La nueva era de la medicina
Pocas actividades humanas como la ciencia est¨¢n llamadas a desempe?ar un papel tan relevante en nuestra sociedad. La ciencia crea riqueza y alarga y mejora la calidad de vida de los ciudadanos. El anta?o valor de los recursos primarios ha sido sustituido por el valor a?adido creado por el avance cient¨ªfico y tecnol¨®gico. Nuestra sociedad ha adquirido tal grado de desarrollo que s¨®lo las sociedades tecnol¨®gicas est¨¢n llamadas a ser due?as de su futuro. Mas a¨²n, los futuros profesionales necesitar¨¢n un extraordinario nivel de formaci¨®n cient¨ªfica que s¨®lo estas sociedades ser¨¢n capaces de aportar.Si el siglo XX ha sido el siglo de la qu¨ªmica y de la f¨ªsica el futuro ser¨¢ el siglo de la biomedicina. En la ¨²ltima d¨¦cada, la biomedicina, fundamentalmente en base al desarrollo de la biolog¨ªa molecular y la ingenier¨ªa gen¨¦tica, ha experimentado un extraordinario avance, que ya ha comenzado a rendir los primeros beneficios para mejorar nuestra calidad de vida. La producci¨®n y administraci¨®n de los anticuerpos monoclonales, la fabricaci¨®n de nuevas vacunas, o las nuevas terapias utilizadas en el c¨¢ncer o los procesos degenerativos, ilustran algunos aspectos de los nuevas caminos por los que empieza a caminar la medicina del tercer milenio, la medicina molecular. Sin embargo, la aut¨¦ntica revoluci¨®n en este campo ocurrir¨¢ como consecuencia de ampliar nuestro conocimiento a todas las mol¨¦culas, genes y prote¨ªnas, de las que estamos constituidos los organismos vivos, y el camino para ello ya se ha iniciado con la era de la gen¨®mica y los chips de DNA.
Las investigaciones en biomedicina han alumbrado tambi¨¦n el nacimiento de una nueva era, dominada por las t¨¦cnicas de ingenier¨ªa celular que permiten mantener en cultivo indefinido in vitro, c¨¦lulas humanas totipotentes, o c¨¦lulas madre, capaces de generar todo un organismo y consecuentemente todos los tipos celulares, tejidos y ¨®rganos que lo componen. Estas c¨¦lulas, derivadas inicialmente de oocitos fecundados, han generado enormes expectativas sobre el posible uso para investigaci¨®n de los embriones desechados de los tratamientos mediante fertilizaci¨®n in vitro y, actualmente congelados y no utilizables para otros fines.
Su estudio ha abierto una ventana por la que asomarse a ese viejo anhelo de la especie humana que es la lucha por la eterna juventud, contra el envejecimiento. Sin embargo tambi¨¦n han generado incertidumbre e inseguridad porque permiten atentar contra la dignidad del individuo y la especie humana al hacer posible el clonaje de los humanos.
El envejecimiento es la consecuencia l¨®gica del uso y desgaste de los componentes y se combate con la sustituci¨®n de las piezas defectuosas. Este principio ha constituido una herramienta fundamental del desarrollo industrial. En la especie humana, la sustituci¨®n de los componentes deteriorados no ha sido f¨¢cil y s¨®lo mediante el trasplante de ¨®rganos y el desarrollo de pautas inmunosupresoras eficaces, se ha podido en casos excepcionales, debido a la escasez de donantes, llevar a cabo este principio.
La propagaci¨®n indefinida de c¨¦lulas madre en el laboratorio y la posibilidad de obtener a partir de ellas cart¨ªlago, hueso, m¨²sculo, neuronas, c¨¦lulas de intestino, hepatocitos, c¨¦lulas de p¨¢ncreas, c¨¦lulas hematopoy¨¦ticas o cualquier otro tejido deseado, hace de estas c¨¦lulas una herramienta ilimitada para generar nuevos ¨®rganos capaces de sustituir mediante trasplante aquellos ya gastados por el uso. Patolog¨ªas como la diabetes, la degeneraci¨®n neuronal, los fracasos org¨¢nicos, y un casi infinito et¨¦tera, tienen en la utilizaci¨®n de las c¨¦lulas madre y el trasplante la soluci¨®n de futuro.
Si el envejecimiento representa la acumulaci¨®n de errores y fracasos en los distintos ¨®rganos y tejidos y ¨¦stos pueden ser sustituidos por otros v¨ªrgenes generados a partir de c¨¦lulas madre, que en s¨ª mismas son infinitas porque tienen principio pero carecen de fin, es f¨¢cil imaginar las posibilidades abiertas por las c¨¦lulas madre para la nueva medicina.
La ingenier¨ªa celular adem¨¢s aporta la metodolog¨ªa para eliminar el m¨¢s grave problema asociado al trasplante de ¨®rganos, el rechazo. ?ste se produce como consecuencia de la incompatibilidad gen¨¦tica, entre el donante y el receptor. La reprogramaci¨®n "a la carta" de las c¨¦lulas madre mediante transferencia nuclear puede garantizar la identidad gen¨¦tica donante-receptor y evita el rechazo. Adem¨¢s, la utilizaci¨®n combinada del cultivo de c¨¦lulas madre, la transferencia nuclear y la ingenier¨ªa gen¨¦tica que permitir¨¢ la sustituci¨®n de genes defectuosos por sus hom¨®logos funcionales, abriendo una puerta a trav¨¦s de la cual la terapia g¨¦nica ofrece sus m¨¢s amplias posibilidades. Con ser extraordinarias las posibilidades terap¨¦uticas que la utilizaci¨®n de las c¨¦lulas madre ofrece, no son menos las posibilidades para promover el avance cient¨ªfico. Su estudio permitir¨¢ abordar el conocimiento de los mecanismos moleculares implicados en las etapas tempranas del desarrollo embrionario en humanos y ayudar a identificar fuentes alternativas, distintas de los embriones, para la obtenci¨®n de c¨¦lulas madre. De ello depende una parte importante de nuestro futuro bienestar.
Carlos Mart¨ªnez es profesor del CSIC.
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