"Hay una manipulaci¨®n de fondo mayor que la pol¨ªtica"
Es conocido sobre todo por el programa de TVE Informe Semanal, donde realiza reportajes como corresponsal en el extranjero y enviado especial en guerras, pero antes hab¨ªa trabajado en el diario Pueblo, desde 1968 hasta su desaparici¨®n. Autor de Misioneros en los infiernos, donde cuenta la vida de los sacerdotes y monjas espa?oles que realizan su labor en pa¨ªses del tercer mundo, y de Pol Pot, el ¨²ltimo verdugo, en el que relata el horror del genocidio en Camboya, publica ahora en Planeta su primera novela: Los placeres de La Habana, una mirada ir¨®nica y divertida sobre el viaje de unos espa?oles a la isla caribe?a en busca de aventuras sexuales que acaban por descubrir la otra realidad de Cuba.Pregunta. ?Por qu¨¦ ha escrito una novela sobre Cuba?
Respuesta. Cuba est¨¢ ah¨ª, ejerce un enorme atractivo sobre los turistas. Es un pa¨ªs que he tenido la gran suerte de conocer bien. Mi intenci¨®n al escribir la novela era divertirme y divertir. Es la historia de unos tipos grises como la de muchos miles de espa?oles que van a Cuba a buscar aventura sexual por unos d¨ªas con la jinetera de sus sue?os. A trav¨¦s de una trama casi polic¨ªaca acaban por conocer la Cuba profunda, m¨¢s all¨¢ de la realidad superficial, que no suelen ver los turistas; aquella que a base de imaginaci¨®n, humor y mucho esfuerzo se inventa cada d¨ªa la forma de conseguir lo que no tiene.
P. ?Cree que hay prepotencia de Europa hacia la isla?
R. En Europa hay prepotencia hacia todos los pa¨ªses pobres. Es una prepotencia econ¨®mica y cultural que se basa en nuestra propia ignorancia y desconocimiento de la cultura ajena. El turista se conforma con conocer poco generalmente, no s¨®lo el espa?ol.
P. La informaci¨®n sobre Cuba, ?se manipula?
R. Se manipula toda la informaci¨®n, porque es siempre fragmentaria y discontinua. Se habla del hambre en Etiop¨ªa hace tres meses y de repente se deja de informar. No se trata de manipulaci¨®n pol¨ªtica, que a veces la hay, sino de la discontinuidad que hace que la informaci¨®n sea mala y fragmentaria. Hay pa¨ªses que para nosotros no existen, donde ocurren cosas, pero hasta que no hay un alto n¨²mero de muertos no se convierte en noticia. Tendemos a ver como manipulaci¨®n la pol¨ªtica, de efectos inmediatos. Pero hay una de fondo, mayor: la que divide al mundo en buenos y malos, en ricos y pobres, sin ir al an¨¢lisis de las causas de la pobreza, que no es otra que la riqueza. En general, la informaci¨®n est¨¢ deshumanizada.
P. ?Cree que el asunto de Eli¨¢n Gonz¨¢lez se ha magnificado?
R. Es una atrocidad y una falta de respeto hacia el ni?o por las dos partes. La disputa pol¨ªtica y el espect¨¢culo medi¨¢tico de fuera y dentro de la isla me parecen una verg¨¹enza y una inmoralidad.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.