El ejemplo de ?lava

?lava, la menos nacionalista de las provincias vascas, ha sido la p¨¦rdida m¨¢s visible de los partidos nacionalistas nada m¨¢s embarcarse en la apuesta por la superaci¨®n del marco estatutario. En nueve meses, los principales ¨®rganos de poder, Diputaci¨®n Foral, Ayuntamiento de la capital (Vitoria), y la caja de ahorros provincial, Caja Vital, han pasado a manos del PP.La primera pista sobre la personalidad pol¨ªtica de este territorio la proporcionaron las elecciones de 1977, que gan¨® UCD. El nacionalismo nunca ha logrado enviar al Congreso m¨¢s de un diputado de los cuatro en liza en el territorio, y en ?lava siempre ha ganado el partido vencedor en el conjunto de Espa?a. El PNV atrajo la provincia hacia el nacionalismo durante el debate estatutario. Un papel vital jugaron incorporaciones al partido de personalidades moderadas como Emilio Guevara y Jos¨¦ ?ngel Cuerda, hoy instalados en la cr¨ªtica a la doctrina oficial del PNV. Otros alicientes fueron el establecimiento de la capitalidad en Vitoria y el reparto paritario de esca?os en el Parlamento vasco. ?ste otorga a ?lava, con 244.000 censados, igual representaci¨®n (25 esca?os) que a Guip¨²zcoa, que casi la triplica en poblaci¨®n, y Vizcaya, que ronda el mill¨®n de habitantes. Esta prima puede resultar decisiva para las dimensiones del Grupo Parlamentario del PP en las pr¨®ximas auton¨®micas. Este partido obtuvo 66.000 votos el 12-M, casi el doble que el PNV, y 15.000 m¨¢s que los socialistas en su mejor momento.

Si las aspiraciones soberanistas ten¨ªan ya un hueso imposible de roer en el Pa¨ªs Vasco franc¨¦s y otro en Navarra, los resultados electorales de junio de 1999 incorporaron a ?lava a la lista de obst¨¢culos. Y ello supuso a la coalici¨®n PNV-EA la p¨¦rdida del poder, que han ejercido en la provincia desde 1979.

Los 390 votos que el PP sac¨® de ventaja al PNV en los comicios forales fueron suficientes para que el nacionalismo se haya visto desalojado de todas las instancias de poder, salvo las alcald¨ªas de 44 peque?as localidades. El municipio de mayor dimensi¨®n donde el PNV triunf¨® fue Oyon, en La Rioja alavesa, (2.002 electores). V¨ªctima de una especie de pinza, el PNV perdi¨® Vitoria a manos del PP, y el siguiente ayuntamiento en importancia, Llodio, se lo arrebat¨® Euskal Herritarrok.

La Diputaci¨®n, que tiene competencias vitales como la de Hacienda y que es un ¨®rgano de primera magnitud para influir en los pueblos de la provincia, qued¨® en manos del PP, que la gobierna con apoyo externo de los socialistas, igual que el Ayuntamiento de la capital. El PNV conoce mejor que nadie los mecanismos de penetraci¨®n social que ofrece la instituci¨®n foral, con cuyos favores ganaron para el nacionalismo las alcald¨ªas de muchas localidades donde esa posici¨®n pol¨ªtica era inexistente. Los ha utilizado con habilidad durante 20 a?os y ahora teme que el PP haga lo mismo, condenando al nacionalismo a una larga traves¨ªa del desierto. El ¨²ltimo basti¨®n por el que el PNV luch¨® a brazo partido hasta el ¨²ltimo momento era la influyente Caja Vital. Que este organismo se les escapara por s¨®lo dos votos y que esos votos se los negara, adem¨¢s, el propio sindicato nacionalista ELA, da idea de su soledad y aislamiento en estos momentos. Algo que perciben muy bien los afiliados alaveses del PNV, uno de los cuales, desde la reserva del anonimato, se?ala que su partido piensa "con sensibilidad guipuzcoana", y asegura que quienes lo hacen "no conocen esto". Tal vez por ello, ?lava es el ¨²nico territorio donde dos listas compiten por la direcci¨®n provincial del partido.