Escepticismo en los partidos vascos sobre las posibilidades reales del sector cr¨ªtico de HB
Las fuerzas pol¨ªticas vascas recibieron con m¨¢s escepticismo que esperanza el manifiesto de un grupo de cr¨ªticos de HB y su intenci¨®n de constituirse en corriente organizada para defender la apuesta exclusiva por la v¨ªa pol¨ªtica, que lleva consigo la exigencia a ETA de otro alto el fuego y el final de la intimidaci¨®n de la violencia callejera. Portavoces habituales del mundo radical dieron la "bienvenida" al debate de refundaci¨®n de HB al mencionado grupo, pero los representantes de los otros partidos mostraron sus dudas sobre sus posibilidades reales de influencia.
La reacci¨®n oficial del mundo radical consisti¨® en felicitarse por lo que el documento presentado por los cr¨ªticos de HB tiene de aportaci¨®n al debate interno que la coalici¨®n desarrollar¨¢ durante todo el pr¨®ximo a?o con vistas a constituir una nueva organizaci¨®n. El proceso, denominado Batasuna (Unidad), se presenta abierto a todas las "sensibilidades" nacionalistas y de izquierdas, independientemente de su postura respecto a ETA. En el grupo, fundamentado en Navarra, se encuentran el portavoz de EH en el Ayuntamiento de Pamplona, Patxi Zabaleta; el parlamentario foral Pablo Mu?oz y el ex diputado y ex miembro de la Mesa Nacional de HB I?aki Aldekoa.
El portavoz de EH, Joseba Permach, dio la "bienvenida" al texto conocido el domingo, al que debe seguir una ponencia cuya presentaci¨®n se anuncia para mediados del pr¨®ximo mes de junio. No obstante, Permach lanz¨® ya una primera advertencia al pedir que, "por respeto a los militantes", todos los planteamientos existentes se expongan en el interior de las asambleas y no a trav¨¦s de los medios de comunicaci¨®n.
Por su parte, el representante de la coalici¨®n radical en el Parlamento foral navarro, Pernando Barrena, rebaj¨® la entidad del documento elaborado por el grupo cr¨ªtico: a su entender, se tratar¨ªa de una "carta" en la que "gente de EH hace una reflexi¨®n sobre el momento pol¨ªtico".
El secretario general del sindicato LAB, Rafael D¨ªez Usabiaga, de marcada influencia en los medios radicales y abertzales, calific¨® la iniciativa de "enriquecedora" y pidi¨® que haya desde el principio una actitud "abierta" para integrar cualquier opini¨®n en la definici¨®n de la nueva unidad popular y la nueva estructura pol¨ªtica de la izquierda abertzale.
Dudas
Los portavoces de las otras fuerzas pol¨ªticas vascas entienden que la mera existencia y defensa dentro de HB de las posturas manifestadas por el grupo de Zabaleta, Mu?oz y Aldekoa ha de contemplarse como un elemento positivo.
Pero todos mantienen tambi¨¦n dosis considerables de escepticismo sobre el alcance real de la influencia que su posicionamiento pueda alcanzar en la definici¨®n final por la que opte la izquierda abertzale. Y nadie cree que ¨¦sta vaya a enfrentarse a ETA, por lo que el triunfo del criterio de los cr¨ªticos y otros similares s¨®lo resultar¨ªa posible si se produjera una evoluci¨®n de la banda terrorista en la misma direcci¨®n.
Todos ellos recuerdan experiencias precedentes de cr¨ªticas y disidencias que siempre se saldaron con la condena al ostracismo organizativo o al abandono silencioso de quienes las sostuvieron.
La presidenta de Eusko Alkartasuna, Bego?a Errazti, fue quien con m¨¢s crudeza se expres¨®. As¨ª, afirm¨® que este grupo "lleva a?os diciendo lo mismo, pero contin¨²a donde estaba, en HB", y record¨® que Zabaleta y Aldekoa tienen "mucha responsabilidad" respecto a lo que ha sido HB y debe ped¨ªrseles que se dejen de "medias tintas".
