La polic¨ªa francesa busca a un etarra del 'comando Madrid' que acompa?aba a Bombi

La polic¨ªa francesa busca al etarra Javier Abaunza Mart¨ªnez, de 35 a?os, identificado como la persona que acompa?¨® a la tambi¨¦n terrorista Julia Moreno Macuso, Bombi, hasta muy poco antes de la detenci¨®n de ¨¦sta en Francia el pasado domingo. Abaunza y Moreno han sido reconocidos por una pareja que los recogi¨® el s¨¢bado pasado en una carretera cerca de Las Landas, despu¨¦s de que los terroristas sufrieran un accidente de tr¨¢fico. Las pesquisas se centran en precisar si los dos etarras contin¨²an en activo en el comando Madrid o si han ascendido a dirigentes de ETA.

El an¨¢lisis del coche con el que se accidentaron ambos terroristas y el testimonio de la pareja que retuvieron posteriormente han permitido la identificaci¨®n de Abaunza y la reconstrucci¨®n de su accidentado itinerario por las regiones francesas de Las Landas y Gironda. La pareja secuestrada se decidi¨® el mi¨¦rcoles a relatar su peripecia con los etarras tras ver publicada en la prensa la foto de Bombi. Hasta entonces hab¨ªan callado, ya que hab¨ªan sido amenazados de muerte para sellar sus bocas. Los dos terroristas sufrieron un accidente de tr¨¢fico el s¨¢bado pasado por la tarde en la localidad de Sore, mientras circulaban por una carretera secundaria. El Peugeot 306 con matr¨ªculas falsas en el que viajaban se sali¨® de la calzada, posiblemente a causa de la lluvia, y qued¨® inutilizado tras caer en una balsa de agua. El coche hab¨ªa sido robado el 10 de febrero en Montr¨¦jeau, muy cerca de la frontera espa?ola de Viella (Arag¨®n).

Abaunza y Moreno recogieron sus pertenencias, intentaron limpiar todas las huellas del 306 y siguieron a pie por la carretera secundaria D-43, en direcci¨®n a la localidad de Pissos. Bajo una intensa lluvia, los dos terroristas hicieron se?as a al menos un coche, ocupado por una pareja, que se detuvo para auxiliarles. Seg¨²n se supo tras la declaraci¨®n de la pareja, los etarras les enca?onaron con sus pistolas, les robaron la documentaci¨®n y les obligaron a llevarlos hacia el Norte, a Burdeos, en cuya plaza de la Victoria los dos terroristas abandonaron a la pareja, ya de noche. Para entonces, la polic¨ªa francesa hab¨ªa localizado el 306 en la balsa de Sore.

Vuelta sobre sus pasos

Esa misma noche, los terroristas robaron en Burdeos otro coche, un Renault Clio, y dieron la vuelta sobre sus pasos, posiblemente para acudir a una cita en alg¨²n punto de las regiones francesas de Las Landas o de los Pirineos Atl¨¢nticos. El viaje concluy¨®, al menos para Moreno Macuso, en Hagetmau (entre las localidades de Mont de Marsan y Ortez), donde los nervios le jugaron una mala pasada cuando fue localizada por una pareja de gendarmes que le dieron el alto.

Macuso, sola en el Clio, se meti¨® por una calle en direcci¨®n prohibida y sufri¨® un peque?o accidente, sobre las siete de la tarde. Seg¨²n las fuentes consultadas, Abaunza Mart¨ªnez no se encontraba lejos. La agencia Vasco Press asegura que varios vecinos han asegurado a la polic¨ªa que Moreno Macuso lleg¨® a Hagetmau en compa?¨ªa de un hombre. La mujer fue detenida.

Abaunza y Moreno, compa?eros de armas en el comando Madrid, desaparecieron del mapa en julio de 1999, tras ser identificados como los dos etarras que siguieron para su secuestro al conde de Siruela, hijo de la duquesa de Alba. Desde entonces, sus fotos han sido exhibidas en afiches en lugares p¨²blicos junto a otros nueve terroristas.

Las investigaciones se centran en saber qu¨¦ hac¨ªan exactamente en Francia. El Ministerio del Interior espa?ol los ten¨ªa catalogados hasta ahora como miembros en activo del comando Madrid, por lo que se especula con que estuvieran en el pa¨ªs vecino para recibir instrucciones sobre nuevos atentados en Espa?a. No obstante, ahora se investiga si ambos se han encuadrado en la direcci¨®n de ETA, posiblemente dentro del aparato log¨ªstico, atra¨ªdos por el terrorista Xabier Garc¨ªa Gaztelu.

Por ello se est¨¢ indagando las citas que ambos ten¨ªan previsto mantener con otros miembros de la organizaci¨®n terrorista. La polic¨ªa sospecha que ETA puede tener un escondite en Las Landas, por lo que las pesquisas contin¨²an para localizar este zulo y la vivienda en la que se alojaba Bombi, as¨ª como sus posibles contactos en la zona. La agenda de Bombi, mojada y con parte de la tinta corrida, puede tener las claves.

Dos asesinatos

La polic¨ªa francesa tambi¨¦n anda ahora tras los pasos de Abaunza, nacido en Gernika (Vizcaya) el 1 de enero de 1965, un hombre fuerte, de pronunciadas entradas, mostacho y 1,66 de estatura. Este terrorista est¨¢ acusado de los asesinatos del teniente coronel Jes¨²s Agust¨ªn Cuesta Abril, cometido el 8 de enero de 1997 en el barrio madrile?o de la Estrella, y del magistrado del Supremo Rafael Mart¨ªnez Emperador, perpetrado el 10 de febrero del mismo a?o tambi¨¦n en Madrid.

El 12 de abril de ese a?o, efectivos del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa localizaron un piso del comando Madrid en la calle Polibea, despu¨¦s de que estallara el detonador de una bomba que se encontraba en la vivienda. Tras la deflagraci¨®n, los inquilinos del piso huyeron. En el interior del inmueble fue encontrado un aut¨¦ntico arsenal, adem¨¢s de ropa masculina y femenina, placas de matr¨ªcula y tres pelucas, entre otros objetos.

El piso hab¨ªa sido ocupado por Ainhoa M¨²gica, Juan Antonio Olarra, Javier Abaunza y los ciudadanos alemanes Renate Heike Schubbert y su compa?ero, Fritz Gary Siemund, que hab¨ªan sido los encargados de alquilar la casa. Posteriormente fueron encontrados otros dos pisos del comando Madrid, uno en la calle de Bravo Murillo y otro en la del General ?lvarez Castro, alquilados tambi¨¦n por Siemund y Schubbert, respectivamente.

Julia Moreno Macuso, de 26 a?os, fue trasladada el jueves de Bayona a Par¨ªs, donde pas¨® a disposici¨®n de la juez de la secci¨®n antiterrorista de la Fiscal¨ªa de la capital, Laurent Le Vert. Bombi fue conducida por carretera a Biarritz, desde donde fue embarcada en un avi¨®n rumbo a Par¨ªs. En el aeropuerto de Biarritz, unos 50 simpatizantes etarras se concentraron con anagramas de ETA para mostrar su apoyo a Macuso. La juez orden¨® su ingreso en prisi¨®n, acusada de asociaci¨®n de malhechores con fines terroristas y otros cinco delitos. Macuso se neg¨® a declarar.