El veneno surge en las aguas subterr¨¢neas de zonas pir¨ªticas

El fen¨®meno del ars¨¦nico no es un caso ligado exclusivamente al acu¨ªfero de Madrid. Est¨¢ presente en dosis alt¨ªsimas en las aguas superficiales del ¨¢rea pir¨ªtico-minera de Huelva, donde la Confederaci¨®n del Guadiana ha detectado este a?o 3.100 microgramos por litro en el Odiel, a la altura del puente romano de Niebla. "Aqu¨ª todo el mundo sabe de qu¨¦ color baja el agua. A nadie se le ocurre usarla ni para regar", afirma Domingo Fern¨¢ndez, jefe de Calidad de Aguas. Tambi¨¦n aparece en dosis t¨®xicas en alguna fuente de abastecimiento del campo salmantino, seg¨²n datos facilitados por el profesor J. M. Cachaza.En todos estos casos coinciden formaciones geol¨®gicas detr¨ªticas, asegura el catedr¨¢tico de Geodin¨¢mica e Hidrogeolog¨ªa de Madrid, Fernando L¨®pez-Vera. Junto a Jos¨¦ Luis Fern¨¢ndez Turiel, del Instituto Jaume Almera de Barcelona, culminaban una investigaci¨®n sobre t¨¦cnicas para identificar la actividad humana en el acu¨ªfero madrile?o, cuando se detect¨® ars¨¦nico en los pozos.

Bombas sumergibles

L¨®pez-Vera asoci¨® el hecho con la geol¨®gica y los cambios fisicoqu¨ªmicos del acu¨ªfero por la intensa explotaci¨®n de sus aguas. "Durante la d¨¦cada de los sesenta y setenta, los a?os de la revoluci¨®n verde, se produjo el boom de las aguas subterr¨¢neas debido al dr¨¢stico abaratamiento de las bombas sumergibles a grandes profundidades", recuerda. "En los acu¨ªferos detr¨ªticos como el de Madrid, el agua descansa entre las arenas desprendidas de la sierra que contienen sulfuros de ars¨¦nico en un ambiente reductor, durmiente. En cuanto les da el aire porque las intensas extracciones de agua hacen bajar el nivel fre¨¢tico, se oxidan y se transforman en solubles. El ars¨¦nico antes inerte aparece como veneno si es en elevadas dosis".

Aguas de estas caracter¨ªsticas existen en los Andes, Estados Unidos, India, Hundr¨ªa, China, Taiwan, Filipinas, Nueva Zelanda, Mongolia y Bangladesh: en este pa¨ªs se desat¨® en 1993 una epidemia de c¨¢ncer por la ingesti¨®n continuada de elevadas dosis de ars¨¦nico en un colectivo de m¨¢s de 1,2 millones de personas.

"Antes de descubrirse la contaminaci¨®n de Bangladesh, ya se ven¨ªa estudiando el problema. En el caso de Madrid hay algo positivo. Los sistemas de control de calidad han funcionado", a?ade L¨®pez-Vera.

No est¨¢n tan tranquilos los responsables del madrile?o Canal de Isabel II, que han identificado pozos con dosis de m¨¢s de 34 y 51 microgramos en Batres, Villamantilla, M¨®stoles y Fuencarral. El Canal mezcla sus aguas y elimina el peligro, pero cuando entre en vigor la dosis m¨¢xima de 10 microgramos, seg¨²n establece la Directiva de 1998, reconoce que se ver¨¢n obligados a tomar medidas m¨¢s dr¨¢sticas y costosas.