"Para adentrarse en el oc¨¦ano que es la mujer, no hay cartas, uno navega a ciegas ", afirma P¨¦rez-Reverte

El escritor Arturo P¨¦rez-Reverte recurri¨® ayer a su vocaci¨®n melvilliana para compadecer a los hombres que no saben imaginar que existen barcos hundidos. En la presentaci¨®n en Valencia de su ¨²ltima novela, La carta esf¨¦rica (Alfaguara), en la que por primera vez hace un recorrido por la mujer y el mar, el creador del capit¨¢n Alatriste volvi¨® a reivindicar la pasi¨®n por la aventura a la hora de relatar la historia de un marino sin barco, desterrado del mar y rescatado por una mujer que le devuelve a la aventura marina. Una trama que, si bien conserva los mismos ingredientes que el resto de su obra -"misterio, enigma y aventura"-, se diferencia de las dem¨¢s en que por primera vez aborda de lleno el tema del mar, "una especie de retaguardia", de la que dijo "hab¨ªa evitado cuidadosamente".El segundo rasgo diferencial de La carta esf¨¦rica reside en la concepci¨®n de la mujer, que P¨¦rez-Reverte recrea con una fuerza inusual en sus novelas como arquetipo de libertad y de capacidad para lograr lo que se proponga. "Mientras en el mar hay cartas n¨¢uticas, mapas y tecnolog¨ªa que te permiten navegar; para adentrarse en el oc¨¦ano que es la mujer no existen cartas, ni se?ales, uno navega a ciegas", dijo. "Siempre he dicho que soy un marino que accidentalmente escribe", asegur¨® el novelista nacido en Cartagena, que rinde en sus p¨¢ginas culto al Mediterr¨¢neo. Es la primera vez que el mar aparece en la obra novel¨ªstica de P¨¦rez Reverte, que desde su retirada del periodismo activo en 1994 dedica buena parte de su tiempo a la navegaci¨®n. Seg¨²n el autor, toda la literatura n¨¢utica desde Homero a Conrad y Melville, est¨¢ contenida en las 600 p¨¢ginas de una novela que ha alcanzado unanimidad en cr¨ªticas y ventas, y se prepara para ver la tercera edici¨®n.