LA SITUACI?N POL?TICA VASCA La maleta. PABLO A. MOSQUERA MATA

Considera el autor que los partidos deben recuperar un m¨ªnimo com¨²n de coincidencias ¨¦ticas para evitar una fractura irreversible en la sociedad vasca.

?Se acuerdan ustedes de la pol¨¦mica que se desat¨® en la campa?a electoral de 1998? No era original. Unidad Alavesa en la campa?a del 94 tuvo un cartel que rezaba: "Para que ning¨²n alav¨¦s tenga que hacer la maleta". Pues bien, si ustedes sacan las mismas conclusiones que yo, de la encuesta sociol¨®gica de la Universidad del Pa¨ªs Vasco (UPV), afirmar¨¢n que en Euskadi hay cada vez m¨¢s gentes dispuestas con su maleta a marcharse a cualquier lugar donde haya normalidad, entendiendo por tal, lo de siempre. Paz, trabajo y salud.?Menudo fracaso! Una comunidad tan rica, tan convencida de su ser para decidir, tan orgullosa de sus derechos hist¨®ricos, resulta que vive inmersa en una situaci¨®n irrespirable para cada vez m¨¢s ciudadanos.

Uno se pregunta, ?y para qu¨¦ sirve la autonom¨ªa cuando los sujetos de la misma quieren exilarse o huir del pa¨ªs?

Desgraciadamente hay tres hechos que se van consolidando: el pesimismo ante el futuro que hace opinar que cualquier tiempo pasado fue mejor; el distanciamiento entre poderes p¨²blicos y realidad social y el temor al enfrentamiento entre las dos Euskadis, cada vez m¨¢s conformadas, incluso en las encuestas de intenci¨®n de voto.

Esto ¨²ltimo deber¨ªa llevar a que alguien con responsabilidad alertara sobre algo que vengo diciendo en p¨²blico y en privado.Las elecciones son un instrumento de la democracia, pero no la democracia. Sin democracia o con graves d¨¦ficits, las elecciones solo sirven para reafirmar a los bandos en las trincheras.

Por estas razones, antes de lanzarse a una campa?a electoral con maletas y quien sabe si con algo peor, deber¨ªamos reconstruir los pilares de la democracia y asentar el papel del Estado de Derecho y sus instituciones. De lo contrario, el panorama puede ser peor:

- Enfrentamiento entre dos Euskadis enrocadas, encorajinadas y lejos de cualquier prop¨®sito de enmienda.

- ETA en el medio, haciendo juegos macabros con sus atentados, en busca del peor escenario posible, para tener protagonismo y ser referencia en un hipot¨¦tico proceso de negociaci¨®n.

- Las gentes, cada vez m¨¢s asustadas y desesperadas, al comprobar que no se puede frenar la espiral de la violencia.

No quiero ser p¨¢jaro de mal ag¨¹ero, pero podemos estar en la antesala de la esquizofrenia total. Quiz¨¢ por esta raz¨®n los m¨¢s j¨®venes, que son siempre los m¨¢s osados y avanzados, opinan que si se les ofrece alternativas en otro lugar, se marchan...

Tuvimos el pacto de Ajuria Enea y hoy no s¨®lo no hemos avanzado en la pacificaci¨®n y normalizaci¨®n, sino que a?oramos aquellos tiempos del consenso en lo fundamental.

No estoy afirmando que tengamos que repetir mim¨¦ticamente Ajuria Enea. Estoy exigiendo que construyamos un escenario para evitar el enfrentamiento y la crispaci¨®n. Estoy pidiendo que volvamos al m¨ªnimo com¨²n de coincidencias ¨¦ticas para evitar la fractura irreversible, con o sin elecciones anticipadas. Trato de advertir, desde mi experiencia personal de diez a?os en la Mesa de Ajuria Enea, que o nos ponemos a trabajar urgentemente con el mismo sentido o ETA jugar¨¢ con nuestros destinos a la ruleta rusa.

Pablo A. Mosquera Mata es secretario general de Unidad Alavesa.