en un largo debate en la C¨¢mara de los Comunes, Straw explic¨®: "Tengo el claro deber legal de aplicar la Ley de Extradici¨®n de 1989 a fondo". ?Qu¨¦ significa este claro deber? "A la luz de la informaci¨®n que me proporcion¨® la Embajada chilena en Londres, este deber inclu¨ªa involucrarme e informarme completamente sobre los verdaderos hechos de la salud del senador Pinochet. Luego le ped¨ª que se sometiera a ex¨¢menes m¨¦dicos".

Al explicar por qu¨¦ raz¨®n no ha informado sobre el caso Pinochet a la C¨¢mara de los Comunes, el ministro insiste: "A lo largo del procedimiento, no he podido hacer declaraciones ni informes dirigidos a esta C¨¢mara por mi papel casi judicial en relaci¨®n con los asuntos de extradici¨®n y por las reglas que fija la C¨¢mara para asuntos sub j¨²dice. Siempre he dejado en claro que har¨¦ un informe oral completo cuando el asunto se resuelva, lo que por supuesto voy a hacer".

Straw, asimismo, explica que ha solicitado las alegaciones precisamente porque la Ley de Extradici¨®n le "obliga" a ello; en otros t¨¦rminos, no se trata de una "cortes¨ªa" de su parte, y, en efecto, es as¨ª, ya que el ministro, antes de fallar, tiene que pedir y estudiar las alegaciones a todas las partes. Quiz¨¢ fue en su respuesta al parlamentario laborista Tony Benn cuando m¨¢s se explic¨® Straw. El diputado dijo: "?No es acaso un hecho que, cualesquiera sean sus consideraciones judiciales, usted ha tomado una decisi¨®n pol¨ªtica?". El ministro replic¨®: "Mientras es perfectamente posible hacer ante m¨ª alegaciones sobre criterios humanitarios, en esta circunstancia particular he llegado a mi conclusi¨®n preliminar -que Pinochet no debe ser extraditado- bas¨¢ndome en el m¨¢s restrictivo concepto de su incapacidad para someterse a un juicio en base a las pruebas m¨¦dicas que he recibido. Si se me hacen alegaciones en base a criterios m¨¢s generales, las considerar¨¦ antes de adoptar mi decisi¨®n final. Debo expresar mi desacuerdo con el honorable amigo cuando se?ala que estas decisiones son decisiones pol¨ªticas. No son decisiones f¨¢ciles, pero creo que antecesores m¨ªos en Interior intentaron ejercer sus responsabilidades de un modo cuasi judicial y sopesar cada uno de estos casos y sus obligaciones legales".

En resumen: Straw sostiene que act¨²a, al haber anunciado su pr¨®xima decisi¨®n, "dentro" del procedimiento de extradici¨®n, "en base a la ley", y que as¨ª lo har¨¢ cuando dentro de pocos d¨ªas comunique su decisi¨®n ¨²ltima. Por eso, caben las alegaciones y por ello tambi¨¦n por definir el recurso de revisi¨®n judicial contra la decisi¨®n final. Aunque este recurso, como tal, no tiene fuerza para paralizar la orden de liberar a Pinochet.