La CEAR cuestiona que los inmigrantes que saltaron al mar en Pasaia viajaran en el barco como polizones

El Unity XI, con bandera de Saint Vicent y Granadines, fue fletado a casco desnudo -sin tripulaci¨®n- a la empresa ucraniana Boris Kaluginkb International Sheeping. Parti¨® de Casablanca (Marruecos) cargado con 1.200 kilos de chatarra con 13 tripulantes -cuatro ucranianos, un ruso y ocho marroqu¨ªes-. En su interior viajaban los inmigrantes. Se desconoce lo que sucedi¨® en el barco cuando navegaban por el litoral vasco a una milla de Pasaia. Ellos afirman que se produjo una pelea con los marineros en la que se esgrimieron armas y se vieron obligados a saltar al mar. Nadie se atreve a avanzar m¨¢s datos hasta conocer la declaraci¨®n oficial de los tripulantes. Sin embargo, fuentes policiales y responsables de la ayuda humanitaria llaman la atenci¨®n sobre la forma irregular en la que se produjo la huida del carguero. "No es l¨®gico que salten de esa forma masiva y a plena luz del d¨ªa", dicen. Los testimonios de los pescadores que auxiliaron a los indocumentados ratifican que estaban atemorizados y que algo tuvo que pasar en la cubierta del carguero.

La Comisi¨®n Espa?ola de de Ayuda al Refugiado (CEAR) cuestion¨® que se hable de polizones. "No puede entenderse que se califique con este t¨¦rmino a 46 personas que se comportan de tan extra?a manera antes de entrar en un puerto", observaron. Tampoco encuentran explicaci¨®n para otras preguntas. "No es l¨®gico que si fueran polizones el capit¨¢n los dejara darse a la fuga. Ese comportamiento est¨¢ penalizado con una multa de 30 millones de pesetas por cada uno. M¨¢s que de polizones tendr¨ªamos que hablar de otra cosa". La empresa consignataria de Pasaia, C¨¢mara, se ha desentendido del barco por las presuntas irregularidades.

Los ocho marineros marroqu¨ªes permanecieron todo el d¨ªa retenidos en el interior del Unity XI. No fue interrogada para averiguar si ha existido o no un delito de tr¨¢fico de inmigrantes y si lo hubo, de qu¨¦ manera se produjo. S¨®lo queda claro que los inkigrantes partieron convencidos de que iban a desembarcar en el sur de Espa?a.