Huye por un descuido de Justicia el conductor del "cami¨®n patera" de Capmany

La escasa diligencia del Ministerio de Justicia, que dej¨® transcurrir sin inmutarse el plazo legal para pedir la extradici¨®n de Lakbir Aitsalah, se hace todav¨ªa m¨¢s patente si se tiene en cuenta que la Interpol de Roma advirti¨® al citado ministerio, el d¨ªa antes de que se acabara el plazo para reclamar al detenido, que todav¨ªa no hab¨ªan recibido la documentaci¨®n. La siguiente comunicaci¨®n de Interpol, fechada el pasado 23 de diciembre, se limitaba a informar de que Aitsalah ya estaba libre.No es ¨¦sta la primera vez que el citado traficante se beneficia del escaso celo de las autoridades judiciales y policiales espa?olas. La sentencia firme que le condenaba a prisi¨®n por el tr¨¢gico accidente de Capmany, emitida el 20 de octubre de 1998, no pudo ni tan siquiera comunic¨¢rsele, puesto que en un primer juicio hab¨ªa sido absuelto y desde entonces se encontraba en paradero desconocido. La polic¨ªa arguy¨® entonces que no ten¨ªa vigilado al traficante porque un juzgado le hab¨ªa declarado inocente en primera instancia. Precisamente esa primera sentencia caus¨® una enorme pol¨¦mica en medios pol¨ªticos y sociales, ya que justificaba la absoluci¨®n de Aitsalah bas¨¢ndose en un supuesto vac¨ªo en el C¨®digo Penal que no permit¨ªa penar el tr¨¢fico de inmigrantes irregulares. Cuando la Audiencia de Girona revoc¨® esta sentencia, Lakbir Aitsalah ya se hab¨ªa esfumado.

Joaquim Bech de Careda, abogado de la acusaci¨®n particular, que represent¨® los intereses de los familiares de las v¨ªctimas y de los heridos en el siniestro de Capmany, se mostr¨® ayer enormemente contrariado por la liberaci¨®n de Aitsalah y la atribuy¨® directamente "a la dejadez del Ministerio de Justicia espa?ol". Bech de Careda advirti¨® que "alguien debe cargar con la responsabilidad de este grave error".

"Desprop¨®sitos"

El letrado mantiene que una revisi¨®n atenta de todo el proceso seguido contra el organizador del cami¨®n patera que destap¨® el tr¨¢fico ilegal de inmigrantes magreb¨ªes en los alrededores de la frontera hispano-francesa, lleva a la conclusi¨®n de que "no es m¨¢s que un c¨²mulo de desprop¨®sitos que contribuyen a socavar la confianza de la sociedad en la justicia".

En el juicio qued¨® probado que el acusado pertenec¨ªa a una organizaci¨®n dedicada a aprovecharse de la situaci¨®n de necesidad en los estratos sociales m¨¢s humildes de Marruecos y convertirlos en inmoral fuente de ingresos, abusando de su ansia por salir de la miseria.

Aitsalah recibi¨®, el 16 de marzo de 1997, a un grupo de 16 ciudadanos marroqu¨ªes, introducidos ilegalmente en el pa¨ªs por miembros de una red clandestina, y los mantuvo escondidos en un bosque cercano a la frontera de La Jonquera hasta que estableci¨® contacto con el camionero que ten¨ªa que efectuar el transporte ilegal de los magreb¨ªes hacia Italia. Los inmigrantes llegaron a pagar hasta 500.000 pesetas por el viaje. A causa de la embriaguez del conductor, el veh¨ªculo volc¨® en el t¨¦rmino municipal de Capmany, a muy pocos kil¨®metros de la frontera francesa. Fallecieron, adem¨¢s del conductor, 11 de los ciudadanos marroqu¨ªes que viajaban ocultos en el remolque, sobre un transporte de selectos botellines de colonia vac¨ªos.