El adelanto de la segunda reforma fiscal

El que hoy ser¨¢ elegido presidente del Gobierno, Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, no quiere dejar para el final de la legislatura su segunda reforma fiscal. Ser¨¢ en el a?o 2001 si, como anunci¨® ayer, en el primer d¨ªa del debate de investidura, se consigue alcanzar el equilibrio presupuestario previsto para un a?o despu¨¦s en el Plan de Estabilidad.Si la econom¨ªa mantiene el alto ritmo de crecimiento actual, cercano al 4%, ser¨¢ posible eliminar el d¨¦ficit p¨²blico. Pero la situaci¨®n ahora no es tan clara como la que permiti¨® el pasado a?o rebajar el IRPF. Los tipos de inter¨¦s van a seguir al alza y las bolsas se tambalean. Las consecuencias son que el coste de la deuda se encarece, suben los cr¨¦ditos y hay menos riqueza. Al final, m¨¢s gasto p¨²blico y menos crecimiento econ¨®mico.

Aznar cuenta con que ha cerrado la pasada legislatura con un d¨¦ficit p¨²blico del 1,1% del PIB, el m¨¢s bajo de la historia. La cifra es v¨¢lida como tal, pero encierra buenas dosis de artificio contable. Casi 1,5 billones de pesetas se han adjudicado al pasado, ya no se asume deuda de las empresas p¨²blicas, tampoco los costes de la reconversi¨®n industrial y un largo etc¨¦tera.

No es, pues, oro todo lo que reluce en la gesti¨®n presupuestaria y por ello Aznar lanz¨® ayer sobre las comunidades aut¨®nomas buena parte de la responsabilidad. No es posible que el gasto del Estado se modere -gracias al crecimiento econ¨®mico y a la contabilidad creativa- y el de las autonom¨ªas crezca, necesariamente, muy por encima. Ahora, con las manos libres de compromisos pol¨ªticos, Aznar dibuj¨® lo que ser¨¢ el nuevo sistema de financiaci¨®n auton¨®mica. Habr¨¢ m¨¢s corresponsabilidad en los impuestos y, tambi¨¦n, menos transferencias del Estado. Toca apretarse el cintur¨®n a todos por igual.

Esa liberaci¨®n se hizo tambi¨¦n expl¨ªcita en una de las medidas que Aznar lanz¨® como correctivo para la inflaci¨®n. El sector del gas, el monopolio catal¨¢n, que hasta ahora se ha resistido a todos los planes de liberalizaci¨®n econ¨®mica del anterior Gobierno, ser¨¢ desmontado. Proseguir¨¢ la apertura del mercado de las telecomunicaciones y habr¨¢ una reforma del sistema de financiaci¨®n de los ayuntamientos que les reste competencias sobre el suelo con el objetivo de abaratar su coste.

Al contrario de lo que sucedi¨® con el d¨¦ficit, Aznar no consigui¨® cerrar la anterior legislatura con la inflaci¨®n bajo control, ni eliminar el diferencial con los dem¨¢s pa¨ªses del euro. Tampoco ha logrado el avance en la reducci¨®n del paro que cabr¨ªa esperar del alto crecimiento econ¨®mico registrado. Ayer reiter¨®, por ello, su intenci¨®n de abordar "con urgencia" una segunda reforma laboral que ampl¨ªe la flexibilidad, logre el pleno empleo y baje la tasa de temporalidad, ahora el 32,6%.

Las reforma de las pensiones, con la convocatoria inmediata del Pacto de Toledo, cierra el c¨ªrculo del programa econ¨®mico del nuevo Gobierno. Aznar explic¨® que hay que jubilarse m¨¢s tarde y que subir¨¢n las pensiones m¨¢s bajas. Pero no dijo nada de los llamados complementos a m¨ªnimos, es decir, los 600.000 millones de pesetas con que se completan las pensiones m¨¢s bajas que no llegan al m¨ªnimo legal. La cuesti¨®n es si se van a financiaciar con impuestos y no con cotizaciones como apuntaba el todav¨ªa vigente Pacto de Toledo.