El problema olvidado en los territorios ocupados

Parece que el proceso de paz de Oriente Pr¨®ximo est¨¢ encauzado, pero existe un problema que no se ha tenido en cuenta para nada. Desde 1987, las autoridades israel¨ªes han demolido al menos 2.650 casas palestinas en los territorios ocupados, incluyendo el este de Jerusal¨¦n, alegando que estas casas no ten¨ªan permiso de construcci¨®n. El resultado es que 16.700 palestinos, incluyendo 7.300 ni?os, han perdido sus casas.Las consecuencias emocionales son tremendamente traum¨¢ticas, puesto que las m¨¢quinas demoledoras llegan a las casas a cualquier hora, rodeadas de soldados que obligan a las familias, apunt¨¢ndolas con armas, a dejar las viviendas en 15 minutos mientras tiran fuera las pertenencias y los muebles de las familias. En muchas ocasiones se producen heridos, incluso en alguna, muertos. En este momento las casas de un cuarto de la poblaci¨®n en este ¨¢rea est¨¢ bajo orden de demolici¨®n.

Las leyes de planificaci¨®n usadas por los israel¨ªes para confinar el desarrollo palestino en estas localidades son antiguas, aplicadas de manera despiadada, y discriminan a los palestinos a establecerse en estas zonas mientras que los asentamientos jud¨ªos en ellas son cada vez mayores. Esta discriminaci¨®n ignora la IV Convenci¨®n de Ginebra, que requiere que el poder ocupante proteja el bienestar de la gente en las ¨¢reas que ocupa, incluyendo la vivienda. A pesar de que los israel¨ªes explican estas demoliciones como una raz¨®n de seguridad, ya que, seg¨²n ellos, el objetivo son las familias de los terroristas, la realidad es que destruyen casas de cualquier palestino. La secci¨®n espa?ola de Amnist¨ªa Internacional pide al Gobierno israel¨ª que finalice la pol¨ªtica discriminatoria de denegar permisos de construcci¨®n y demoler casas palestinas, asegurando que las ¨®rdenes de demolici¨®n son canceladas y que las leyes discriminatorias desaparecen.- Lara Contreras. Coordinadora del Co-grupo de Israel y Autoridad Palestina de la secci¨®n espa?ola de Amnist¨ªa Internacional.