"Al describir el Polo o la India, en el fondo escribo de Madrid"
De David Torres (Madrid, 1966), Javier Reverte comenta que es uno de esos pocos escritores "que se animan a bajar a los infiernos". Otros amigos a?aden que es uno de esos raros seres envenenados para siempre por el t¨®xico de la literatura. En su primera novela publicada Nanga Parbat (Editorial Desnivel), Torres, adem¨¢s de ganar un premio, describe una ascensi¨®n a una de las monta?as m¨¢s peligrosas del Himalaya. Por supuesto, Torres no ha viajado nunca a Paquist¨¢n, pero cuenta la escalada como si hubiera nacido all¨ª. Ahora acaba de presentar Donde no ir¨¢n los navegantes (Editoral Sial), un volumen de cuentos tambi¨¦n premiado que re¨²ne relatos atravesados todos por un elemento com¨²n: el lado tenebroso de la vida y el final infeliz. Por ah¨ª circulan, entre otros atormentados, vampiros, abuelas asesinas y enamorados que reciben hermosos mensajes de ultratumba.Pregunta. ?Por qu¨¦ siempre terminan mal sus cuentos?
Respuesta. Pues no lo s¨¦. Supongo que si yo supiera eso no los escribir¨ªa. Ahora bien, s¨ª me gustan ese tipo de relatos de n¨²cleo fant¨¢stico, de aliento adolescente. En el fondo, nunca he dejado de ser un adolescente. Y tampoco es verdad que todos, todos, terminen mal. El del vampiro, por ejemplo, termina bien... para el vampiro.
P. ?Por qu¨¦ escribe?
R. Porque s¨ª, porque es algo que tienes que hacer, porque considero que hay historias que merece la pena que sean escritas. Pero no todo es escribir. Publicar tambi¨¦n es muy importante. Adem¨¢s de que alimentas el ego, esas historias, para que existan verdaderamente, necesitan de los lectores, que los lectores las hagan suyas. Hace poco, una chica que hab¨ªa le¨ªdo el libro de cuentos me confes¨® que no hab¨ªa podido dormir despu¨¦s. ?se ha sido el mejor elogio, mejor que cuanquier cr¨ªtica buena.
P. ?No siente necesidad de escribir historias m¨¢s cercanas?
R. En el fondo, cuando describo la soledad del Polo o la de un desierto indio, estoy escribiendo sobre la soledad de Madrid en agosto, que ¨¦sa s¨ª que la he vivido, y mucho, se lo aseguro.
P. Y ahora ?a qu¨¦ se dedica?
R. Estoy terminando, junto a un amigo que es escalador, Rafael Conde, un libro, mitad novela, mitad ensayo, sobre la figura del brit¨¢nico escalador George Mallory, que muri¨® en el Everest en 1924 sin que se sepa si subi¨® o no a la cima. Tengo otros muchos proyectos y muy poco tiempo. Trabajo de vendedor en una librer¨ªa: vivir de la literatura es imposible.
P. Dicen que ahora lo es menos.
R. No. Por mucho que se diga, a los escritores j¨®venes o primerizos se les ayuda muy poco. Casi nada. Y un buen ejemplo soy yo: tengo una novela terminada que tras dar un mont¨®n de tumbos in¨²tiles por un gran n¨²mero de editoriales ha regresado al caj¨®n de donde sali¨®.
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