Mandela se enfrenta al Gobierno surafricano y pide que trate a las embarazadas con sida
El ex mandatario cierra la XIII Conferencia Internacional del Sida en Durban
Nelson Mandela cerr¨® ayer la XIII Conferencia Internacional del Sida con vibrantes palabras que hablaron de esperanza y de muerte y, pese a su tradicional car¨¢cter conciliador, defendi¨® la imperiosa necesidad de intervenir para evitar la transmisi¨®n materno-infantil de la enfermedad. El Gobierno surafricano se niega actualmente a tratar con medicamentos antirretrovirales a las mujeres embarazadas con sida, lo que evitar¨ªa en parte que sigan naciendo cada a?o m¨¢s de 100.000 ni?os infectados en este pa¨ªs. "La historia nos juzgar¨¢ con dureza", advirti¨® Mandela.
La intervenci¨®n de Nelson Mandela, primer presidente de la rep¨²blica surafricana tras el r¨¦gimen de apartheid, en la XIII Conferencia Internacional del Sida, que termin¨® ayer en Durban, fue una fiesta para los asistentes, que le aclamaron con danzas, gritos, aplausos y canciones. Y que recibieron como un soplo de aire fresco sus palabras respecto al debate que hay en este pa¨ªs sobre el acceso a los medicamentos antisida. "La experiencia en otros pa¨ªses ha demostrado que introducir medidas para reducir la transmisi¨®n materno-infantil ha resultado esencial para la lucha contra el sida", expres¨® con sencillez para mediar en el agrio debate abierto en este pa¨ªs por el actual presidente, Thabo Mbeki. Sin embargo, Nelson Mandela dijo confiar en Mbeki y su capacidad para afrontar esta calamidad que "est¨¢ saboteando el futuro de este continente".
Mbeki ha reunido a un grupo de cient¨ªficos y ha anunciado que s¨®lo despu¨¦s de sus conclusiones tomar¨¢ una soluci¨®n respecto a los tratamientos antirretrovirales. En ese grupo hay cient¨ªficos que aseguran que la causa del sida no es el VIH (virus de inmunodeficiencia humana), tesis que, como apuntan los activistas, se utiliza para seguir negando los medicamentos incluso a las embarazadas. "Mi experiencia me dice que en un debate se llega siempre a un punto intermedio", dijo Mandela. "Mbeki es un hombre inteligente que asume los planteamientos cient¨ªficos seriamente y lidera un Gobierno que s¨¦ que est¨¢ comprometido con los principios de la ciencia y la raz¨®n".
"Hay que superar todas las divergencias para salvar a nuestro pueblo", subray¨® Mandela. "La historia nos juzgar¨¢ con dureza si no lo hacemos inmediatamente. Es una tragedia sin precendentes en ?frica, donde est¨¢ costando m¨¢s vidas que todas las guerras juntas de este siglo, que todas las hambrunas y las epidemias, que est¨¢ agotando los servicios sanitarios y va a tener un tremendo impacto en las empresas, donde se sufren bajas sin precedentes. La mitad de nuestra gente joven morir¨¢ de sida. Los recursos deben desviarse hacia la lucha contra el VIH".
El flagelo de la juventud
De la urgencia de emprender tales pol¨ªticas hablan por s¨ª solas las cifras de este pa¨ªs. Los datos, que no siempre coinciden, se?alan que casi 600.000 ni?os y j¨®venes surafricanos quedaron infectados s¨®lo el a?o pasado. De ellos, m¨¢s de 100.000 han nacido ya con el virus, recibido directamente de sus madres, que no son tratadas con zidovudina o con nevirapina, dos medicamentos antirretrovirales de eficacia comprobada para evitar la transmisi¨®n durante el embarazo o el parto. En esta conferencia se ha insistido especialmente en la nevirapina una vez que se descubriesen el a?o pasado sus propiedades preventivas y, sobre todo, porque es sencilla de administrar y muy barata. Seg¨²n un estudio que maneja el Ministerio de Sanidad de este pa¨ªs, costar¨ªa unas 500 pesetas por madre y ni?o. Quinientas pesetas por una vida salvada.
La zidovudina, que es la que mayoritariamente se utiliza en Espa?a, donde pr¨¢cticamente ha desaparecido esta v¨ªa de contagio vertical, cuesta diez veces m¨¢s. Pa¨ªses m¨¢s pobres que Sur¨¢frica, como Uganda y Senegal, ya est¨¢n utilizando estos sistemas. Pero en Sur¨¢frica, uno de los tres pa¨ªses m¨¢s ricos de ?frica junto a Egipto y Nigeria, el dinero p¨²blico tampoco llega ni para estos medicamentos ni para otros de necesidad b¨¢sica, como ha querido hacer notar en esta conferencia la organizaci¨®n M¨¦dicos Sin Fronteras.
El presupuesto sanitario p¨²blico de Sur¨¢frica es para este a?o de unos 800.000 millones de pesetas, lo que representa s¨®lo la quinta parte del presupuesto espa?ol, aunque nuestro pa¨ªs tenga tres millones menos de habitantes. Es una cifra, en fin, muy inferior a s¨®lo la factura farmac¨¦utica p¨²blica espa?ola, que supera ya el bill¨®n de pesetas.
La realidad presupuestaria y la dimensi¨®n que ha tomado el sida es un flagelo para Sur¨¢frica, l¨ªder en t¨¦rminos absolutos de afectados (4, 2 millones de infectados). Como indic¨® Mandela, la mortalidad infantil se va a duplicar en pocos a?os. El virus castiga a los m¨¢s j¨®venes y, sobre todo, a las adolescentes. Una de cada cinco est¨¢ infectada. 120.000 surafricanos mueren por el sida cada a?o.
'Soluci¨®n africana'
Nelson Mandela pidi¨® finalmente una "soluci¨®n africana para ganar esta guerra" porque el 70% de los afectados por la epidemia viven y mueren en este continente. Y asegur¨® que un Gobierno no puede por s¨ª solo afrontar el problema, por lo que llam¨® a la colaboraci¨®n, a la intervenci¨®n social en contra de un virus que s¨®lo el a?o pasado seg¨® la vida de 2,8 millones de personas en todo el mundo.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.