El Foro de Dakar financiar¨¢ la educaci¨®n a los pa¨ªses pobres que elaboren planes antes de 2002 La resoluci¨®n final de la cumbre considera zonas prioritarias ?frica y el sur de Asia
El Foro Mundial de la Educaci¨®n, organizado por la ONU y el Banco Mundial, se comprometi¨® ayer a financiar la educaci¨®n b¨¢sica de ni?os y adultos en los pa¨ªses pobres que realicen un "compromiso serio" en esa pol¨ªtica. "Ning¨²n pa¨ªs ver¨¢ sus esfuerzos contrariados por falta de recursos", dej¨® claro el Marco de Acci¨®n adoptado ayer en Dakar (Senegal) por 183 pa¨ªses. El compromiso requiere, por parte de los receptores, elaborar un plan para la Educaci¨®n para todos de aqu¨ª a 2002. ?frica y el sur de Asia son zonas prioritarias, as¨ª como los pa¨ªses en conflicto o en curso de reconstrucci¨®n.
Los fondos para financiar esas pol¨ªticas educativas acordadas ayer en Dakar podr¨¢n venir de todo tipo de instituciones p¨²blicas o privadas, del alivio de la deuda y de la cooperaci¨®n. Los planes de cada pa¨ªs deber¨¢n "ser definidos por los responsables nacionales en consulta directa y sistem¨¢tica con la sociedad civil, canalizar la ayuda coordinada de todos los socios del desarrollo, definir las reformas seg¨²n los objetivos de la Educaci¨®n para todos, establecer un cuadro financiero a largo plazo, realizar evaluaciones a medio plazo e integrarse en el proceso de planificaci¨®n del desarrollo nacional", seg¨²n el Marco de Acci¨®n.?Qui¨¦n decidir¨¢ qu¨¦ es un "compromiso serio"? "Habr¨¢ que establecer mecanismos consensuados", dice Sven Osttweit, secretario ejecutivo del Foro. "Es tarea dif¨ªcil, que en diez meses no hemos conseguido definir, pero con el Marco de Acci¨®n ya sobre la mesa sin duda ser¨¢ realidad". El Marco no avanza presupuestos concretos, pero Osstveit pide calma. "Con los planes nacionales podremos trabajar en eso. Hemos calculado que la educaci¨®n b¨¢sica municipal costar¨ªa 8.000 millones de d¨®lares, pero hay que evaluar y compulsar muchos aspectos", dice.
Desde el pasado mi¨¦rcoles, convocados por la ONU -Unesco, Unicef, Programa para el Desarrollo (PNUD) y Fondo de Ayuda a la Poblaci¨®n (FNUAP)- y por el Banco Mundial (BM), 183 pa¨ªses han asestado y encajado discursos p¨²blicos y maniobras orquestales de pasillo. Pero, ahora, el futuro del mundo depende, en lo que se refiere a educaci¨®n, de lo que acordaron ayer.
Tanto los organizadores como las ONG est¨¢n de acuerdo en que Dakar supone un avance sobre la anterior cumbre, celebrada en Jomtien (Tailandia) en 1990. "Yo estuve all¨ª", dice el portavoz del Foro, Yibril Diallo, "y puedo asegurar que no hay punto de comparaci¨®n. All¨ª ni siquiera se afront¨® el abismo de disparidades en la educaci¨®n de ni?os y ni?as. Dakar no va a ser una plegaria, sino un impulso para elevar el list¨®n de la moral, de modo que ning¨²n pa¨ªs pueda hacer algo que no llegue a ese list¨®n".
Diallo aprovech¨® para referirse a la necesidad de condonaci¨®n de la deuda externa a los pa¨ªses m¨¢s empobrecidos, y recalc¨® la urgencia de "dinero fresco" y de menos ret¨®rica. "El ¨²ltimo informe de la OCDE rechaz¨® la condonaci¨®n", record¨® el portavoz del Foro.
Las ONG de la Campa?a Mundial por la Educaci¨®n para todos valoraron ayer el Marco de Acci¨®n como "el buen camino, que se puede mejorar en mucho", e instaron a vigilar los resultados. Convinieron en que la diferencia con Jomtien no est¨¢ tanto en el texto como en el esp¨ªritu, y saludaron la iniciativa de los planes de acci¨®n nacionales y la intencionalidad financiera, y, por encima de todo, el papel reconocido a la sociedad civil.
La ense?anza primaria
No obstante, denunciaron que el Foro no ha aceptado incluir en su resoluci¨®n la propuesta de que todos los pa¨ªses, ricos o pobres, dediquen el 6% del PIB a la educaci¨®n b¨¢sica -idea formulada a la Unesco en 1966 por Jacques Delors-, ni tampoco han querido pedir que se aumente la ayuda a la ense?anza primaria del 2% al 8%.
El Marco de Acci¨®n acordado en Dakar formula los siguientes objetivos para la Educaci¨®n para todos: desarrollar la protecci¨®n y educaci¨®n de la primera infancia, ense?anza primaria universal para el a?o 2015, acceso de los j¨®venes al aprendizaje para incorporarse a la vida, acceso de los adultos a la educaci¨®n permanente, eliminar las disparidades entre los sexos en la ense?anza antes de 2000 y mejorar la calidad de la educaci¨®n, sobre todo en lo referente a los resultados en lectura, escritura, c¨¢lculo y competencias indispensables en la vida corriente.
