La Comunidad anuncia sanciones por el vertido de 60.000 litros de gas¨®leo

El consejero de Medio Ambiente, Pedro Calvo Poch (PP), asegur¨® ayer que no quedar¨¢ impune el vertido de 60.000 litros de gas¨®leo a la red de alcantarillado ocurrido el s¨¢bado en un centro de Renfe, ubicado en el distrito de Fuencarral. Calvo se?al¨® que este incidente "tiene un culpable, y este culpable pagar¨¢". Adem¨¢s de sufragar los gastos que ha acarreado el control del vertido, el culpable del delito ecol¨®gico har¨¢ frente a una multa a¨²n por determinar.El consejero no quiso todav¨ªa se?alar qui¨¦n es el responsable: "Es Renfe o Repsol, o los dos. Es algo que a¨²n se est¨¢ dilucidando porque las causas del accidente todav¨ªa no est¨¢n claras. Lo estar¨¢n a lo largo de esta semana".

Los t¨¦cnicos de la Comunidad interrogan a los operarios de Renfe y de Repsol que se hallaban presentes cuando ocurri¨® el vertido. Estos empleados intentaban abastacer de gas¨®leo a los dep¨®sitos del Centro de Mantenimiento Integral de Renfe, en Fuencarral. El combustible, en principio, iba a ser destinado a servir de combustible para las locomotoras. Pero algo fall¨® y los 60.000 litros acabaron en la alcantarilla. Mientras un cami¨®n cisterna repostaba los dep¨®sitos de Renfe, un operario se olvid¨® de abrir la v¨¢lvula de presi¨®n que da paso libre a los tanques. Esto provoc¨® que el l¨ªquido se almacenara en una zona indebida. El gas¨®leo presion¨® la v¨¢lvula de retorno, que estall¨®. Y los 60.000 litros de gas¨®leo se derramaron por las canaletas de Renfe, desde donde pasaron al alcantarillado.

Del resultado de las investigaciones depender¨¢ la cuant¨ªa de la multa. "No me atrevo a decir cu¨¢nto dinero ser¨¢... porque var¨ªa mucho si se determina que es falta grave o muy grave", a?adi¨® el consejero de Medio Ambiente.

Los 60.000 litros de gas¨®leo emprendieron un viaje bajo tierra desde Fuencarral que termin¨®, horas despu¨¦s, en la depuradora de Valdebebas. De all¨ª no han pasado. Los t¨¦cnicos municipales aseguran que al r¨ªo Jarama no ha llegado ni una sola gota.

Cr¨ªticas de los ecologistas