Parte de estos temores se basan en la interpretaci¨®n de que la aparici¨®n en escena de este sector responda a la necesidad de ofrecer una imagen m¨¢s tranquilizadora en lugares como Navarra, tal y como sugiri¨® el dirigente foralista alav¨¦s Pablo Mosquera. En efecto, los cr¨ªticos han resultado "rentables" a HB. En las ¨²ltimas elecciones municipales, personas que se sumieron en el silencio y el alejamiento de la actividad pol¨ªtica durante la vigencia de la ponencia Oldartzen reaparecieron en las listas de EH ofreciendo una imagen de moderaci¨®n y unidad y lograron excelentes resultados.
Mosquera puntualiz¨® que "son los mismos que siempre alzan la voz", vaticin¨® que este peque?o grupo no mover¨¢ "un monolito" y les anim¨® a darse de baja en HB. El dirigente de Unidad Alavesa es de los convencidos de que toda evoluci¨®n es imposible, salvo que ETA decida su propio final.
A su vez, el portavoz de la Ejecutiva del PNV, Joseba Egibar, encontr¨® "positivo" el mero hecho de la reaparici¨®n de las posturas cr¨ªticas en la izquierda abertzale y se remiti¨® al final del proceso Batasuna para extraer conclusiones. Egibar augur¨® que lo que no encontrar¨¢ el ¨¦xito ser¨¢ cualquier opci¨®n que pretenda seguir conjugando la violencia con la pol¨ªtica.
Tampoco el l¨ªder socialista vasco, Nicol¨¢s Redondo Terreros, se atrevi¨® a ir m¨¢s all¨¢ de su deseo de que ganen quienes quieren que "la vida pol¨ªtica se imponga al asesinato", pero consider¨® "importante" que la reflexi¨®n se produzca en el seno de la izquierda abertzale.
Varios apoderados del PNV en ?lava impugnan la reelecci¨®n de su presidente
Varios apoderados (representantes en la asamblea territorial) del PNV alav¨¦s pensaban formalizar entre ayer y hoy sus recursos ante los ¨®rganos internos del partido para requerir su pronunciamiento sobre la validez del proceso que condujo a la reelecci¨®n del actual presidente provincial del partido, el veterano Jos¨¦ Mar¨ªa Guerenabarrena, de 68 a?os. Al malestar por la asamblea del s¨¢bado se suma el generado por la inclusi¨®n en la ejecutiva provincial de Emilio Olabarria, miembro del Consejo General del Poder Judicial, a quien Guerenabarrena viene a nombrar su sucesor en una carta a la militancia y que no ocupar¨¢ su silla hasta que abandone su puesto en el CGPJ.El Euskadi Buru Batzar del PNV trat¨® en su reuni¨®n de ayer el conflicto alav¨¦s, pero no puede intervenir en ¨¦l. Los ¨®rganos competentes para juzgar lo ocurrido y establecer una soluci¨®n son la Comisi¨®n Nacional de Garant¨ªas y Control y el Tribunal Nacional interno, dependiendo de los t¨¦rminos en que se redacten finalmente las impugnaciones, que deberan presentarse en un plazo de cinco d¨ªas. A su vez, el Tribunal Nacional contar¨¢ con una semana para resolver el caso.
El l¨ªder del PNV, Xabier Arzalluz, sugiri¨® hace casi un a?o a Guerenabarrena la conveniencia de pensar en la retirada. ?ste respondi¨® vinculando su marcha con la del propio Arzalluz y se aprest¨® a dar la batalla por su permanencia.
?lava ha sido el ¨²nico territorio en el que han competido dos candidatos, con sus correspondientes planchas de nombres, para la ejecutiva provincial.
En una primera vuelta gan¨® el aspirante alternativo, Manu Allende, y de la segunda ambos salieron empatados. Guerenabarrena, presidente desde hace ocho a?os, con un lapso de dos, se impuso finalmente por tres votos: los de tres representantes que rompieron en el secreto de la votaci¨®n el mandato de sus asambleas.
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