Alemania eleva dr¨¢sticamente el alquiler de los 108 tanques cedidos al Ej¨¦rcito espa?ol

Alemania ha empezado a pasar factura a Espa?a por su decisi¨®n de vender la empresa de armamento Santa B¨¢rbara a la compa?¨ªa estadounidense General Dynamics, en perjuicio de la oferta presentada por las firmas germanas Krauss Maffei y Rehinmetall. El Gobierno alem¨¢n ha adelantado su intenci¨®n de elevar dr¨¢sticamente el precio que el Ej¨¦rcito espa?ol paga por los 108 carros de combate Leopard cedidos en 1995. Su prop¨®sito es aumentar hasta en 20 veces los 10.000 marcos (850.000 pesetas) anuales que costaba hasta ahora el alquiler de cada tanque.

El pasado 12 de abril, la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) decidi¨® vender la Empresa Nacional Santa B¨¢rbara (ENSB) a la compa?¨ªa General Dynamics, de Estados Unidos. La decisi¨®n caus¨® sorpresa por el momento en que se produjo, con un Gobierno en funciones, y por la identidad de la adjudicataria: la empresa americana produce el carro de combate AM1A1 Abrams, principal competidor del alem¨¢n Leopard, que fabrican Krauss Maffei y Rehinmetall. Sin embargo, el mayor activo de Santa B¨¢rbara es precisamente el contrato de fabricaci¨®n de 235 Leopard para el Ej¨¦rcito espa?ol por 317.000 millones de pesetas.La reacci¨®n del Ejecutivo alem¨¢n no se ha hecho esperar. La privatizaci¨®n de Santa B¨¢rbara ha coincidido con la expiraci¨®n del contrato de alquiler por cinco a?os de los 108 carros de combate de Leopard 2A4 que constituyen la punta de lanza del Ej¨¦rcito de Tierra. Estos tanques fueron cedidos en 1995 por un precio pol¨ªtico (850.000 pesetas por Leopard y a?o), como anticipo de los que se entregar¨ªan cuando comenzase su fabricaci¨®n en Espa?a.

Carta de Schr?der

La adjudicaci¨®n de Santa B¨¢rbara a su competidor americano ha llevado al Gobierno alem¨¢n al convencimiento de que ya no hay razones que justifiquen un trato de favor. Aunque las negociaciones est¨¢n en su fase inicial, las autoridades germanas han adelantado su intenci¨®n de aumentar hasta en 20 veces el precio de alquiler de cada Leopard, situ¨¢ndolo en unos 20 millones de pesetas al a?o.

Si Alemania no flexibiza su postura, el Ej¨¦rcito podr¨ªa verse obligado a devolver los tanques. Pero aun as¨ª tendr¨ªa que realizar una fuerte inversi¨®n para poder devolverlos en el mismo estado en que le fueron entregados hace cinco a?os.

La pretensi¨®n de aumentar dr¨¢sticamente el alquiler de los Leopard revela el malestar que ha producido en Alemania la decisi¨®n sobre Santa B¨¢rbara. El propio presidente Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar ya tuvo una prueba de dicho malestar a finales del pasado mes de febrero, cuando recibi¨® una carta de su hom¨®logo alem¨¢n, Gerhard Schr?der.

En su misiva, ¨¦ste se daba por enterado de que el Gobierno espa?ol se hab¨ªa decidido en favor de la opci¨®n norteamericana. Pero Schr?der recordaba a Aznar que los responsables espa?oles hab¨ªan emplazado al consorcio alem¨¢n a que presentase una mejora de su oferta antes del 21 de febrero y se mostraba sorprendido de que ni siquiera se esperase a agotar dicho plazo para tomar la decisi¨®n.

La iniciativa del canciller alem¨¢n hizo que la resoluci¨®n se demorase hasta despu¨¦s de las elecciones del 12 de marzo. El 23 de ese mes se celebr¨® una nueva reuni¨®n entre los representantes gubernamentales y los del consorcio alem¨¢n en la que estos quedaron en presentar por escrito una serie de aclaraciones a su ¨²ltima oferta. El 11 de abril, sin embargo, el Consejo de Administraci¨®n de la SEPI zanj¨® la disputa en favor de General Dynamics, alegando que su plan industrial era mucho mejor que el alem¨¢n.

Hasta 24 horas antes de la decisi¨®n, el Ministerio de Defensa abog¨® por la opci¨®n germana, por temor a que la norteamericana pudiera poner en peligro el programa Leopard.

De hecho, la decisi¨®n de la SEPI ha obligado a abrir negociaciones con Krauss Maffei y Rehinmetall en torno a la protecci¨®n de la tecnolog¨ªa alemana. Se trata de garantizar que los conocimientos transmitidos a Santa B¨¢rbara-General Dinamycs para fabricar el Leopard en Espa?a no sean utilizados en otros programas.

Si las conversaciones en curso terminaran sin acuerdo, s¨®lo habr¨ªa dos alternativas: la SEPI tendr¨ªa que romper su pacto con General Dinamycs o el Ej¨¦rcito espa?ol renunciar al Leopard. En teor¨ªa, podr¨ªa sustituir el tanque alem¨¢n por el norteamericano Abrams, pero el cambio ser¨ªa muy costoso y retrasar¨ªa el programa varios a?os.