Vecinos y ecologistas de Puerto Real se rebelan contra la instalaci¨®n de un parque de combustible
Los vecinos del R¨ªo San Pedro de Puerto Real (C¨¢diz) y Ecologistas en Acci¨®n han constituido una plataforma contra la ubicaci¨®n de un parque de combustible en la d¨¢rsena de la Cabezuela, situada a apenas un kil¨®metro de las viviendas que hay en la zona. La Autoridad Portuaria defiende las bondades econ¨®micas del proyecto y garantiza su seguridad. Los opositores a esta iniciativa, por contra, consideran que existe riesgo de explosi¨®n y de contaminaci¨®n. La Consejer¨ªa de Industria ya ha redactado un informe favorable, aunque falta el s¨ª definitivo de Medio Ambiente.
La situaci¨®n estrat¨¦gica del puerto de C¨¢diz y la inexistencia de un operador dedicado al almacenamiento y a la distribuci¨®n de combustible a los barcos en estas instalaciones han hecho de esta zona un lugar codiciado. Antonio Santoro, un empresario italiano propietario de la compa?¨ªa Istamelsa y vinculado al sector bancario australiano, ha presentado el proyecto de la plataforma a la Autoridad Portuaria, que contar¨ªa con una inversi¨®n de 8.500 millones de pesetas.El parque tendr¨ªa capacidad para almacenar 260.000 toneladas de fuel-oil, gas¨®leo y gasolina. Cada dep¨®sito se vaciar¨ªa y llenar¨ªa cuatro veces al a?o para garantizar la viabilidad del proyecto. Ese mill¨®n de toneladas de combustible supera en mucho las necesidades del puerto gaditano, lo que fuentes conocedoras de la operaci¨®n atribuyen al inter¨¦s del promotor, que tambi¨¦n tiene intereses econ¨®micos en T¨¢nger, de ampliar su actividad a todo el ¨¢rea del Estrecho, donde el movimiento de barcos justificar¨ªa la inversi¨®n y donde hasta ahora s¨®lo est¨¢n presentes las grandes petroleras.
El proyecto de ingenier¨ªa ha sido elaborado por Ecolaire, que ha previsto las m¨¢ximas medidas de seguridad mediante el uso de nuevas tecnolog¨ªas. Los recipientes disponen de cubiertas flotantes que eliminan las emanaciones al conseguir que el gas se licue de nuevo. Entre las medidas dispuestas se establece un sistema que retorna todos los l¨ªquidos exteriores, incluida el agua de lluvia, a la depuradora, lo que evitar¨ªa vertidos contaminantes en la zona, donde se sit¨²a el Parque Natural de la Bah¨ªa de C¨¢diz. La Consejer¨ªa de Industria ya ha emitido un informe favorable, aunque a¨²n falta que el estudio de impacto ambiental salga a informaci¨®n p¨²blica y que Medio Ambiente lo apruebe. Fue este ¨²ltimo departamento el que decidi¨® consultar a todos los colectivos vecinales, a los ecologistas as¨ª a los responsables de la Facultad de Ciencias del Mar y del Instituto Mar¨ªtimo Pesquero.
El origen del problema arranca con el desmantelamiento de los dep¨®sitos de Campsa, situados en zonas urbanas de C¨¢diz, que comenz¨® hace seis a?os. Desde entonces el puerto no dispone de una estaci¨®n de estas caracter¨ªsticas. En la actualidad, Istamelsa dispone de una capacidad en el recinto fiscal de la Zona Franca limitada a 22.000 litros de combustible. La empresa holandesa Van Ommeren ya top¨® con el rechazo vecinal a un proyecto similar hace cinco a?os.
Los vecinos consideran que la barriada del R¨ªo San Pedro, muy pr¨®xima a C¨¢diz, ya soporta bastantes servidumbres: las actividades navales de los astilleros, la emisi¨®n de gases que atribuyen a la General Motors y los olores de la depuradora. "Hay peligros en todas estas empresas, que utilizan acetileno para soldar. El d¨ªa que ocurra una explosi¨®n, que no es dif¨ªcil, tendremos otra por simpat¨ªa que puede ser como la de C¨¢diz de los a?os cuarenta", dijo ayer Emilio Lainez, presidente del colectivo vecinal.
El presidente de la Autoridad Portuaria, Rafael Barra, considera "esencial" esta instalaci¨®n para el puerto de C¨¢diz y garantiz¨® ayer que se han tomado todas las medidas de seguridad posibles y se mostr¨® dispuesto a eliminar del proyecto los dep¨®sitos de gasolina, "que es lo ¨²nico que puede arder, porque esto no es ninguna bomba". Y agreg¨®: "Si queremos progreso, necesitamos combustible".
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