Ya el pasado jueves, la propuesta que hizo el presidente del Banco Mudial, James Wolfsensohn, indicaba por d¨®nde iban los tiros. Wolfsensohn habl¨® de adoptar un plan de acci¨®n para aumentar los 1.900 millones de d¨®lares que destina a educaci¨®n, y a orientar esa ayuda a los pa¨ªses que establezcan estrategias estatales de desarrollo educativo.
Hoy por hoy, globalmente hablando, la educaci¨®n se financia as¨ª en el mundo: el 63% corre a cargo de los Estados; familias, comunidades, asociaciones y ONG sufragan un 35%, y toda la ayuda de las agencias internacionales no pasa del 2%.
Debajo de toneladas de documentos y horas y horas de debates est¨¢ la realidad que, en el caso de la educaci¨®n, es especialmente realista: 880 millones de analfabetos totales, un n¨²mero imposible de calcular de analfabetos funcionales (no s¨®lo en los pa¨ªses pobres), 125 millones de ni?os sin escolarizar y 150 millones de menores, en sus dos terceras partes ni?as, que no acaban sus estudios porque se les reclama para ayudar a la supervivencia de la familia, o para casarse, que en la inmensa mayor¨ªa de las sociedades sigue siendo, prioritariamente, un suceso de car¨¢cter econ¨®mico.
La peor parte, ?frica
La peor parte se la lleva ?frica, con 42 millones de ni?os sin escolarizar, con el mayor crecimiento de poblaci¨®n (2,6%) y la tasa de urbanizaci¨®n m¨¢s r¨¢pida (4,3%) del mundo. Y con un 69% de los casos de sida del planeta: la pandemia ha diezmado en algunos pa¨ªses a m¨¢s de un tercio de los profesores, y en el continente hay 13 millones de hu¨¦rfanos por una enfermedad que ya ha matado a 23 millones.
Adem¨¢s, est¨¢ la deuda externa, imposible de pagar para numerosos pa¨ªses: s¨®lo en intereses de la deuda, ?frica paga 13.000 millones de d¨®lares al a?o. Para completar lo irracional del problema, la ONU calcula que toda la educaci¨®n primaria africana se podr¨ªa sufragar con 3.000 millones de d¨®lares.
Por cierto que el apunte final del Foro celebrado en Dakar se concret¨® en que el pr¨®ximo encuentro se celebrar¨¢ el a?o 2015. Y ya tiene un postor. La delegaci¨®n espa?ola hizo oficial su ofrecimiento de organizar esa lejana cumbre y se encarg¨® de que los medios de comunicaci¨®n se dieran por enterados.
Transici¨®n a la calidad
Aunque el Foro ha hecho constante hincapi¨¦ en la educaci¨®n b¨¢sica, problema que afecta sobre todo al continente maldito, ?frica, otros pa¨ªses del Grupo de los Nueve -Brasil, M¨¦xico, India, Indonesia, Egipto, Pakist¨¢n, Bangladesh, Nigeria y China-, de gran poblaci¨®n y potencia emergente, plantearon un significativo moh¨ªn de protesta para quejarse del poco peso en la cumbre. El reto que encaran no es la escolarizaci¨®n, sino el sostenimiento de una educaci¨®n de calidad, no infectada de fracaso escolar y de consecuencias rayanas al analfabetismo funcional. Situaci¨®n que tambi¨¦n comparten pa¨ªses con buena cobertura de ense?anza primaria como Argentina, donde, al igual que Brasil, tampoco existe la amenaza del analfabetismo femenino, porque las ni?as superan en n¨²mero a los ni?os en cualquier aula.
"Lo que buscamos es que se reconozca un grupo de transici¨®n, al que se d¨¦ un tratamiento distinto al de los pa¨ªses m¨¢s desfavorecidos, porque lo que necesitamos es apoyo en redes inform¨¢ticas o en programas de escuela radiof¨®nica", sintetiza la mexicana Sof¨ªa Leticia Morales.
Esperanza y realismo para huir de la miseria
Para despegar del fatal legado de la ignorancia y de la miseria, no parece haber f¨®rmulas m¨¢gicas, a no ser la combinaci¨®n de esperanza y realismo. "La educaci¨®n abarca todos los problemas del desarrollo", dice Mark Malloch Brown, administrador del Programa para el Desarrollo (PNUD). "Se necesita desarrollar estrategias nacionales que impliquen a Gobierno, instituciones y ONG, para as¨ª recabar el apoyo de las agencias internacionales; pero la ayuda internacional tiene que ser simult¨¢nea a la elaboraci¨®n de los planes nacionales", a?ade.Esas estrategias pasan, a escala familiar, por "lograr que los padres se comprometan con la educaci¨®n de sus hijos, que no la vean como una carga y se sientan tentados a prescindir de ese gasto. Si ello se une al fortalecimiento de estructuras m¨¢s y m¨¢s democr¨¢ticas, se estar¨¢ en el buen camino".
Malloch Brown no cree incurrir en romanticismos. "En India o Brasil hay ejemplos de movilizaci¨®n familiar y social. Entramos, adem¨¢s, en una era revolucionaria: la expansi¨®n incre¨ªble de Internet, un medio que es ya muy popular, que supone un bajo costo y aporta la posibilidad del aprendizaje a distancia. Y el hecho de que, mientras en los a?os 80 hab¨ªa 2.000 millones de personas viviendo en democracias, hoy se encuentran en esa situaci¨®n entre los 4.000 y 5.000 millones".
Mientras palabras as¨ª se pronuncian, muchos pa¨ªses africanos viven en guerra, incluso Senegal. "Los ni?os no merecen el castigo de la guerra, que les sumergen en el sufrimiento y la ignorancia. Hay que asegurar, como sea, una educaci¨®n para ellos", dice Malloch Brown.
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