La urna inteligente

El consejero de Interior, Javier Balza, deposit¨® su papeleta a favor del Athletic y el titular de Industria, Josu Jon Imaz, dirigi¨® su voto a la Real Sociedad. Gan¨® el club de f¨²tbol bilba¨ªno, como era de esperar, porque el simulacro de consulta electoral se celebr¨® en la capital vizca¨ªna. Los dos miembros del Gobierno vasco fueron los elegidos para inaugurar un novedoso sistema de voto electr¨®nico denominado Demotek. Ha sido desarrollado por un grupo de cuatro empresas vascas, con una inversi¨®n de m¨¢s de 300 millones de pesetas [el Ejecutivo ha subvencionado el 50%] y 20.000 horas de trabajo, y se present¨® ayer en el Palacio Euskalduna.Los dos consejeros expresaron su entusiasmo por el invento tecnol¨®gico y, seg¨²n lo demostrado, parece que su actitud est¨¢ justificada. Tradici¨®n y progreso, sencillez y agilidad, rapidez en el escrutinio y reducci¨®n en los costos del proceso. Todo ventajas. As¨ª lo vendi¨® ?ngel Iglesias, directivo de Ikusi, que junto a Iberm¨¢tica, Hunolt y Euskaltel forman el consorcio de empresas promotor del producto. Pero, adem¨¢s de discurso de empresario que busca hacer negocio, como el propio Iglesias reconoci¨® abiertamente, hubo una votaci¨®n para despejar dudas, aunque fuera sobre equipos de f¨²tbol.

Las papeletas que utiliza el sistema son similares a las tradicionales; s¨®lo les diferencia una franja en la parte inferior, impresa con tintas especiales, que permite el recuento electr¨®nico, y un adhesivo en la superior, que posibilita plegar y cerrar la papeleta como un sobre, pero prescindiendo de ¨¦ste. La banda tambi¨¦n facilita la lectura y comprobaci¨®n del voto al elector al aplicarle una luz ultravioleta.

Una vez que los consejeros Balza e Imaz eligieron sus respectivas listas a favor del Athletic y de la Real, entre las seis opciones disponibles, se dirigieron a la urna. Aparentemente, es como una tradicional, pero que se le ha incorporado una m¨¢quina electr¨®nica que al concluir la votaci¨®n permite el escrutinio inmediato y la transmisi¨®n r¨¢pida de los resultados. Cada voto introducido deja ver el n¨²mero que hace en el total de los depositados. As¨ª, cuando el responsable de Interior meti¨® entre fogonazos de flases su voto, marc¨® un "1". Intent¨® volver a votar para las c¨¢maras, pero ni la simulaci¨®n impidi¨® al presidente de la mesa virtual, Alejando Cuesta, espetarle: "S¨®lo se puede votar una vez". Con anterioridad, Cuesta comprob¨® que la seguridad en la urna era total. Introdujo una tarjeta de color verde para "personalizar" la mesa. Una vez que m¨¢s de una treintena de votantes voluntatarios depositara su opci¨®n futbol¨ªstica, el presidente procedi¨® a cerrar la urna con otra tarjeta, en esta ocasi¨®n roja. "Conforme cierre" y "votaci¨®n cerrada" eran algunas de las indicaciones que iba mostrando la m¨¢quina. En menos de un minuto, se supo que el Athletic hab¨ªa obtenido 29 votos y el Real Madrid, 0. Despu¨¦s, el sistema sigui¨® el procedimiento fijado para transmitir los datos a la oficina central, hasta terminar apagando la urna. "En una situaci¨®n real, como mucho, se tardar¨ªa media hora", asegur¨® ?ngel Iglesias, quien presumi¨® de que el sistema saca el m¨¢ximo rendimiento con el m¨ªnimo esfuerzo. "El Pa¨ªs Vasco se une al selecto grupo de pa¨ªses que incorpora en sus procesos electorales la tecnolog¨ªa electr¨®nica. No hay nada igual. Y, respecto a otros sistemas de voto electr¨®nico, ninguno le aventaja en la velocidad del escrutinio", resalt¨® Iglesias. Por si fuera insuficiente, el sistema permite el voto manual si la fatalidad lo estropea.

Tampoco parece que los votantes tengan dificultades en utilizar el sistema. Es sencillo y no presenta ruptura de h¨¢bitos respecto al tradicional. Y es menos caro, ya que evita la fabricaci¨®n de millones de sobres de votaci¨®n y el complejo y pesado sistema de recogida de resultados en mesas, as¨ª como el montaje de los centros inform¨¢ticos para recepci¨®n y tratamiento de la informaci¨®n.

Cada urna electr¨®nica cuesta unas 300.000 pesetas, lo que supondr¨ªa una inversi¨®n de 1.200 millones de pesetas en el caso de que se ponga en marcha en la comunidad vasca, que se amortizar¨ªan en dos consultas y supondr¨ªa un ahorro de 200 millones de pesetas, fundamentalmente en sobres y traslado de informaci¨®n. Representantes de 14 de las 17 comunidades aut¨®nomas, entre otros, asistieron a la presentaci¨®n. Pero su carrera s¨®lo ha empezado. En los pr¨®ximos d¨ªas se exhibir¨¢ en la feria de Hannover y en Chicago.