Empleadas de Buqueb¨²s denuncian la explotaci¨®n laboral en los barcos
"Trabaj¨¢bamos como esclavas", aseguran
La empresa Buqueb¨²s ha sido denunciada por las condiciones de trabajo que impone a las encargadas de la limpieza de los buques que enlazan Barcelona con Palma de Mallorca. Estas empleadas trabajan en condiciones penosas, a veces arriesgando su integridad f¨ªsica y en muchas ocasiones sin cobrar. "Trabaj¨¢bamos como esclavas", aseguran tres ex empleadas consultadas por este peri¨®dico.
El Centro de los Derechos del Marino, una organizaci¨®n no gubernamental que presta apoyo legal a tripulaciones en apuros, ha presentado diversas demandas laborales y por supuesta falta de seguridad a bordo contra Buqueb¨²s y la empresa a la que subcontrata la limpieza de sus buques, Clean Beat SL. El centro lleva la representaci¨®n legal de seis ex trabajadoras de la limpieza (cuatro de ellas extranjeras) que el a?o pasado prestaron sus servicios a bordo de los catamaranes Catalonia y Avemar, y que dejaron de acudir al trabajo al llevar meses sin cobrar, seg¨²n han denunciado. "Hay muchas m¨¢s chicas que las est¨¢n intimidando y presionando para que no denuncien su situaci¨®n", afirma uno de los letrados de este organismo.De momento, el centro ha presentado en el juzgado de lo social una demanda por reclamaci¨®n de cantidad de 6,5 millones de pesetas; otra demanda ante la Inspecci¨®n de Trabajo por infracci¨®n de la Ley de Riesgos; y una tercera demanda ante la Capitan¨ªa Mar¨ªtima por una supuesta falta de seguridad en el buque a ra¨ªz de las explicaciones facilitadas por las ex empleadas. Las demandas se dirigen contra Clean Neat, SL, y contra Buqueb¨²s como empresa responsable subsidiaria. "Pediremos la paralizaci¨®n de Buqueb¨²s, aunque probablemente nos dir¨¢n que no", admite uno de los abogados que trabaja como voluntario en el Centro de Derechos del Marino.
Seg¨²n los letrados de esta ONG, las encargadas de la limpieza de Buqueb¨²s ni siquiera figuraban en el rol o lista de embarque de tripulantes, un requisito obligatorio. "Se las embarcaba como pasajeros, curiosamente con billetes de primera clase". Adem¨¢s, a?aden las mismas fuentes, hac¨ªan turnos diarios de entre 12 y 16 horas, "cuando el contrato dec¨ªa 20 horas semanales", afirma un portavoz del centro. El sueldo estipulado era de 108.000 pesetas en el turno de d¨ªa y de 140.000 pesetas en el turno de noche.
"Lo peor era cuando hab¨ªa temporal y a¨²n as¨ª el catamar¨¢n zarpaba", relata Elisabeth Santamans, ex empleada. "Desde megafon¨ªa ped¨ªan a los pasajeros que por su seguridad se quedaran quietos en sus butacas, muchos de ellos se indispon¨ªan y, mientras, a nosotras nos obligaban a ir arriba y abajo para limpiar, agarr¨¢ndote como pod¨ªas para no caer". "Hemos recogido v¨®mitos con un vaso de refresco", a?ade para ilustrar la falta de medios con que trabajaban. "La empresa nos facilitaba un detergente y un cubo de agua con lej¨ªa. Los guantes y los pa?os los tra¨ªas de tu casa".
La ecuatoriana Elsa Mirella y la espa?ola Mercedes Val tambi¨¦n trabajaron en los catamaranes de Buqueb¨²s. "Nunca nos dieron instrucciones sobre c¨®mo actuar en caso de emergencias", aseguran. "En el catamar¨¢n Avemar, de un piso, el v¨ªdeo que pasaban por los monitores sobre medidas de seguridad para los pasajeros correspond¨ªa en realidad a la descripci¨®n del catamar¨¢n Catalonia, de dos pisos", explican las ex empleadas, que tambi¨¦n denuncian "la falta de personal responsable en cabina, junto a los pasajeros, cuando hab¨ªa mala mar".
Por su parte, la empresa Buqueb¨²s niega tajantemente que a bordo de sus catamaranes se hayan incumplido las normativas, tanto laborales como de seguridad. "No ha habido ninguna irregularidad, y menos de seguridad", afirma un portavoz de la compa?¨ªa. En lo que se refiere a las supuestas contrataciones irregulares de trabajadoras extranjeras, este mismo portavoz a?ade: "En todo momento Buqueb¨²s se ha ce?ido a lo que marca la ley. Ha habido inspecciones de Capitan¨ªa a bordo que lo han constatado". Neat Clean, por su parte, admite que debe dinero a algunas ex empleadas. "Es cierto que se les debe una cantidad, pero es 10 veces inferior a la que nos piden", afirma Luis Monta?¨¦s, responsable de esta empresa.
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