Londres exige a Serbia la liberaci¨®n de los detenidos en Montenegro

El Gobierno del Reino Unido considera "inaceptable" que la televisi¨®n yugoslava haya mostrado sin pruebas de delito a los dos ciudadanos brit¨¢nicos detenidos el jueves en Montenegro. "Estamos en contacto con Naciones Unidas y la Organizaci¨®n para la Seguridad y Cooperaci¨®n en Europa [OSCE, a la que pertenecen estos dos brit¨¢nicos detenidos] para exigir m¨¢s informaci¨®n sobre su situaci¨®n", dijo ayer un portavoz del Foreign Office. El Reino Unido exige al r¨¦gimen de Slobodan Milosevic su puesta en libertad inmediata.

Las autoridades de Yugoslavia dieron ayer consentimiento para que diplom¨¢ticos del Reino Unido puedan visitar a los dos brit¨¢nicos detenidos. Desde Nueva York, el secretario general de la ONU, Kofi Annan, pidi¨® la liberaci¨®n de los dos brit¨¢nicos. Canad¨¢, por su parte, ha ordenado a su encargado de negocios de la Embajada en Belgrado que trate de entrevistarse con los dos canadienses detenidos en la misma operaci¨®n llevada a cabo el jueves en Montenegro. Mientras que el Ej¨¦rcito yugoslavo insiste en que los dos brit¨¢nicos (polic¨ªas destinados en Kosovo con la misi¨®n de formar a los futuros agentes kosovares) y los dos canadienses son especialistas en misiones de sabotaje, el director de proyectos de Meridian Resources, una empresa que trabaja en Kosovo, Genti Jacellari, admiti¨® ayer que uno de los canadienses detenidos, Shaun Going, es un ingeniero de minas experto en la voladura de canteras.

Las versiones de la OSCE y de Jacellari coinciden: Going y su sobrino Liam Hall, que se encontraba de turismo, decidieron pasar unos d¨ªas de vacaciones en Montenegro junto a los agentes brit¨¢nicos Adrian Michael Prangnell y John Yore, compa?eros de jogging de Going. Todo el grupo iba desarmado y no ten¨ªa misi¨®n alguna que cumplir en esta rep¨²blica yugoslava.

Sin embargo, el propio Jacellari reconoci¨® ayer la posibilidad de un malentendido. "Es posible que en su veh¨ªculo hubiera algunos accesorios relacionados con la profesi¨®n de Going, pues el pasado viernes estuvo participando en la voladura en unas canteras en Kosovo (...) Todos esos materiales y accesorios nada tienen que ver con terrorismo porque son muy primitivos". Meridian Resources lleva operando en los Balcanes desde 1992 y dispone en estos momentos de 30 empleados en Kosovo.

A pesar del desmentido de la OSCE, de que los dos brit¨¢nicos de esta organizaci¨®n fueran polic¨ªas especiales (esp¨ªas) con la misi¨®n de entrenar a la polic¨ªa especial montenegrina en actos de sabotaje y terrorismo, el Gobierno de Belgrado mantiene su tesis.

La captura el jueves de estos cuatro occidentales, unida a la del lunes de cuatro holandeses a quienes se acusa de preparar un atentado o un secuestro del presidente yugolsavo, Slobodan Milosevic, le permite al l¨ªder serbio disponer de una carta propagand¨ªstica inmejorable ante las elecciones presidenciales del 24 de septiembre. Estos ocho detenidos ya han sido mostrados por los medios de comunicaci¨®n al servicio del r¨¦gimen, que les presenta como la encarnaci¨®n de lo que se ven¨ªa anunciando desde hace meses. La propaganda ha estado machacando de forma sistem¨¢tica con todo tipo de conspiraciones occidentales destinadas a desestabilizar el pa¨ªs. El mensaje ha calado en una poblaci¨®n a¨²n traumatizada por los bombardeos.

Campa?a electoral

Seg¨²n los analistas, estos dos brit¨¢nicos y canadienses tienen, adem¨¢s, un valor a?adido: sirven para vincular a Montenegro en esa vasta conspiraci¨®n y comenzar a preparar a la ciudadan¨ªa para un posible conflicto con la otra rep¨²blica que a¨²n forma Yugoslavia."Nuestros oponentes no se encuentran en la oposici¨®n a nuestro partido; ellos est¨¢n en la oposici¨®n al pueblo y al Estado", advirti¨® Gorica Gajevic, el secretario general del Partido Socialista de Serbia, el de Milosevic, en un mitin en Kikinda, al noreste. "Ellos no defendieron el pa¨ªs para sabotear la reconstrucci¨®n y justificar los cr¨ªmenes de la OTAN. Su programa pol¨ªtico es un ultim¨¢tum de aquellos que nos bombardearon traducido a la lengua serbia".

Ese mensaje belicoso respecto al presidente de Montenegro, Milo Djukanovic, considerado un aliado occidental, es parte de una escenograf¨ªa que se repite desde la guerra de Bosnia: el r¨¦gimen captura observadores, periodistas o miembros de ONG y les muestra en la televisi¨®n oficial reconvertidos en peligrosos esp¨ªas. Alguno de ellos, incluso, acepta hablar libremente ante esas c¨¢maras. Es el caso de uno de los holandeses detenidos el lunes. Ayer dijo que se encontraba muy impresionado por la reconstrucci¨®n llevada a cabo en Serbia. Ese proyecto de reconstrucci¨®n de puentes y centrales el¨¦ctricas bombardeados es el favorito de Milosevic y su gran estandarte electoral.

A estas elecciones presidenciales podr¨¢n acudir observadores extranjeros, seg¨²n se aprob¨® ayer en Belgrado, pero quedan descartados todos aquellos que procedan de pa¨ªses participantes en el bombardeo de Yugoslavia. La medida incluye a Espa?a.

Por otra parte, en el Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia, el general serbio Radislav Krstic, el jefe militar serbio de m¨¢s alto rango en prisi¨®n, acus¨® a su antiguo jefe, el general Ratko Mladic, de ser el verdadero responsable de las matanzas de Srebrenica en julio de 1995.