La fiscal¨ªa rusa pone en libertad al magnate de la prensa Gusinski tras acusarle de estafa

Vlad¨ªmir Gusinski fue puesto en libertad condicional anoche, despu¨¦s de que a mediod¨ªa de ayer la fiscal¨ªa rusa presentara una acusaci¨®n formal de "fraude en gran escala" en su contra. Gusinski est¨¢ acusado de estafa en la privatizaci¨®n de una empresa estatal y no podr¨¢ dejar el pa¨ªs sin permiso especial del fiscal que ahora lleva el caso. La liberaci¨®n del magnate de la prensa rusa es interpretada un¨¢nimemente como el resultado de la condena expresada tanto en Rusia como en el extranjero al encarcelamiento de Gusinski y como una victoria de la libertad de expresi¨®n.

El que este influyente empresario haya recobrado su libertad en ning¨²n caso significa que todos sus problemas han concluido, como lo demuestra el hecho de que la Fiscal¨ªa ayer lo acusara oficialmente de estafa. A Gusinski se le acusa de haberse apropiado de bienes por 10 millones de d¨®lares en el curso de la privatizaci¨®n de la firma estatal R¨²sskoye V¨ªdeo, con sede en San Petersburgo. Sin embargo, la mayor¨ªa de los observadores, pol¨ªticos y empresarios considera que se trata de un acto de intimidaci¨®n del Kremlin contra la posici¨®n cr¨ªtica que ha mantenido ¨²ltimamente su grupo Media-Most.La puesta en libertad de Gusinski se produce al d¨ªa siguiente de que el presidente ruso, Vlad¨ªmir Putin, dijera en Berl¨ªn que consideraba "exagerada" la decisi¨®n de encarcelar al magnate, aunque enfatizara que el Fiscal General es independiente y no se somete a su autoridad. Pero en Rusia la palabra del amo del Kremlin sigue teniendo gran peso; por ello, uno de los abogados de Gusinski, P¨¢vel Ast¨¢jov, afirm¨® ayer por la ma?ana que estaba convencido de que la Fiscal¨ªa dejar¨ªa en libertad a su cliente.

La opini¨®n expresada anteayer en Berl¨ªn por Putin fue acompa?ada de los mismos argumentos para desprestigiar a Gusinski que hab¨ªa empleado en Madrid, lo que demuestra que el l¨ªder ruso contin¨²a consider¨¢ndolo un enemigo. El problema es que -como dijo en charlas privadas uno de los periodistas que escribieron el libro En primera persona. Conversaciones con Vlad¨ªmir Putin- el presidente ruso piensa en categor¨ªa de "blanco y negro", e interpreta, como se hac¨ªa en los tiempos sovi¨¦ticos, toda cr¨ªtica como un ataque. La posici¨®n tomada por los medios de comunicaci¨®n de Gusinski ante la guerra de Chechenia ha sido considerada en el Kremlin como una amenaza a la seguridad nacional.

Esto, unido a que los servicios secretos han levantado cabeza con la llegada de Putin al poder y de que el jefe de la administraci¨®n presidencial, Alexandr Voloshin, es enemigo declarado de Gusinski, fueron factores determinantes a la hora de decidir el ataque frontal. Primero fue la espectacular redada contra las oficinas de Media-Most, en la que participaron decenas de agentes del Servicio Federal de Seguridad (SFS, exKGB), enmascarados y armados con metralletas. Y ante el fracaso de esa operaci¨®n, declarada ilegal por el tribunal moscovita al que recurri¨® Media-Most, el Kremlin opt¨® por encarcelar a Gusinski.

Quienes planearon esta acci¨®n probablemente no se imaginaron las consecuencias que tendr¨ªa, aunque eran predecibles. Los empresarios se solidarizaron con el magnate, e incluso gente con quien Gusinski ten¨ªa malas relaciones sali¨® en su defensa. Diecisiete influyentes banqueros y empresarios rusos escribieron una carta abierta a Putin en defensa del oligarca medi¨¢tico, en la que manifestaban tener serias dudas de vivir en un pa¨ªs democr¨¢tico.

Pol¨ªticos de las m¨¢s diversas tendencias consideraron absurda la decisi¨®n de encarcelar a Gusinski antes del juicio, y escritores, actores y cient¨ªficos tambi¨¦n alzaron su voz de protesta. En el extranjero las reacciones fueron parecidas y la visita de Putin a Espa?a y Alemania estuvo ensombrecida por el esc¨¢ndalo desatado por la detenci¨®n de Gusinski.

Nada m¨¢s salir de la c¨¢rcel, Gusinski se dirigi¨® al callej¨®n Bolsh¨®i Palashevski, a las oficinas de Media-Most, donde fue recibido con aplausos y gritos de ?hurra! por los empleados. El magnate se encuentra bien y "est¨¢ animado" y decidido a luchar, manifest¨® Dmitri Ostalski, portavoz de Media-Most.

La causa abierta contra Gusinski, aunque le causar¨¢ algunas molestias, no prosperar¨¢, seg¨²n opinan la mayor¨ªa de los observadores bas¨¢ndose en anteriores casos semejantes. Pero incluso si hubiera juicio y la sentencia fuera adversa para Gusinski, eso no significa que deba volver a la c¨¢rcel, ya que gracias a las condecoraciones estatales que posee tiene derecho a acogerse a la amnist¨ªa aprobada recientemente por la Duma Estatal con ocasi¨®n del 55 aniversario de la victoria sobre el nazismo en la IIGuerra Mundial.

Queda por ver si el Kremlin abandonar¨¢ los intentos de acallar a la prensa cr¨ªtica y si reincidir¨¢ en los errores cometidos, que por el momento s¨®lo han conseguido socavar el prestigio y la popularidad de Putin. Pero no hay que descartar que el presidente, al ver estos efectos negativos, aproveche para desembarazarse de algunas personas odiosas, como el jefe de su administraci¨®n.