Pinochet la arma en Betx¨ª: Un mural contra el ex dictador chileno enfrenta al equipo de gobierno municipal, formado por ediles del PSPV y de EU

Es seguro que ni el ministro brit¨¢nico Jack Straw, ni el titular de la cartera de Exteriores del Gobierno espa?ol, Abel Matutes, ni el juez Baltasar Garz¨®n, ni su hom¨®logo chileno Juan G¨²zman, ni el mism¨ªsimo ex dictador Augusto Pinochet saben d¨®nde para Betx¨ª. Ni tan siquiera d¨®nde se halla en el mapa esa localidad de la Plana Baixa, cuyo Gobierno local formado por socialistas y Esquerra Unida est¨¢ a punto de zozobrar por un mural pintado en la pared del mercado municipal. El Col.lectiu Betx¨ª, una asociaci¨®n cultural de signo pacifista e integrada por personas de orientaci¨®n de izquierda, estamp¨® el pasado s¨¢bado su firma en un gran cuadro alusivo al general chileno acusado de cr¨ªmenes contra la humanidad.La imagen del controvertido militar, a punto de ser devuelto a su pa¨ªs por razones de salud, ha provocado situaciones de crisis entre diplom¨¢ticos, discusiones interminables en tertulias radiof¨®nicas, manifestaciones y encierros a favor y en contra. Todos han querido pronunciarse; los habitantes de Betx¨ª, tambi¨¦n. El mural se ha traducido en un fuerte enfrentamiento entre los socios de la mayor¨ªa de izquierdas. Una comisi¨®n de Cultura intentar¨¢ este mediod¨ªa zanjar para siempre el asunto o abrir a¨²n m¨¢s la brecha por medio de la apertura de expedientes o de la imposici¨®n de sanciones a los autores del gigantesco graffiti. El diputado auton¨®mico de EUPV Ram¨®n Cardona dijo ayer que no se les concedi¨® el permiso para realizarlo porque "a los socialistas no les debi¨® parecer pol¨ªticamente correcto". Cardona, natural de esa localidad, cuestion¨® ayer la continuidad del pacto debido a este ejercicio de "censura". El parlamentario castellonense no entiende la actitud de sus socios, teniendo en cuenta que "el PSPV est¨¢ en la plataforma contra la impunidad de Pinochet".

Por su parte, el alcalde socialista, el veterano pol¨ªtico Manuel Peirats, puntualiz¨® que la negativa de la comisi¨®n de Cultura se circunscribi¨® exclusivamente a "la subvenci¨®n solicitada para llevar a cabo esa actividad". El caso Pinochet en Bext¨ª se agrav¨® al pasar por el mercado la misma tarde del s¨¢bado, seg¨²n las sospechas de este espont¨¢neo grupo de artistas callejeros, un edil del PP que ni corto ni perezoso se acerc¨® al Ayuntamiento a dar cuenta de lo que ocurr¨ªa. Un agente de la Polic¨ªa Local provisto de una c¨¢mara fotogr¨¢fica capt¨® a los j¨®venes dibujando el rostro del ex dictador chileno reclamado por la Audiencia Nacional, lo que ha complicado a¨²n m¨¢s si cabe el delicado asunto. El alcalde lamenta que media semana haya transcurrido debatiendo sin cuartel sobre Pinochet, sobre los derechos humanos y sobre la dichosa pared del mercado, desatendiendo incluso otros asuntos a su juicio m¨¢s trascendentes. Seg¨²n Peirats, consentir esa gran pintada ser¨ªa algo as¨ª como "sembrar precedentes que no pueden ser asumidos". El alcalde no cree correcto el que se metan con una persona, aunque a ¨¦l le caiga "igual de mal que a ellos". El dirigente socialista local recordaba ayer un mural sobre Tirant lo Blanch que fue "muy aplaudido" por los ciudadanos de su pueblo.

Hoy deber¨¢ deshacerse el entuerto, pasar p¨¢gina discretamente o bien romper definitivamente la coalici¨®n formada por seis concejales socialistas y uno de EUPV frente a cinco populares y uno del Bloc Nacionalista del total de 13 que componen el Consistorio. Pinochet, si no se alcanza un acuerdo, ser¨ªa la gota que colmar¨ªa el vaso de sucesivos desencuentros entre ambos grupos pol¨ªticos.

El mercado municipal es el blanco elegido para divulgar la ideolog¨ªa del Col.lectiu Betx¨ª. En 1991, tambi¨¦n bajo mandato socialista, ya se plasm¨® un graffiti sobre la insumisi¨®n y entonces no pas¨® nada; igual ocurr¨ªa hace cinco a?os, con alcalde del PP, al pintarse otro sobre la objeci¨®n fiscal contra los gastos militares. La situaci¨®n del dictador chileno no s¨®lo divide a sus paisanos, o a la opini¨®n p¨²blica espa?ola, sino que es capaz de desencadenar una grave crisis municipal. Todo por un mural reivindicativo fijado con pintura en una pared p¨²blica.