El Consell anuncia su postura sobre la fusi¨®n de Bancaixa y la CAM

El Consell har¨¢ p¨²blica hoy, por boca de su consejero de Econom¨ªa, Vicente Rambla, su apuesta por la fusi¨®n de las dos grandes cajas de ahorro valencianas, una operaci¨®n que, seg¨²n apuntan todos los indicios, se iniciar¨¢ en oto?o. Est¨¢ pendiente el respaldo formal de los consejos de administraci¨®n de estas entidades financieras a la operaci¨®n y las negociaciones entre los partidos pol¨ªticos hasta alcanzar el acuerdo de dos tercios de las respectivas asambleas. La gran inc¨®gnita es el futuro de las cajas de Ontinyent y Carlet.

La creaci¨®n de una gran caja de ahorros ha estado en boca de todos los gobiernos de la Generalitat desde hace una d¨¦cada.Los primeros en intentarlo fueron los socialistas cuando ocuparon el Gobierno de la Generalitat. No fue posible o no convino entonces. Tambi¨¦n el PP convirti¨® esta operaci¨®n en un objetivo tras su victoria electoral en 1995, pero consumi¨® la primera legislatura en reformar una ley de cajas que le diera la mayor¨ªa en los ¨®rganos de gobierno. ?sta parece entonces la legislatura de la fusi¨®n, una operaci¨®n para la cual el PP necesita el concurso de los socialistas dado que los populares carecen de los dos tercios de votos necesarios para aprobar la operaci¨®n en solitario a pesar de su mayor¨ªa absoluta en el Parlamento auton¨®mico. El presidente de la Generalitat, Eduardo Zaplana, dio hace unas semanas el pistoletazo de salida a la operaci¨®n, al anunciar que su Gobierno tomar¨ªa partido antes de las vacaciones de agosto. Hoy, el gestor econ¨®mico del Consell, Vicente Rambla, expondr¨¢ su parecer.

La operaci¨®n se inici¨® dos meses atr¨¢s, cuando Rambla encarg¨® a las dos cajas un avance sobre sus respectivos estudios de fusi¨®n. La entrega de esta informaci¨®n al Gobierno, hace unos d¨ªas, revel¨® las diferencias entre los dos estudios. Los dos parten de parecidos an¨¢lisis: la reducci¨®n de los m¨¢rgenes de intermediaci¨®n en los pr¨®ximos cinco a?os y la necesidad de ganar en tama?o para rebajar los costes y ser m¨¢s competitivos. Mientras el estudio de la CAM, encargado a la consultora Boston Consulting, apostaba por alcanzar este objetivo mediante alianzas con otras entidades de cr¨¦dito espa?olas o con la compra de bancos; Bancaixa, con un informe de Arthur Andersen, se pronunciaba inequ¨ªvocamente por la fusi¨®n.

Los c¨¢lculos de uno y otro estudio arrojaban grandes diferencias. La caja alicantina eval¨²a un excedente de 1.400 empleos y 190 sucursales, lo que elevar¨ªa el coste de la fusi¨®n a 400.000 millones de pesetas. Bancaixa rebaja a 1.000 los empleos afectados, a 150 las sucursales excedentes y a 100.000 millones de pesetas el coste de la operaci¨®n.

Fuentes oficiales atribuyeron entonces esta disparidad de c¨¢lculos a la radicalizaci¨®n de posturas de las dos cajas. Alicante recela de la fusi¨®n con la caja valenciana al considerarla una amenaza a su identidad y a la autonom¨ªa de los equipos directivos. Valencia est¨¢, por el contrario, dispuesta a una fusi¨®n sin m¨¢s dilaciones.

La filtraci¨®n a los medios de comunicaci¨®n de algunos detalles de estos contactos ocasion¨® un aut¨¦ntico revuelo en el mundo pol¨ªtico, sindical y financiero. En Alicante, la mayor¨ªa de sindicatos de la CAM, as¨ª como dirigentes del PSPV, se pronunciaron contra la operaci¨®n y acusaron al presidente de la Generalitat de "mangonear" en las cajas. Fuentes de la Generalitat responsabilizaron, aunque sin citarlo, de la indiscreci¨®n al director general de la CAM, Juan Antonio Gisbert, quien reclama para Alicante la sede social y exige el liderazgo directivo en la fusi¨®n. En la sede de Bancaixa se guarda silencio.

Con la fusi¨®n de Bancaixa y la CAM, que ocupan el cuarto y quinto puesto en el r¨¢nking espa?ol, la entidad resultante ser¨ªa la tercera del pa¨ªs.