Carlos Santana trae a Espa?a la "inspiraci¨®n divina" de su premiado disco 'Supernatural' El guitarrista inicia hoy una gira en Madrid que lo llevar¨¢ por varias ciudades de Europa
Carlos Santana habla con naturalidad de ¨¢ngeles y de racismo, critica las religiones y defiende a los chamanes, predica contra la violencia y se pronuncia a favor de la pena de muerte. Un individuo extra?o este guitarrista de origen mexicano que este a?o ha ganado nueve premios Grammy con su disco Supernatural y lleva ya vendidos 19 millones de ¨¢lbumes en todo el mundo. Un individuo extra?o, contradictorio y tambi¨¦n una leyenda del rock que ha resurgido de sus cenizas. Hoy empieza en Madrid una gira europea que lo llevar¨¢ ma?ana a Zaragoza y el s¨¢bado a Barcelona.
Supernatural es el ¨¢lbum n¨²mero 23 en la discograf¨ªa de Carlos Santana. Una larga carrera que lo encumbr¨® hasta los altares del rock en los a?os setenta como el guitarrista que introdujo los sonidos latinos a este g¨¦nero y que tambi¨¦n conoci¨® momentos bajos en la ¨²ltima decada. Milagrosamente ahora resurge como disparado hacia el firmamento con este nuevo disco, en el que se une a las voces y composiciones de una serie de j¨®venes m¨²sicos como Wyclef Jean, Lauryn Hill, Rob Thomas o Eagle Eye Cherry y otros veteranos como Eric Clapton o Dave Mathews.Milagrosamente -lo dice ¨¦l-, porque este disco surge por inspiraci¨®n divina. "Todo lo relacionado con este disco ha salido de una forma supernatural y divina", afirma. "El ¨¢ngel Metatr¨®n me dijo durante una meditaci¨®n que deb¨ªa hacer este ¨¢lbum para recordar que los seres humanos no somos s¨®lo carne, sino seres espirituales, pero que no necesitamos de gurus y de papas, que lo que dice la Biblia es cosa del pasado. Lo importante ahora es que la gente abra su coraz¨®n para recibir instrucciones sobre una nueva forma de vivir. Supernatural es un disco dirigido a lo m¨¢s alto de la gente, de la vida y del mundo".
Santana dice todo esto sin la prepotencia de quien quiere imponer sus ideas. Lo hace con una voz suave, con gestos algo femeninos y una mirada tranquila. "Este disco tiene la intenci¨®n y el prop¨®sito de transformar el miedo y la violencia que reinan en Estados Unidos por el uso de las armas en lo opuesto, que es la alegr¨ªa y la armon¨ªa. Esto no es un producto de Hollywood o del show business, lo hicimos para dar inspiraci¨®n y ¨¢nimo a la gente".
Metamorfosis
Pero Carlos Santana no siempre fue as¨ª. Sus tiempos salvajes y alucinados en la ¨¦poca de Woodstock, su ira contra el mundo en las ¨¦pocas malas, quedaron atr¨¢s en 1995. Santana sufri¨® una metamorfosis. "El Carlos Santana de los setenta se transform¨® dr¨¢sticamente tras una terapia. Acud¨ª a ese tratamiento para salvar mi matrimonio. Ten¨ªa mucha rabia y odio entonces, pero yo ya no soy ¨¦se. Ahora no siento que todo el mundo se levanta cada d¨ªa para joderme, sino que todos nos levantamos para crear".
Est¨¢ considerado como uno de los grandes guitarristas del rock, pero ¨¦l se siente m¨¢s c¨®modo en una posici¨®n m¨¢s humilde. "Hay m¨²sicos en la calle que me matan en cinco minutos", afirma en un espa?ol que lucha contra el ingl¨¦s que habla desde hace m¨¢s de 30 a?os. "No compito con otros guitarristas, no soy el rey de nada, pero, gracias a Dios, puedo expresarme en una serie de estilos, porque parto del origen de la m¨²sica africana. Tengo alma de estudiante, no de profesor, y me gustar seguir aprendiendo".
?frica es otro de los temas en los que insiste Carlos Santana. "Es importante que honremos a la m¨²sica africana. De ah¨ª han surgido en Am¨¦rica ritmos como la cumbia, el cha-cha-cha, el mambo o el blues. Me gusta ba?arme en esa m¨²sica, porque es tambi¨¦n la semilla para la m¨²sica del futuro", declara. En su concierto de Madrid act¨²a de telonero el grupo senegal¨¦s Tour¨¦ Kunda. "Sue?o con ir a ?frica y tocar para Mandela o Desmond Tutu. Estamos dando parte de la recaudaci¨®n de esta gira a M¨¦dicos Sin Fronteras y otras organizaciones humanitarias que se preocupan por la educaci¨®n. Las iglesias tienen mucho oro, pero no dan de comer a la gente. La mayor¨ªa de las religiones son un negocio, por eso no me interesan. La espiritualidad es como el agua, las religiones son como la Coca-Cola o la Pepsi. Si vamos a entrar en un nuevo milenio, debemos usar nuestro talento para que las personas tengan por lo menos agua y electricidad. No hice este ¨¢lbum para ganar fama y dinero, eso ya lo ten¨ªa. Dios me dijo que lo hiciera para ayudar a otra gente", afirma juntando las manos en gesto de oraci¨®n.
Como mexicano que ha vivido la mayor parte de su vida en Estados Unidos, Santana siente que el auge de la m¨²sica latina es una oportunidad para cambiar ciertas cosas. "Quisiera que Ricky Martin, Man¨¢, Jennifer L¨®pez y otros artistas de origen hispano nos juntemos para cambiar la imagen que propagan las pel¨ªculas de Hollywood. En ellas, las mujeres hispanas son siempre sirvientas y prostitutas, y los hombres, delincuentes. Si nos unimos, podemos lograr cosas muy positivas para los hispanos; no quiero que sigamos siendo invisibles. Lo m¨¢s importante es invertir en educaci¨®n. Seis de cada diez ni?os hispanos en EEUU abandonan la escuela y se quedan en las calles".
Pero su defensa de la espiritualidad, de la educaci¨®n y de los m¨¢s desprotegidos no impide que sea partidario de la pena de muerte. "La vida es sagrada; pero estoy a favor de que a los que matan ni?os se los saque de este planeta", dice. "No creo en la muerte, es s¨®lo un tr¨¢nsito. Por eso creo que los que atentan contra otros deben salir con dignidad de este mundo para que no sigan haciendo da?o. Lo importante es que se invierta m¨¢s dinero y esfuerzos para que no se condene a inocentes. A George Bush le gusta eliminar a mexicanos y negros, y han muerto muchos sin ser culpables".
Babelia
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