La suma de los votos de izquierda al Senado en 1996 arroja un vuelco electoral en la Comunidad

La suma de los votos que obtuvieron los candidatos al Senado del PSPV, Esquerra Unida y Unitat del Poble Valenci¨¤ en las elecciones generales de 1996 arroja un vuelco electoral en la Comunidad Valenciana. El PP logr¨® entonces la m¨¢xima representaci¨®n posible con nueve senadores. Pero si los candidatos de la izquierda hubieran acordado alguna f¨®rmula de cooperaci¨®n, el resultado habr¨ªa sido a la inversa. El PP sostiene, sin embargo, que la comparaci¨®n induce al equ¨ªvoco y que s¨®lo se pueden elaborar proyecciones fiables a partir de los resultados de las elecciones m¨¢s pr¨®ximas en el tiempo.

El senador m¨¢s votado en la Comunidad Valenciana en 1996 fue Pedro Agramunt, del PP, que sum¨® 587.065 votos en la provincia de Valencia. El candidato socialista menos votado en Valencia fue Baltasar Vives, que cosech¨® el apoyo de 497.073 electores. Si hubiera contado con el apoyo de los 143.142 votantes de Esquerra Unida que apoyaron a Elia Serrano -la candidata menos votada de la coalici¨®n de izquierdas-, y los 16.843 de Empar Sarabia -la aspirante del Bloc Nacionalista que cont¨® con menor apoyo- habr¨ªa desbordado con holgura a Agramunt por 70.000 votos puesto que habr¨ªa sumado 657.058 votos.El triunfo de la izquierda se reproduce seg¨²n la misma hip¨®tesis en Alicante, donde la suma de los peores resultados de los tres candidatos del PSPV, EU y Bloc habr¨ªa superado el mejor resultado del PP.

Gabriel Elorriaga, el senador del PP m¨¢s votado en Castell¨®n, logr¨® mil votos m¨¢s que la suma de los peores resultados de la izquierda, pero sus compa?eros habr¨ªan quedado defenestrados.

Sin embargo, la traslaci¨®n directa de los resultados registrados en 1996 a las pr¨®ximas elecciones entra?a varios problemas, entre ellos una cuesti¨®n formal de primer orden. Las papeletas para el Senado sit¨²an a los candidatos ordenados por orden alfab¨¦tico y agrupados por las siglas de sus partidos.

La izquierda no ha logrado acordar una coalici¨®n electoral por la premura de tiempo en las negociaciones y el ajustado calendario electoral, de modo que los candidatos del PSPV, Esquerra Unida y el Bloc no aparecer¨¢n en las papeletas electorales de forma correlativa, sino de acuerdo con una distribuci¨®n establecida al azar.

El posible acuerdo de apoyo mutuo supone que cada partido presentar¨¢ un m¨¢ximo de dos candidatos y pedir¨¢ el voto para los representantes de las otras dos formaciones implicadas en el pacto. Lo compacto de la oferta depende s¨®lo de la informaci¨®n y fidelidad de los votantes.

El PP considera que elaborar proyecciones a partir de los resultados electorales de 1996 supone falsear la realidad y sugiere que las estimaciones deben elaborarse a partir de los resultados registrados en las elecciones m¨¢s pr¨®ximas en el tiempo.

Los populares ya han anunciado que no modificar¨¢n las candidaturas a partir de un posible pacto de izquierdas porque al comparar los peores resultados del PP en las ¨²ltimas elecciones europeas con los mejores del PSPV en las pasadas auton¨®micas la proyecci¨®n resultante les sigue otorgando una amplia mayor¨ªa.

Esteban Gonz¨¢lez, portavoz del PP en el Senado y candidato por Valencia, brome¨® sobre el triste destino de Segundo Bru, candidato socialista por Valencia, si efectivamente se establece una f¨®rmula de apoyo mutuo al Senado entre los partidos de izquierda. Seg¨²n Gonz¨¢lez, si los disciplinados votantes de EU dejan de apoyar a Bru y los numerosos votantes del PSPV s¨ª votan a Jos¨¦ Luis Pitarch, cabeza de lista de EU en Valencia, el candidato socialista no lograr¨ªa su esca?o. "No entiendo porque el partido socialista pone en riesgo su esca?o por la provincia de Valencia", coment¨® Gonz¨¢lez en torno a un posible acuerdo de izquierdas.