Miembros del guerrismo lamentan no estar en la ejecutiva

La ausencia de Rosa D¨ªez

El esp¨ªritu de grupo que anima tradicionalmente al sector guerrista y el respeto a sus principales dirigentes dificult¨® ayer la reconstrucci¨®n de los hechos que llevaron a los guerristas a rechazar los puestos que les ofrecieron en la ejecutiva, al tiempo que ofrec¨ªan "lealtad" al nuevo secretario general. Por primera vez, no obstante, se apreci¨® en numerosos guerristas contrariedad por la decisi¨®n de no entrar en la ejecutiva tomada por el presidente extreme?o, Juan Carlos Rodr¨ªguez Ibarra, al rechazar su entrada y la de otra persona de la federaci¨®n extreme?a. El entorno de Zapatero asegur¨® que la oferta al guerrismo se completaba con un dirigente de Asturias y otro de Madrid, siempre como vocales. Los asturianos rechazaron la oferta y la candidata Matilde Fern¨¢ndez tambi¨¦n lo hizo. Esta ¨²ltima, sin embargo, entreg¨® la lista de los ocho compa?eros de su sector para el comit¨¦ federal, lo que no tuvo problema alguno.Pero la desaz¨®n en el guerrismo empez¨® el d¨ªa anterior, cuando un bloque importante desvi¨® su voto hacia Rodr¨ªguez Zapatero, desairando a su propia candidata. Si hubo pacto, como se denunciaba desde el sector que apoy¨® a Jos¨¦ Bono y se desment¨ªa por todos los dirigentes gerristas, desde luego se hizo a espaldas de Matilde Fern¨¢ndez, ostensiblemente dolida por la actitud de muchos de sus compa?eros.

Con pacto o sin ¨¦l, lo cierto es que los guerristas se han quedado fuera de la direcci¨®n, lo que ayer provoc¨® la desolaci¨®n de los m¨¢s veteranos. La mayor¨ªa de ellos votaron a la ejecutiva, tal y como manifestaron a este peri¨®dico guerristas de Madrid, Castilla y Le¨®n y Andaluc¨ªa. Despu¨¦s de escuchar el discurso de Rodr¨ªguez Zapatero la consternaci¨®n fue mayor. "?Por qu¨¦ no estamos en esa ejecutiva que ha despertado la ilusi¨®n del partido?", se preguntaban en alto miembros de este sector.

Su argumento es el de que muchos guerristas est¨¢n ya cansados de "estar fuera de todo" y en esta ocasi¨®n merec¨ªa la pena integrarse. A pocos metros de estos interlocutores contrariados Matilde Fern¨¢ndez y Francisco Fern¨¢ndez Marug¨¢n manifestaban su agrado por el "comienzo de una nueva etapa en el PSOE". No s¨®lo hab¨ªa pesares en el sector guerrista. El equipo de Rodr¨ªguez Zapatero reconoc¨ªa cierta amargura por no haber trabajado por integrar a personas de la candidatura de Rosa D¨ªez, una vez que ella, personalmente y para s¨ª, no quer¨ªa nada. La dificultad que, al parecer, han tenido D¨ªez y Zapatero para comunicarse durante la campa?a se ha repetido. No consiguieron encontrarse telef¨®nicamente hasta ayer por la ma?ana, cuando la ejecutiva estaba ya terminada. El entorno de Zapatero lament¨®, y se culp¨®, de no haber hecho el esfuerzo de buscar y convencer a Luis Atienza, ex ministro de Agricultura y jefe de campa?a de D¨ªez, para que formara parte de la direcci¨®n.